Interpone "La Quina" segunda demanda penal contra Romero Deschamps
* Lo acusa de fraude por 250 mdp en perjuicio del sindicato petrolero
* En su querella incluye al fallecido Sebastián Guzmán Cabrera
México, D F 26 de agosto (apro)- Una vez más, Joaquín Hernández Galicia, “La Quinta”, exdirigente del sindicato petrolero, acudió a la Procuraduría General de la República (PGR), para interponer una demanda penal contra Carlos Romero Deschamps, ahora por un presunto fraude que asciende a unos 250 millones de pesos
Un dato extraño: en la demanda se incluye a un muerto: Sebastián Guzmán Cabrera, el mismo que sucedió a Hernández Galicia en enero de 1989, luego del llamado “quinazo” perpetrado por el presidente Carlos Salinas de Gortari y Fernando Gutiérrez Barrios, en ese entonces secretario de Gobernación
Según Hernández Galicia, Guzmán Cabrera fue el primero que empezó a disponer de los bienes del sindicato, en complicidad con Romero Deschamps
Apenas el 21 de agosto, “La Quina” se había presentado ante la PGR con un equipo de abogados, tal como lo hizo ahora, para interponer una querella por varios delitos: robo, fraude, despojo y abuso de confianza contra Carlos Romero
Al mismo tiempo, a sus 81 años de edad, el exlíder petrolero anunció una gira de trabajo por las 36 secciones sindicales para promover, dijo, un programa de trabajo en beneficio de los trabajadores y buscar la democratización del sindicato
Algunos reporteros le preguntaron ese día si su proyecto político estaba apoyado por el gobierno federal Respondió: “Sigo siendo un líder, soy un ganador”
Así, el panorama se complica para Romero Deschamps a cinco días de que pierda el fuero, pues tiene pendientes órdenes de aprehensión por los delitos de uso indebido de atribuciones y facultades, así como por peculado –éste último es delito grave --, ya que fue absuelto por la PGR respecto del delito de lavado de dinero
La demanda de fraude contra Romero Deschamps se sustenta, según Hernández Galicia, en el hecho de que para obtener un préstamo de Pemex de 640 millones de pesos –que fueron a parar a la campaña del PRI– el líder petrolero aseguró que el sindicato presentaba rezagos salariales, pagos incumplidos, canchas deportivas en mal estado y proyectos de construcción de viviendas que nunca se cumplieron
La acusación por despojo, añadió, es porque desapareció, de un solo golpe, más de 120 tiendas sindicales creadas por “La Quina”, vendió maquinaria y ranchos que eran propiedad de los trabajadores
El de abuso de confianza se configura, añadió, porque “de todo lo que vendió Romero Deschamps, ningún centavo fue para los trabajadores”
De nueva cuenta, Hernández Galicia acudió a la PGR, acompañado de unos 150 simpatizantes; allí, hizo entrega de documentación que, según dijo, sustenta la denuncia penal que interpuso contra Romero Deschamps
Con base en la información que dispone y los documentos que entregó a la PGR, Hernández Galicia señaló que el fraude al que se refiere se perpetró el 10 de enero de 1989, el mismo día en que fue encarcelado por acopio de armas y otros delitos graves
En la denuncia se establece que Sebastián Guzmán Cabrera –quien sucedió a Hernández Galicia en el cargo– y Romero Deschamps, se coludieron con los líderes de las 36 secciones sindicales, así como con empleados de distintos niveles de Pemex para saquear las arcas del sindicato y hasta la fecha no han rendido cuentas de los recursos y bienes de los que se han apoderado, así como el destino que les dieron
El exdirigente recordó que durante su gestión al frente del sindicato se administraron de tal forma las cuotas de la base trabajadora que con ellas se logró la adquisición de bienes inmuebles, tiendas de consumo, granjas ganaderas y fábricas
No obstante, después de su caída como líder y su posterior detención, los dirigentes que siguieron al frente del sindicato –Guzmán Cabrera y Romero Deschamps– hicieron mal uso de esos recursos, así como de las cajas de ahorro y el dinero de los bancos que pertenecían al sindicato
Hernández Galicia sostuvo que no desconfía de las autoridades y, más bien, dijo tener confianza en que, con las denuncias interpuestas, las autoridades puedan investigar estos fraudes y se pueda ejercitar acción penal contra los responsables