* El nuevo líder de los burócratas capitalinos Enrique Hanff Vázquez planea el retorno a la FSTSE
México, D F, 3 de febrero (apro)- El gobierno de Andrés Manuel López Obrador se deshizo finalmente de otra pieza incómoda en la administración capitalina, el dirigente del Sindicato Único de Trabajadores, José Medel
La destitución de Medel se fue hilando desde hace rato y reventó con la filtración de documentos que lo incriminan en el uso de los fondos del sindicato para la compra de una franquicia en la tercera división del futbol profesional Su hijo aparece como representante del club que, por si fuera poco, utiliza como sede para sus juegos el deportivo “18 de Marzo”, propiedad del SUTGDF
Con una larga trayectoria laboral en el gobierno capitalino, en puestos de mediana categoría, Medel cobró relevancia en 1997, durante la primera administración perredista, la de Cuauhtémoc Cárdenas
En ese entonces, Cárdenas entró en conflicto con el sindicato, cuyo dirigente amenazó con paralizar la ciudad en caso que el gobierno cumpliera sus amenazas de arrebatarle ciertas prebendas En ese tiempo, el sindicato se encargaba de negociar con los proveedores la compra de uniformes, entre otras canonjías que los gobiernos priistas pusieron en sus manos para mantenerlos bajo control
Producto de esa relación clientelar con el priismo, el SUTGDF concentró una serie de privilegios que, en complicidad y connivencia con los exregentes capitalinos, se convirtieron en intocables islas de poder de los trabajadores Eufemísticamente, ellos le llamaban “conquistas laborales”
Antes de la llegada de López Obrador, en efecto, el SUTGDF ocupaba posiciones de mando en la administración capitalina, como Tesorería, Mercados, Limpia y Transporte, Control Vehicular, Registro Público de la Propiedad, centros deportivos y panteones
Además, el sindicato tenía una flota de “aviadores” en el sector central y en las delegaciones políticas, a pesar que el artículo 56 fracción VI de sus estatutos recomendaba “no hacer uso de la representación sindical para obtener beneficios personales”
Con sus más de 110 mil trabajadores, 39 secciones y sólidas raíces tricolores, el sindicato llegó, en suma, a convertirse en un poder informal
El 27 de octubre de 1997, su dirigente, Raúl Quintana, así lo hizo sentir al afirmar, categórico, que “sin nosotros, la ciudad se detiene”
Y de plano lanzó una clara advertencia a Cárdenas: “El ingeniero debe estar consciente de la problemática de la ciudad; si yo fuera él, no me cargaría un problema más enfrentándome con las organizaciones sindicales”
La abierta amenaza surtió efectos, y Cárdenas llevó la fiesta en paz con los líderes sindicales Únicamente se ocupó de ponerle candados a ciertas áreas estratégicas para evitar la fuga masiva de dinero
Con Rosario Robles al frente del GDF, el sindicato mantuvo ciertos cotos de poder, aunque de manera restringida
La estrategia de Rosario
Sin embargo, Robles comenzó a fraguar un plan para arrebatarle al PRI el control del sindicato con la incrustación de cuadros perredistas en las filas sindicales
Estos cuadros fueron posicionándose primero en las secciones más fuertes, como la uno, de Limpia Desde ahí, impulsaron la candidatura de Medel a la dirigencia del sindicato
Burócrata de medio pelo, Medel aprovechó la oportunidad y apenas alcanzó su objetivo, le dio la espalda al PRD y dejó ver que en sus venas corría la sangre tricolor
Apoyado por el PRI, Medel logró sortear con éxito los embates gubernamentales del gobierno de Robles
Sin embargo, el arribo de López Obrador al GDF y su política de austeridad golpearon duro al sindicato: a pesar de los aumentos salariales por encima de la inflación otorgados por el gobierno entrante, el sindicato comenzó a perder parte importante de sus feudos, así como diferentes fuentes de ingreso ilegales que usufructuaba
En respuesta, Medel trató de amedrentar a López Obrador con paros escalonados Luego siguieron movilizaciones callejeras y cierres de importantes avenidas, que únicamente causaron irritación entre la ciudadanía
El trabajo realizado por el PRD y el gobierno de la ciudad dentro del sindicato tuvo también sus frutos, y la sección más poderosa, la de limpia, con más de 13 mil trabajadores, le fue arrebatada a la dirigencia gremial Poco a poco, Medel perdió fuerza y su caída era cuestión de tiempo
Ante el riesgo de perder el control de una de las organizaciones clave del corporativismo, el PRI maniobró y defendió a Medel de los ataques perredistas En las elecciones de 2003 le tendió un salvoconducto al darle una diputación local
Amigo de Elba Esther
Medel también se alió con la secretaria general del PRI, Elba Esther Gordillo, y cuando ésta fue destituida de la coordinación del grupo parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados, inmediatamente anunció su salida de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), junto con el SNTE y otras agrupaciones
Amparado en su fuero, Medel intentó contraatacar y volvió a retar al gobierno de López Obrador, pero sin éxito Sin poder de convocatoria, pérdidas las secciones más fuertes del sindicato y sin un partido fuerte que lo defienda, Medel se fue quedando solo
Y López Obrador le dio la puntilla al filtrar documentos que lo involucran en uso indebido de los fondos sindicales
El escándalo ocasionado por ese hecho empujó a Medel a separarse de la dirigencia del sindicato, bajo el pretexto de tener una “apretada” agenda de trabajo en la Asamblea Legislativa del DF
Un perredista al relevo
Mientras se designa a su sucesor, en un plazo de ocho meses, su lugar fue ocupado por Enrique Hanff Vázquez, un dirigente vinculado al PRD
Al tomar posesión del cargo, Hanff Vázquez dijo que "me comprometo a dar el máximo de mis esfuerzos para lograr la unidad de nuestro sindicato"
Dijo que buscará el bienestar de la base trabajadora y que esto sólo podrá lograrse con un sindicato inteligente, propositivo, que privilegie el diálogo y que su ideología sea congruente con los tiempos actuales
"El éxito y el triunfo es algo común en todos ustedes, la capacidad del liderazgo, la fuerza de su poder de convocatoria, en fin muchas virtudes envuelven a cada uno de ustedes"
Fuera del auditorio sindical, un centenar de trabajadores se inconformó por haber sido excluido de la designación del nuevo líder
En su conferencia de prensa de las mañanas, López Obrador no quiso hablar de la dimisión de Medel Sólo comentó que respeta la vida interna del sindicato
Poco después de haber tomado posesión del cargo, Hanff acudió a la sede de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE) para entrevistarse en privado con su líder, Joel Ayala
Antes de la charla, Hanff esbozó la posibilidad de regresar a la FSTSE, al señalar que no habrá rompimiento con la central de burócratas
Dijo también que el congreso extraordinario determinará si se audita la gestión de Medel, e informó que será el próximo viernes cuando reciba de manera formal las instalaciones y los recursos del sindicato