México, D F, 9 de febrero (apro)- El trabajo es el mejor medio para escapar de la pobreza, sostiene Juan Somavía, director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), y es lo que más escasea en América Latina y, en particular, en México El especialista plantea también que la reducción de la pobreza favorece necesariamente a la economía, y advierte que “la competencia cada vez más intensa por mercados limitados amenaza con crear ciclos cada vez más frecuentes de prosperidad y depresión que propician la especulación y la codicia, y no las inversiones productivas Una campaña eficaz para elevar el poder adquisitivo de la mayoría de la población mundial y, en particular, de quienes tienen los ingresos más bajos, es fundamental para poder ampliar y desarrollar los mercados” Pero el caso del empobrecimiento no es nada más de México Según datos de la OIT, el número de personas que vivían en la pobreza en la década de 1990 en el África subsahariana aumentó un 25 por ciento, hasta alcanzar casi los 500 millones Durante ese mismo periodo aumentaron las cifras de los que vivían en la pobreza en América Latina y el Caribe, que pasaron de 121 a 132 millones, con una cuarta parte de la población subsistiendo aún con dos dólares diarios o menos Aunque en China y otros países asiáticos se observan algunos signos positivos, el panorama es más sombrío En México, aunque la Secretaría del Trabajo, no es precisamente la responsable de los programas de ayuda a los sectores de menores ingresos, sí tiene dentro de su ámbito establecer estrategias y aplicar políticas que propicien las mejores condiciones para que haya inversiones, para que las empresas paguen salarios de acuerdo con sus posibilidades y para que haya relaciones laborales adecuadas En ese renglón no hay buenos resultados México forma parte de las cifras negativas en materia de empleo En el mundo, según cifras de la OIT, el desempleo afecta a 180 millones de personas y la cifra continúa creciendo Otro dato más de ese organismo internacional señala que durante los próximos diez años se incorporarán a la población en edad de trabajar más de mil millones de niños y adolescentes Además, “en la mayoría de los países en desarrollo, los jóvenes tienen que elegir entre trabajar en la economía informal o no trabajar Esto augura un aumento de la pobreza en el futuro” México puede ser muy bien el ejemplo de cómo la población se está empobreciendo porque cada vez más escasean los trabajos