ATUENDO: El América vive
* "El Atlas debe dejar de llorar": Beenhakker
México, D F, 2 de febrero (apro)- Resuelto quién será el representante dos de México en la Copa Libertadores, el entrenador holandés de las Águilas, Leo Beenhakker puede respirar tranquilo durante algún tiempo luego de las dudas que ha despertado su momento como entrenador, tras no calificar el torneo pasado
Ahora que él armó el equipo (no como el torneo pasado, en que se lo conformó la directiva), contratando simplemente al jugador que le hacía falta (Reinaldo Navia para el eje del ataque), Beenhakker sabe que sus responsabilidades apuntan hacia lo más alto de las competiciones en que participe su equipo
Nacido el 2 de agosto de 1942, a sus casi 62 años el entrenador holandés es, en sentido metafórico, de esos changos viejos que no se caen a la primer maroma
Con 25 años como entrenador, Beenhakker ha dirigido al Ajax de Holanda, al Zaragoza de España, al Volendam de su país, a la selección dos veces, al Real Madrid, al Grasshoppers de Suiza, al cuadro nacional de Arabia Saudita, al América dos veces, a las Chivas, al Vitesse, al Istanbulspor de Turquía y al Feyenoord
Su palmarés es rico: tres títulos de liga (1986, 1987 y 1988) y una Copa del Rey (1989) con el Real Madrid, otras tres ligas en Holanda (1980 y 1990 con el Ajax, y 1999 con el Feyenoord) y un torneo más de Copa con el Ajax en 1979
Con una larga historia y seguramente una voluminosa cuenta bancaria, Leo Beenhakker aceptó el reto de culminar la obra que no le dejaron terminar en el América en la temporada 1994-95 cuando, por un capricho del entonces presidente Emilio Díez Barroso, fue despedido faltando unas cuantas semanas para empezar la liguilla por el título
Aceptó enfrentarse a una de las peores bestias que torean las celebridades en el mundo: vencer su obra anterior
Leo lucha particularmente contra quienes ahora cuestionan su estilo de juego, su forma de parar al equipo y sus magros resultados
Aquellos 7-1, 8-1, 6-0 de la primera época con el América, cuando Kalusha producía el futbol en mitad de campo y Omam Biyik lo culminaba en el área contraria son parte de historia anecdótica de su primera etapa
Tenía a un Cuauhtémoc Blanco 10 años más joven, a un "Zague" en plenitud, a Joaquín del Olmo controlando el temperamento del medio campo y a un cuadro rico en potencialidades ofensivas
Hoy es otra cosa, son otros hombres, otros rivales, otra forma de jugar y otras circunstancias Además, lucha contra el título que conquistó Manuel Lapuente con un América más calculador, frío y de resultados
Pero la primera parte ya la terminó bien No perdió un solo juego en la primera fase del Interliga, eliminó al Morelia en el repechaje y venció al Atlas en la última oportunidad para pasar a la Libertadores
Ahí va, manteniendo una buena cuota de partidos sin perder, consiguiendo armonía en las líneas, pero sin desplegar aquel futbol vistoso, espectacular y ganador de hace diez años
El América vive, se mantiene en la Libertadores y se prepara para enfrentar una larga serie de partidos en ambos torneos (el casero y el continental)
Obviamente que los afanes de grandeza de una institución como Televisa y de un equipo como el América van más allá de simplemente calificar
Al América le urgen los títulos Y la presunción de los dueños y de los dirigentes es que con Beenhakker se puede conseguir
De lo que no puede estar segura la afición es de que este equipo superará en futbol al de hace diez años
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