Sofocan nuevo amotinamiento de presos en Chiapas
* Emplean gases lacrimógenos y colocan en celdas de castigo a los líderes del movimiento
Tuxtla Gutiérrez, Chis , 29 de julio (apro)- Por cuarta ocasión, cerca de 400 reos del nuevo penal de “El Amate”, que permanecían en plantón en la cancha de futbol, se amotinaron para exigir el cese de las severas medidas disciplinarias, por lo que cuerpos policiacos del Grupo de Reacción Inmediata sofocaron la inconformidad con gases lacrimógenos y colocaron en celdas de castigo a los líderes del movimiento
Los hechos se suscitaron cerca de la medianoche del miércoles, cuando los reos empezaron a lanzar objetos personales y demás artículos para obstruir la visibilidad de las cámaras de vigilancia en las casetas 3 y 4 del sector sur del penal
Los reclusos exigen les sea permitido tener sus propias cocinas y la visita diaria de sus familiares; en tanto otro grupo de inconformes denunció diversos actos de corrupción por parte de las autoridades penitenciarias
La madrugada de este jueves, los reclusos –la mayoría de origen indígena-- ubicados en el módulo de alta peligrosidad de “El Amate”, rompieron una de las vallas del centro de reclusión y se instalaron en el campo de futbol, en donde aún se mantienen
Los reos denunciaron que la alimentación que les es proporcionada por la empresa de uno de los hoteleros más importantes de esta entidad, Comedores Industriales de Chiapas SA (CICSA), constantemente se encuentra en estado de descomposición, lo que les ha provocado enfermedades gastrointestinales
“Socorro de ley”
Isabel Pérez, familiar de uno de los inconformes, dijo hoy que los internos exigen además les otorguen el recurso económico mensual de 560 pesos por cada reo, que se les daba antes en el penal de Cerro Hueco, el llamado “socorro de ley”
Aunque no se confirmó, se dijo que una de las personas que encabezaron el movimiento es el indígena Manuel Collazo Gómez, líder de la Organización de Pueblos Evangélicos de los Altos de Chiapas (OPEACH), cuyos agremiados en el interior reclaman puestos de fritangas para poder subsistir y mandar dinero a sus familias
Ante la protesta, un millar de policías estatales, armados con equipo antimotines, llegó al centro penitenciario, en donde tuvieron que usar gases lacrimógenos y así retomar el control del penal, en tanto hasta hoy se mantienen en estado de alerta
Por su parte, las autoridades penitenciarias, a través de un comunicado de prensa, dieron a conocer que las actividades del centro se realizan “con normalidad”, toda vez que el grupo inconforme representa “una mínima parte de la población interna”
Añaden que el grupo de policías estatales “asumió el control (del centro) auxiliado por el resto de la población interna que, en todo momento, se mantuvo al margen de esta situación”