Mara Salvatrucha, en la mira de militares y la PGR
Tuxtla Gutiérrez, Chis , 10 de diciembre (apro)- Por ser este un problema de seguridad nacional, el gobierno de Chiapas, a través de la Procuraduría local, decidió pedir la intervención de las fuerzas federales, principalmente del Ejército Mexicano, a fin de patrullar e inhibir la incidencia delictiva a lo largo de las vías del tren donde opera la banda internacional Mara Salvatrucha
En menos de 15 días, dos ataques de la Mara Salvatrucha han dejado como saldo seis personas muertas y más de una veintena de heridos, todos ellos ilegales que iban rumbo a Estados Unidos, a bordo de vagones y carro-tanques del tren de la línea Chiapas-Mayab
El miércoles, el Instituto Nacional de Migración (INM) reportó que por los hechos ocurridos el 27 de noviembre y el 9 de diciembre pasados, ha diminuido el número de personas que se adentran de manera ilegal a la entidad
La Secretaría de Seguridad Pública desplegó en la zona patrullajes aéreos y terrestres, en tanto que la Procuraduría local detuvo en las últimas horas a diez presuntos participantes de la agresión a migrantes
Horacio Schroeder Bejarano, secretario de Seguridad Pública, y el procurador Mariano Herrán Salvatti consideraron --en conferencia de prensa efectuada en la ciudad fronteriza de Tapachula-- que el caso de los Mara Salvatrucha se ha convertido en un problema de seguridad nacional
Ambos dijeron que el gobierno del estado, a través de la PGJE, solicitó a la Policía Federal Preventiva (PFP), a la Procuraduría General de la Republica (PGR) y a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), “apoyo interinstitucional con el objetivo de establecer mecanismos coordinados, para atender --a través de un fuerte dispositivo de seguridad-- la problemática que generan estas células de expresión”
La Sedena se uniría a las acciones de vigilancia que ya lleva a cabo la PFP y personal de la PGR, a través de las Bases de Operaciones Mixtas Urbanas (BOMU), también con motivo del incremento de los actos delictivos que los integrantes de las bandas de delincuentes juveniles llevan a cabo en la región fronteriza de la entidad
Schroeder y Herrán Salvatti llegaron a la ciudad de Tapachula luego que les fue informado del nuevo ataque de los Mara, quienes a plena luz del día, aproximadamente a la una y media de la tarde del martes, subieron al tren de la empresa ferroviaria Chiapas-Mayab, y atacaron a unos cien migrantes que en él se transportaban
Según testimonios de los agredidos en el último ataque, el grupo --de aproximadamente 25 delincuentes-- portaba armas de fuego y machetes, con los cuales los amagaron y obligaron a despojarse de sus pertenencias A algunas mujeres las obligaron a quitarse la ropa para después abusar sexualmente de ellas
Durante esta acción los agresores dieron muerte con armas punzocortantes a las salvadoreñas Sandra Ramos Méndez e Hipólita Ramírez Mengíbar, ambas de 22 años También resultaron con heridas graves otra mujer y cinco hombres de origen centroamericano
Este es el segundo ataque masivo por parte de los Mara Durante el primero, efectuado la madrugada del 27 de noviembre, fueron muertos cinco migrantes Este hecho también se llevó a cabo por un grupo de aproximadamente 25 personas que subieron al tren en el que viajaban los indocumentados centroamericanos
En esta segunda ocasión, policías estatales llevaron a cabo un operativo de vigilancia vía aérea y terrestre, y lograron detener a diez de los presuntos agresores, cuatro de los cuales confesaron haber disparado contra los migrantes
El operativo de vigilancia se mantiene a la fecha, por lo cual el número de indocumentados que aborda el tren carguero que cruza la costa de Chiapas y Oaxaca, disminuyó radicalmente Personal del INM reveló que diariamente se detiene a unos cien migrantes en esta ruta
Lucas Asdrúbal Aguilar Zepeda, cónsul de El salvador en Tapachula, expresó su preocupación por los hechos, y señalo que precisamente este día fue repatriado el cadáver del expolicía salvadoreño Carlos Humberto Alfaro Guevara, quien murió en manos de presuntos Mara, durante un asalto la semana pasada