La caída de dos misiles crucero de las fuerzas aliadas en un mercado de la zona residencial de Al Shaab, al norte de Bagdad, dejando 14 muertos y 30 heridos provocó la indignación de civiles iraquíes que emitieron expresiones de apoyo a su presidente Saddam Hussein, a quien prometieron su sangre y sus vidas para defenderlo El ataque es el peor incidente con civiles que se ha registrado desde que comenzó la guerra, y también afectó las instalaciones de televisión y comunicaciones del régimen de Saddam Hussein Los funcionarios de Defensa acordonaron el lugar de la tragedia mientras centenares de personas se aglomeraron frente a éste Algunas, en señal de protesta, levantaron sus puños y gritaron una de las más significativas frases del Islam: “no hay otro Dios que Dios” Otros más aseguraron que los ataques eran prueba de que los aliados “están sintiendo la derrota”, y unos más, en un acto de suprema fidelidad al régimen de Saddam Hussein, le prometían a éste su sangre y sus vidas por defenderlo La televisora Al Jazeera mostró algunas tomas de la zona afectada Se alcanzaban a ver varios automóviles incinerados y un cuerpo ensangrentado que era extraído del lugar Entre tanto, la división de televisión de Associated Press (APTN) mostró un cráter a media calle, un edificio calcinado, autos destruidos y cadáveres en bolsas plásticas apilados en una camioneta Por la tarde, los ataques se centraron en los sistemas de comunicación del régimen iraquí Un misil logró sacar del aire a una de las televisoras nacionales de transmisión satelital, pero sólo fue durante unas horas Al respecto, el vocero del Comando Central estadunidense indicó que “estos objetivos son elementos clave del comando y del control del régimen” El Comando Central del Ejército estadunidense afirmó previamente que las fuerzas aliadas han adoptado medidas extraordinarias para proteger a la población civil A pesar de la precisión de los misiles --pregonada por el ejército estadunidense--, esta es la segunda ocasión que los bombardeos afectan áreas civiles El martes, una casa en un barrio popular de Bagdad fue el blanco de uno de los misiles, provocando la muerte a cinco iraquíes Más tarde, la sede de la televisora oficial de Irak también fue sacudida por los bombardeos De este último incidente no se tienen reportes de heridos o muertos, pero la televisora dejó de transmitir Al respecto, el secretario de Defensa estadunidense, Donald Rumsfeld, extendió sus condolencias a los familiares de los cinco muertos El gobierno iraquí se reservó el derecho de exigir indemnización por los fallecidos 26/03/03