Fin del blindaje institucional...
México, D F, 18 de febrero (apro)- Después de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió en noviembre último que el delito de privación ilegal de la libertad no podía prescribir, pues no existía constancia de que hubiera cesado la consumación del delito, el destino de Luis de la Barreda Moreno y Miguel Nazar Haro, exdirectores de la Dirección Federal de Seguridad, quedó marcado, pues en la primera semana de diciembre fueron giradas las órdenes de aprehensión en su contra
De esa manera los temibles e intocables desde hacía tres décadas, Luis de la Barreda Moreno y Miguel Nazar Haro se convirtieron en prófugos de la justicia Sin el blindaje institucional que los protegía, enfermos y en el último tramo de su existencia, los exdirectores de la Federal de Seguridad (DFS) tendrán que saldar cuentas con el pasado
Luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió en noviembre último que el delito de privación ilegal de la libertad no podía prescribir, pues no existía constancia de que hubiera cesado la consumación, el lunes 8 el Primer Tribunal del Cuarto Circuito, con sede en Monterrey, Nuevo León, libró las órdenes de aprehensión en contra de los fundadores de la Brigada Blanca por su presunta responsabilidad en la detención y desaparición de Jesús Piedra Ibarra, en abril de 1975
Por haber intervenido de manera activa en esos hechos, la acción de la justicia alcanzó también a Juventino Romero, en aquella época agente de la Policía Judicial del estado de Nuevo León comisionado en la Dirección Federal de Seguridad
Sin embargo, antes de que la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) hiciera efectivos los mandamientos judiciales, los acusados de ser autores materiales e intelectuales de asesinatos, torturas y desapariciones durante la década de los setenta y principios de los ochenta, según documentos en poder de la Fiscalía Especializada para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado (Femospp), se dieron a la fuga, al igual que el expolicía judicial
El mismo día en que se turnó a la PGR la orden de detención, De la Barreda Moreno, padre del primer ombudsman capitalino, Luis de la Barreda Solórzano, tenía programada una audiencia en la Fiscalía Nunca llegó
Ante la posibilidad de que hubieran abandonado el país, la Procuraduría General de la República (PGR) extremó medidas y el jueves 11 solicitó el apoyo de la Interpol
Desde enero pasado, Proceso adelantó cómo el organismo dirigido por Ignacio Carrillo Prieto estaba por cerrar el cerco legal contra De la Barreda Moreno y Nazar Haro por el caso de Jesús Piedra Ibarra
Durante las investigaciones, la Fiscalía Especializada encontró vestigios documentales sobre la creación, organización y operación de la Brigada Blanca, el grupo paramilitar que De la Barreda Moreno y Nazar Haro crearon, en 1976, con el único propósito de exterminar las guerrillas urbana y rural del país
Las pruebas documentales muestran cómo el gobierno facilitó a la Brigada Blanca recursos humanos y materiales para su operación, incluido el Campo Militar Número Uno, donde, por cierto, estuvo detenido Jesús Piedra Ibarra
Ahí actuaron Nazar y su gente durante 10 años, de 1972 a 1982, con oficinas, equipo (armas incluidas), instalaciones para entrenarse y alojamiento Con testimoniales de las víctimas, la Fiscalía documentó que el Campo Militar Número Uno se usó como cárcel clandestina y cámara de tortura de guerrilleros, con la anuencia de la Secretaría de la Defensa Nacional
En la década de los setenta, De la Barreda Moreno era director y Nazar Haro subdirector de la DFS A la sazón, la policía política estaba concentrada en combatir la guerrilla, principalmente la Liga Comunista 23 de Septiembre En 1980, el entonces secretario de la Defensa Nacional, Juan Arévalo Gardoqui, le otorgó a Nazar el grado de teniente coronel como recompensa por sus servicios, siendo ya director de la DFS
En mayo pasado, Proceso dio a conocer también el pliego de consignación con base en el cual la Femospp fundamenta su acusación contra De la Barreda Moreno, Nazar Haro y Juventino Romero
Apuntalado en buena medida con la información obtenida por la Comisión Nacional de Derechos Humanos, el documento es contundente: asegura que las últimas personas que tuvieron a disposición "y privado de su libertad" a Jesús Piedra Ibarra fueron De la Barreda y Nazar
Además, confirma que en la captura del exintegrante de la Liga Comunista 23 de Septiembre intervinieron casi 20 efectivos de corporaciones policiacas estatales, federales y militares; que la DFS no estaba facultada para hacer detenciones; que la captura se efectuó sin mandamiento judicial, y que el detenido fue sometido a "maltratos físicos" durante su cautiverio, para luego ser trasladado al Campo Militar Número Uno, donde fue interrogado personalmente por el capitán De la Barreda Moreno
Las evidencias
Con documentos originales encontradas en el "Fondo DFS" del Archivo General de la Nación, la Femospp reconstruyó los acontecimientos que siguieron a la detención de Piedra Ibarra
Por ejemplo, encontró un oficio de siete hojas firmado por el entonces director de la DFS, capitán Luis de la Barreda Moreno, de fecha 20 de abril de 1972, dos días después de la captura de Piedra Ibarra Dice el oficio: Estado de Nuevo León, Monterrey- Jesús Piedra Ibarra (a) Rafael, quien fue aprehendido el día de ayer, hizo las siguientes declaraciones con esta fecha:
Dijo haber nacido el 17 de febrero de 1954, con domicilio en Flores Magón número 2339 Norte, colonia Carranza, "llegando a los rieles; en mi casa tengo una M-1, parque, tinta, papel, una cama, libros, un radio, una cómoda, una sala, un rifle calibre 243 y 3 mil o 3 mil 500 pesos"
Según el documento, Jesús aceptó que pertenecía a la Liga Comunista 23 de Septiembre; que participó en asaltos, secuestros y homicidios, entre ellos el de Eugenio Garza Sada, y que usaba el sobrenombre de Rafael
La participación de De la Barreda también sale a flote en otro documento de la DFS hallado por la Fiscalía Se trata de un oficio signado por el entonces director de la DFS el 19 de abril de 1975, en el que se refiere el cateo efectuado en la casa de la calle Flores Magón
Con base en tales evidencias, el pliego de consignación sostiene que De la Barreda Moreno "investigó, planeó y llevó a cabo la privación ilegal de la libertad" de Piedra Ibarra, tal como aseguraron y ratificaron en sus testimoniales ministeriales Juventino Romero y César Manuel Garza
Los exagentes de la Policía Judicial de Nuevo León declararon a la Fiscalía, el 17 de octubre de 2002, que Jesús Piedra Ibarra fue interrogado en el rancho La Peña la noche de su detención y que luego fue trasladado a las instalaciones de la DFS en la Ciudad de México, donde quedó a disposición de Miguel Nazar Haro
Ni en Monterrey ni en la Ciudad de México se hallaron constancias de la consignación, liberación o defunción de Jesús, por lo que la Fiscalía estableció en el pliego de consignación que "los últimos que lo tuvieron a disposición física y privado de su libertad" fueron De la Barreda Moreno y Nazar Haro
Aunque el juez de primera instancia consideró en abril pasado que el delito por el que se acusa a los exdirectores de la DFS y al expolicía judicial estatal ya había prescrito, la Corte resolvió que el delito seguía vigente, pues aún se desconoce el paradero de Jesús Piedra Ibarra, y regresó el caso al Primer Tribunal del Cuarto Circuito, cuyo titular, Isidro Gutiérrez González, ordenó librar las órdenes de aprehensión solicitadas por la Femospp
Avezados en estos menesteres, los sabuesos políticos del pasado huyeron antes de que el brazo de la justicia los alcanzara
Por tratarse de un delito considerado grave, ninguno de los tres tiene derecho a la garantía de amparo
Nazar ya estuvo a punto de ser recluido en una prisión, pero no por este tipo de casos, ni tampoco en este país
El 23 de abril de 1982, agentes del FBI detuvieron a Nazar Haro en San Diego, California, después de rendir testimonio ante el Gran Jurado, que investigaba una operación de robo de vehículos en el sur de Estados Unidos para venderlos en México (Proceso 286)
Acusado de ser la cabeza de la organización dedicada al tráfico de vehículos, Nazar había viajado a San Diego "para proteger” su nombre, según dijo, pero fue detenido bajo el cargo de perjurio, por mentir al Gran Jurado
Pasó la noche en el Centro Correccional Metropolitano y, mediante el depósito de una fianza de 200 mil dólares, logró recuperar su libertad provisional Sin embargo, en lugar de permanecer en el vecino país para seguir el proceso, de inmediato volvió a México
Al violar la garantía otorgada, Miguel Nazar Haro se convirtió, técnicamente, en fugitivo de la justicia estadunidense