San Salvador (apro) - El presidente salvadoreño, Antonio Saca, regresó a casa con las “manos vacías” de una gira por Estados Unidos que el mismo gobierno y la prensa local habían anunciado como promisoria en muchos aspectos Quizás la mala suerte acompañó al joven y recién estrenado mandatario: el martes 13 fue el día elegido para la reunión tan publicitada con su homólogo George W Bush, en la Casa Blanca “Martes 13, ni te cases ni te embarques”, reza la superstición popular Antonio Saca, quien asumió el gobierno en El Salvador el pasado 1 de junio, por primera vez se encontró con Bush, en Washington Se trataba de un encuentro de cortesía o protocolar, que por lo general es del tipo que se usa en Latinoamérica para que los nuevos líderes conozcan al inquilino de turno en la Casa Blanca No obstante, previo a la visita, funcionarios de alto rango y el mismo Saca anunciaron que los principales puntos que trataría con Bush estarían referidos a buscar una prórroga del programa llamado Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés), que beneficia a unos 300 mil salvadoreños residentes en Estados Unidos, así como gestionar la aprobación del Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica y Estados Unidos (CAFTA) Al mandatario, además de sus más cercanos colaboradores, lo acompañaron en el viaje a la capital estadunidense un grupo de periodistas de los medios más importantes de El Salvador, a los que regularmente les dio entrevistas exclusivas --desde el viernes 9 al 13 de julio--, mismas que ocuparon grandes espacios, llenos con los pormenores de sus gestiones Desde antes de la partida a Washington, la noticia del viaje presidencial había acaparado la atención de la prensa local, que presentaba a Saca como un gestor político ágil y capaz de traer a su regreso la firma o el compromiso estadunidense del TPS y del TLC Los titulares de la prensa local daban la impresión de que todo estaba “amarrado”: “Saca inicia ofensiva por el TPS”; “Estados Unidos abre posibilidad de otra prórroga del TPS”; “Saca pedirá protección migratoria duradera”; “Estados Unidos listo para renovación de TPS” La expectativa no era para menos: El Salvador es el país latinoamericano que recibe el mayor número de remesas familiares per cápita, debido a que casi una tercera parte de su población reside en Estados Unidos: 23 millones de salvadoreños, de una población total de 64 millones El ingreso de remesas en 2003 fue de 2 mil 100 millones de dólares Fotos del mandatario durante una misa en la que estuvo a lado de importantes funcionarios estadunidenses --como Roger Noriega, del Departamento de Estado-- lo hacían aparecer como “el salvador de El Salvador” El martes 13 El encuentro Saca-Bush fue breve 20 minutos después los salvadoreños regresaron a la realidad En uno de los jardines de la Casa Blanca el propio Saca dio a conocer ante la prensa la respuesta de Bush: las demandas del gobierno salvadoreño serían otorgadas en “su momento”, es decir, en enero próximo, antes de que en marzo venidero caduque el TPS vigente Lo que es peor, según dijo Roger Noriega, “si Bush no es reelegido en noviembre próximo no dará su aprobación” a la prórroga del TPS, es decir, todo quedaría en manos de John Kerry, candidato demócrata a la presidencia Ello tiene su marco de dificultad porque la derechista y oficialista Alianza Republicana Nacionalista (Arena) es aliada incondicional no sólo a los republicanos, sino al grupo que hoy gobierna la Casa Blanca Tampoco Bush contestó a Saca algo preciso acerca del CAFTA, que el gobierno ha comenzado a divulgar como la única opción o tabla de salvación del empresariado y del empleo salvadoreño frente a las gestiones comerciales de la República Popular China, cuyo ingreso a la Organización Mundial del Comercio (OMC) le permite ventajas competitivas en materia comercial, laboral y de inversión Saca ha dicho que esa acción de China, que paga a dólar la jornada laboral en las maquilas, arrasaría a Centroamérica si esta región no asegura el CAFTA Las maquilas otorgan a El Salvador unos 90 mil empleos y más de la mitad de sus exportaciones (el 599 por ciento en 2003, cuando ingresaron mil 881 millones de dólares por tal industria) Al respecto la situación ha creado incertidumbre porque Kerry ha confirmado que de ganar las elecciones en noviembre revisará detalladamente el acuerdo suscrito del CAFTA Las tropas a Irak Durante el gobierno pasado de Francisco Flores, correligionario de Saca en Arena, El Salvador y Estados Unidos tuvieron magníficas relaciones Flores, según el analista internacional Napoleón Campos, endosó la política exterior de su pequeña nación a los intereses de la Casa Blanca en la región, de tal modo que durante su administración se instaló en territorio salvadoreño una base militar para el control de la narcoactividad; fue el paladín impulsor del CAFTA y, finalmente, apoyó decididamente a Washington en la guerra contra Irak y comprometió al ejército de este país con el envío de tropas a la nación árabe en apoyo a la ocupación Numéricamente el contingente de soldados salvadoreños (más de 370) no es importante, pero políticamente significa para esta nación un apoyó sin condiciones a Bush “Los contingentes de otras naciones latinoamericanas (Nicaragua, Honduras y República Dominicana), así como España, se han retirado de Irak Pero el gobierno salvadoreño cree que eso es precisamente lo valioso de quedarse en Irak respaldando a Estados Unidos Con ello creen que obtendrán el TPS y TLC para El Salvador”, aseguró el excoronel David Munguía Payés Agregó que al interior de las fuerzas armadas no hay una posición unificada respecto al envío de las tropas, “pero en el seno de la oficialidad se considera que ir a Irak es relevante y que da puntos para los ascensos, así que muchos oficiales quieren ir voluntariamente” Por otra parte, confirmó que para la oficialidad salvadoreña es importante mantener buenos nexos con Estados Unidos No debe olvidarse que Washington fue aliado estratégico del ejército salvadoreño en su guerra contrainsurgente (1980-1992) Así se lo hizo saber Antonio Saca a Bush el día que se reunieron en Washington El envío de tropas a Irak fue el único punto concreto de lo conversado entre ambos mandatarios El envío de tropas, en un tercer contingente, ya ha sido confirmado y autorizado este jueves 15 de julio por el parlamento al gobierno de Saca Un batallón de tropas especiales de 382 efectivos se desplazará a la región de Diwaniya, en el sur de Irak, que el general Otto Romero, ministro de Defensa de El Salvador, considera menos peligroso que la región de Nayaf, donde está el actual campamento “Camp Baker”, que alberga a los salvadoreños “El envío de tropas a Irak es una acción de sumisión y de continuismo de la política obediente que ha mantenido El Salvador frente a las decisiones de Washington “Es totalmente incongruente que El Salvador envíe tropas con todas las irregularidades que se han dado en Irak con las torturas a prisioneros; con los fallos de la inteligencia que desmientes las razones de la invasión y con el prevaleciente estado de guerra en ese país árabe”, afirmó Hugo Martínez, dirigente del izquierdista Frente Farabundo Martí (FMLN), quien reiteró que finalmente las consecuencias de tales determinaciones tendrá que asumirlas el presidente Saca