México, D F, 16 de febrero (apro-cimac)- “Si falla el antes, cuanto antes”, es una de las frases publicitarias que podrían utilizarse en la mercadotecnia ante la introducción de las píldoras anticonceptivas de emergencia en la Norma Oficial Mexicana de Planificación Familiar por la Secretaría de Salud, como uno de los métodos al que se puede recurrir cuando falla o después de un coito sin protección Si se toma antes de las 72 horas puede prevenir un embarazo no deseado, pero no protege del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (Sida) o de las Infecciones por Transmisión Sexual (ITS) Por lo que debe ser un método de uso ocasional y en ningún caso puede sustituir a los anticonceptivos habituales Aunque los científicos señalan que no es abortivo, hay quienes señalan lo contrario, la polémica surge por la falta de un proceso previo de información y educación formativa en el tema de la sexualidad Es un asunto que plantea un blema ético-médico y deontológico triviales y merecedores de comentario El mecanismo de acción incluye un componente de significado ético fuerte: impide la anidación y, concepción del desarrollo del embrión humano Recomendar y aceptar la recomendación lleva una carga fuerte de responsabilidades, según las creencias religiosas y morales, en las que juegan un papel muy importante los factores de dos órdenes: uno que podríamos asignar al área de la ética biológica; el otro al de la ética profesional El primero consiste en saber qué es lo que ocurre en el organismo de la mujer cuando hace uso de la píldora de emergencia El segundo en analizar, a la luz de los principios médicos, es qué requisitos de información no sesgados se brindan con el respecto a las personas y sus convicciones Lo relevante es que hay una nube de ignorancia y estimaciones indirectas, aunque relativamente confiables, y que la píldora de emergencia juega un papel decisivo, aunque no cuantificado en la eficacia del tratamiento Ante las claridades y ambigüedades, una situación así obliga a actuar con la debida información, hablar claro y con conocimientos, trasmitidos a través de los servicios de salud pública, folletos informativos, teléfonos de información especializada gratuita y, por supuesto, de una educación sexual en todos los niveles de la enseñanza tanto pública como privada La evolución histórica de la contracepción ha seguido una trayectoria bien definida, de la anovulación a la intercepción, del ovario al endometrio, de antes de la fecundación a después de ella De modo tal que en los últimos 50 años, no obstante, se sigue hablando de contracepción Pero sólo pocos manejan el conocimiento Por lo que insisto en que la educación seria y profesional es básica De acuerdo con cifras que se manejan para Latinoamérica, se producen seis millones de abortos y seis mil muertes maternas por esta causa En México, el aborto es un problema social y de salud pública, ya que se realiza clandestinamente y en condiciones altamente insalubres Significa la cuarta causa de muerte Se estima que 20 por ciento de las mujeres han sufrido alguna vez un aborto y, aunque ha disminuido, la mortalidad por esta causa aún es alta sobre la población entre 20 y 34 años de edad En cambio, otra causa de muerte materna es la toxemia cuya tendencia es creciente Esto significa que los niveles de mortalidad materna son una advertencia acerca de insuficiencias en la cobertura y calidad de los servicios de salud reproductiva Nos falta salud y educación Las leyes sobre el aborto del país datan de los años 30, la violación es la causa válida para todo el país La mayoría contempla la salvedad cuando el embarazo pone en riesgo la vida de la madre, así la constante legislativa en nuestro país es no castigar el aborto por violación, imprudencia y por peligro de muerte ¿Podrá negarse que ante estas realidades más vale prevenir, que lamentar? Pero la decisión depende de la conciencia personal, del conocimiento del tema y de la fe Aprobemos la educación sexual en las aulas *Senadora e integrante de la Comisión de Equidad y Género, y de la comisión especial que dará seguimiento a los asesinatos de mujeres en Ciudad Juárez