* Denuncian incursiones de militares que buscan ubicar a simpatizantes del EZLN Tuxtla Gutiérrez, Chis , 20 de agosto (apro)- Los primeros roces entre una Junta de Buen Gobierno zapatista y las autoridades constitucionales establecidas ya se empezaron a gestar La primera misiva de una Junta de Buen Gobierno, ya en funciones, de las bases de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), salió el miércoles En ella denuncian que el gobierno municipal de Palenque, el estatal de Pablo Salazar y el federal de Vicente Fox, han empezado una estrategia de hostigamiento y de contrainsurgencia en la zona, al querer construir obras sin el consentimiento de las autoridades rebeldes La Junta de Buen Gobierno ubicada en el Caracol de Roberto Barrios, sede de uno de los 30 consejos autónomos zapatistas, dio a conocer que, el 16 de agosto, el alcalde de Palenque inauguró --con indígenas priistas de este ejido-- la reparación del camino de terracería En los medios de comunicación, en la radio –principalmente las “controladas por el mal gobierno”--, presumen y engañan a la población indígena, diciendo que este camino es para su beneficio, para que sea más fácil mandarles su proyecto ‘piso firme’, es decir, para llevar otras obras, pero lo que es cierto es que se trata de que el Ejército Mexicano se pueda desplazar más fácilmente y pueda continuar con su campaña de hostigamiento y contrainsurgencia” Como un primero paso, denuncian, “lo que se trajo es más rencor y provocación, pues los priistas se sienten más alzados” Esto se demuestra porque ya han empezado a cobrar peaje, cuotas para transitar Al pastor de la Iglesia pentecostés, Pascual Gómez Pérez, quien conducía una de las camionetas del municipio autónomo, le cobraron 50 pesos para poder pasar por el ejido “También estuvieron los últimos días insultando al chofer de otra ‘camioneta autónoma’, así como pidiéndole que les trajera bebidas alcohólicas”, dice la carta de los rebeldes Denunciaron también que las radiodifusoras locales han estado intentando manipular a la población, al señalar que en la comunidad de Roberto Barrios “ya no hay zapatistas” “Nos preguntamos cuánto les debe pagar la presidencia municipal de Palenque a los reporteros para que digan esas mentiras” Desde que inauguraron el revestimiento de la carretera, han visto pasar por su comunidad una serie de autos con personas “sospechosas”, supuestamente interesadas en la construcción del centro turístico de las cascadas de Río Bascan Para ello, tienen entendido que ya abrieron brecha y que hay fecha para el inicio de la construcción del camino que llevará desde el ejido Puyipá hasta las cascadas, y la fecha sería el 1 de septiembre En el proyecto del centro turístico además van a participar instituciones como INI, Sedesol, SRA, Semarnap y Secretaría de Turismo Fijaron que “las bases de apoyo zapatistas y las comunidades autónomas en rebeldía van a tomar medidas más allá de las denuncia, si el gobierno sigue insistiendo en la colocación de este centro turístico” Y como voceros de esos consejos autónomos, denunciaron recientes casos de hostigamiento militar: En el municipio rebelde Del Trabajo, el 11 de agosto, a las 19:20, entró un convoy del Ejército en el ejido Belisario Domínguez Estuvieron dando vueltas por toda la comunidad, hasta en el centro, durante 30 o 40 minutos “Una persona del ejido les preguntó que qué estaban haciendo, y los soldados dijeron que andaban buscando a una persona que se llamaba Cristóbal Salieron de la comunidad sin hablar con nadie más”, dice la misiva También en el municipio autónomo Vicente Guerrero, el 10 de agosto a las 11:00 llegó un camión con 20 soldados a la comunidad de Francisco Villa, “interrogando a muchas personas Minutos después se metieron a los solares y les pedían a los jóvenes que jugaran con ellos” En ese mismo municipio, pero en las inmediaciones del camino que va al ejido San José Usumacinta, se instaló un retén militar con seis elementos “Le preguntaron a un señor que si pasan migrantes por ese lado y quiénes lo cruzan También le dijeron a esa persona que otro día regresarían, y que le traerían comida y cerveza para que platiquen bien” También a la comunidad Arroyo Granizo llegó un carro con 20 elementos del Ejército federal, dirigiéndose al campo de aviación para fotografiarlo, “pero no se les permitió Querían saber quiénes eran las autoridades ejidales, pero no se les dio la información Avisaron que iban a regresar” Dicen que después de haber regresado las autoridades autónomas de la fiesta en el Caracol II, de Oventic, dos militares recorrieron por la tarde y parte de la noche la comunidad de San Pedro, Portaceli, La Caoba, San Francisco Palenque y Cuauhtémoc Chancalá El 11 de agosto también al ejido Nueva Betania llegaron 20 soldados en un camión grande, al mediodía, “preguntando si hay bases de apoyo del EZLN” Ese mismo día, a las ocho de la noche, llegaron dos carros de soldados a la comunidad Boca Chancalá; uno de ellos se quedó en la calle principal y el otro se fue hasta un puente cercano “Preguntaban si el camino termina ahí o si continúa, porque según ellos se les había perdido un compañero y lo estaban buscando” Denunciaron también que el 13 de agosto, por la mañana, un grupo de soldados estaba pescando en el arroyo El Azufre, a medio camino del ejido Pueblo Nuevo Usumacinta “Al pasar las personas les hacían varias preguntas Les decían que si hay zapatistas Algunas les dijeron que sí hay, en el ejido Las Delicias, y ahí mismo, en San José” Al día siguiente por la tarde, al ejido Albino Corzo llegó un camión de soldados “Estacionaron su carro, se bajaron seis elementos, tres de ellos se metieron en una casa abandonada a jugar baraja y los otros tres se fueron a andar los solares, mientras el resto permanecía en el vehículo” Para los rebeldes, las incursiones militares se han estado dando también en las comunidades de Francisco León, ejido Río San Diego y Arroyo Jerusalén Ante esta oleada de acoso y hostigamiento militar a las bases de apoyo del EZLN, la Junta de Buen Gobierno de Roberto Barrios exigió al gobierno el retiro del Ejército de sus comunidades, y que les sean respetados sus derechos