* El mecanismo fortalece el estado de derecho a escala mundial, reitera México, D F, 24 de diciembre (apro)- La entrada en vigor del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, el 1 de julio de 2002, y la puesta en funcionamiento de la CPI en el 2003, significaron un gran paso adelante en la lucha en favor de la justicia mundial Miembros de Amnistía Internacional de todo el mundo han estado presionando a sus gobiernos para que ratifiquen el Estatuto, desde su adopción en la ciudad de Roma el 17 de julio de 1998 Amnistía Internacional pide a todos los Estados, incluido México, ratifiquen el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, con el fin de reforzar el estado de derecho a escala mundial El 17 de julio de 1998, en el contexto de una conferencia diplomática celebrada en Roma, la comunidad internacional adoptó el Estatuto de la Corte Penal Internacional El tratado ha sido aclamado por gobiernos, expertos en asuntos jurídicos y por la sociedad civil, como el progreso más significativo en materia de derecho internacional desde la adopción de la Carta de las Naciones Unidas El Estatuto de Roma prevé la creación de un tribunal penal internacional de carácter permanente, encargado de enjuiciar a las personas acusadas de genocidio, crímenes de lesa humanidad y de guerra La existencia de esta Corte tendrá especial importancia, ya que: servirá como elemento disuasorio para aquellas personas que se planteen cometer este tipo de crímenes En la mayoría de los casos, durante los últimos 50 años, los mecanismos internacionales destinados a enjuiciar a las personas acusadas de estos crímenes se establecieron a posteriori, una vez cometidos Su jurisdicción será mucho más amplia que la de los tribunales especiales existentes Por ejemplo, el trabajo del Tribunal Penal Internacional para la exYugoslavia y del Tribunal Penal Internacional para Ruanda, se ha limitado a los crímenes cometidos en un territorio determinado, mientras que los perpetrados en otros lugares no se han abordado; y el Estatuto recoge una serie de disposiciones avanzadas destinadas a proteger a las víctimas frente a la retraumatización, así como una disposición en virtud de la cual la Corte podrá dictar una decisión contra cualquiera que haya sido condenado para que proporcione una reparación, ya sea en forma de indemnización, restitución, rehabilitación, satisfacción y garantías de no repetición Amnistía Internacional ha participado activamente en todas las fases del establecimiento de la Corte desde 1993 En concreto, a través de las siguientes actuaciones: Tras la adopción del Estatuto, Amnistía Internacional lanzó una campaña mundial en favor de la ratificación, y sus miembros en todo el mundo siguen presionando a los gobiernos para que así lo hagan Hasta el 1 de octubre de 2004, 139 Estados habían firmado el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, y 97 lo habían ratificado o se habían adherido a él El mismo entró en vigor el 1 de julio de 2002 México figura entre los Estados que solamente han firmado (7 de septiembre del 2000), pero no lo han ratificado