Más allá de la retórica antimperialista, el recién ratificado presidente de Venezuela, Hugo Chávez, consiente a las empresas estadunidenses: les abre áreas de su territorio para la exploración y explotación de petróleo y gas No en balde los mercados recibieron con satisfacción su triunfo en el referéndum del pasado 15 de agosto: a diferencia de la dividida oposición venezolana, Chávez garantiza abasto de crudo y estabilidad en el mercado petrolero SAN FRANCISCO, CAL- El presidente de Venezuela, cuyo mandato ha sido ratificado con los resultados del reciente referéndum, fustiga verbalmente a Estados Unidos pero consiente a sus empresas petroleras, varias de las cuales están ligadas a los hombres de George W Bush Así, Petróleos de Venezuela (PDVSA) mantiene "asociaciones estratégicas" con más de 200 compañías extranjeras, entre las que destacan Exxon, Enron, Amoco, Conoco y Chevron-Texaco Venezuela es el quinto exportador mundial de crudo y aporta 15% del petróleo que consume Estados Unidos (150 mil barriles diarios) Y pese a la retórica "antimperialista" de Chávez, la relación comercial entre ambos países vive uno de sus mejores momentos porque, además, el mandatario venezolano otorga facilidades a las multinacionales estadunidenses para la exploración y explotación de petróleo y gas De esta manera, mientras Exxon busca gas natural licuado en la zona llamada Mariscal Sucre (Península de Paria), Mobil, Enron, Amoco y Conoco exploran La Ceiba, Golfo de Paria Este y Oeste, Guarapiche, Guanare, San Carlos, El Sombrero, Catatumbo, Punta Pescador y Delta Centro Retórica Según datos de PDVSA, los convenios con empresas extranjeras empezaron entre 1993 y 1996, cuando se realizaron las tres primeras rondas de apertura al capital extranjero en este rubro Ello atrajo "una inversión inicial superior a 2 mil millones de dólares y una producción adicional de crudo estimada en unos 260 mil barriles diarios" Por ejemplo, la Faja del Orinoco fue dividida en cuatro zonas: Zuata, donde participa Conoco; Cerro Negro, donde está presente Exxon-Mobil; Machete, que PDVSA comparte con Totalfinaelf y Statoil, y Hamaca, con Chevron-Texaco y Phillips Para la exploración y explotación de gas, la llamada Plataforma Deltana fue dividida en cuatro bloques Tres ya fueron asignados y el cuarto -con un estimado de 38 mil millones de pies cúbicos de gas- está en proceso pero, "hasta el momento, PDVSA comparte operaciones en esta área con Chevron-Texaco y Statoil", según información de la empresa venezolana Al mismo tiempo, Petróleos de Venezuela mantiene una firme presencia en Estados Unidos, principalmente a través de su filial CITGO, establecida en Tulsa, Oklahoma Esta empresa es propietaria de un grupo de refinerías que tienen capacidad para procesar al día más de 1 millón de barriles de crudo y se ubican en Corpus Christi y Houston (Texas), Lemont (Illinois), Paulsboro (New Jersey), Saint Croix (Virginia), Lake Charles y Chalmette (Louisiana) y Savannah (Georgia) CITGO tiene, además, 13 mil expendios de gasolina en Puerto Rico y Estados Unidos De hecho, es uno de los cinco principales distribuidores de gasolina en este país (abastece 10% del mercado), el cuarto en distribuir combustible de avión y el primer distribuidor de otros productos destilados "Venezuela, clave energética para Estados UnidosVenezuela ha sido y seguirá siendo uno de los principales proveedores de hidrocarburos de Estados Unidos", señala a toda página un anuncio de PDVSA que se publicó en vísperas del referéndum en los principales diarios venezolanos El desplegado destaca las excelentes relaciones entre la paraestatal y las multinacionales Exxon-Mobil, Chevron-Texaco y Conoco-Phillips Más: El 60% de las exportaciones de crudo de PDVSA va dirigido a Estados Unidos, país que, a su vez, encabeza la lista de inversión extranjera en Venezuela, con 85% del capital De ahí la importancia que tiene para los mercados la declaración del mandatario que triunfó en el referéndum: "La presencia de Chevron-Texaco en Venezuela indica que nuestra relación con Estados Unidos es histórica y profunda Aspiramos a que nuestra relación comercial con Estados Unidos tenga la misma dinámica positiva en lo político, en lo social y en todos los demás órdenes" Muy distinto es el discurso de Hugo Chávez en sus arengas políticas: "Debe saber el señor Bush que si se le ocurre la locura de bloquear o de tratar de bloquear a Venezuela, o peor aún para ellos, de invadir Venezuela, ni una gota de petróleo les llegará desde Venezuela, ni una gota de petróleo más" Respiro momentáneo El hecho es que Estados Unidos necesita del suministro de crudo venezolano, dependencia que se profundizará conforme aumente su consumo: El Departamento de Energía estima que dentro de 15 años este país tendrá que importar dos de cada tres barriles de petróleo La cercanía del país exportador, además, baja los costos Un embarque marítimo desde Venezuela tarda cinco días, mientras que desde el Golfo Pérsico tarda 45 días Por si fuera poco, diversos problemas afectan la estabilidad del mercado petrolero mundial El desastre de la guerra en Irak y la convulsión en Medio Oriente, las amenazas de huelga en Nigeria y la demanda legal contra la empresa Yukos en Rusia, entre otros factores, lanzaron los precios del crudo por encima de la barrera simbólica de los 45 dólares por barril El escenario venezolano agravaba la situación y el gobierno de Chávez jugó con ello En vísperas del referéndum revocatorio, Rafael Ramírez, ministro de Energía y Minas, declaró: "Nuestro triunfo es el único garante del suministro de petróleo a Estados Unidos Si Chávez pierde, el precio del barril de petróleo podría llegar a los 50 dólares" Y es que, pese a su retórica, el gobierno de Chávez garantiza lo que no podría hacer la dividida oposición venezolana: abasto y estabilidad al mercado petrolero Al menos por el momento Así, el triunfo de Chávez dio un respiro al mercado petrolero Los precios bajaron temporalmente a menos de 45 dólares Wall Street también reaccionó positivamente: disminuyó la prima de riesgo sobre la deuda, que había alcanzado 60% desde principios de 2003 Después de su triunfo, Chávez lanzó un mensaje: "A los países de la OPEP les ratifico que mi gobierno garantiza la estabilidad del mercado petrolero mundial y la integración de la OPEP para defender los intereses de nuestros pueblos" De cara a las elecciones presidenciales de noviembre en Estados Unidos, la Casa Blanca ya admitía que un aumento en el precio de la gasolina podría tener efectos negativos en la reelección de Bush A regañadientes, Washington tuvo que reconocer el triunfo de Chávez Sin embargo, los otros factores de inestabilidad internacional terminaron por imponerse El jueves 19, el crudo West Texas Intermediate (WTI, que cumple la función de marcador estadunidense) terminó cotizándose en 4870 dólares por barril y Wall Street envió mensajes de alerta para el mercado, ya que la OPEP y Arabia Saudita confirmaron que no pueden satisfacer con rapidez la alta demanda de consumidores como China e India, además del nerviosismo que ocasionaron los ataques a las instalaciones petroleras en Irak Quién dirige Las asociaciones estratégicas entre la empresa estatal venezolana PDVSA y las compañías estadunidenses no siempre han resultado exitosas Fue el caso de Science Applications Internacional Corp (SAIC), que se asoció con PDVSA para formar la compañía mixta INTESA para darle soporte y mantenimiento al sistema informático de la petrolera venezolana Pero Chávez amagó con la expropiación de INTESA; SAIC reclamó la propiedad total de la empresa amparándose en las leyes estadunidenses y la Overseas Private Investment Corporation (OPIC) -agencia gubernamental de Estados Unidos que garantiza las inversiones extranjeras- apoyó este reclamo Un documento de la OPIC señala que el fallo estadunidense a favor del reclamo de la propiedad de INTESA se debió a "numerosas declaraciones públicas del presidente Hugo Chávez, específicamente reconociendo la nacionalización de INTESA", por la que SAIC deberá recibir una compensación de 6 millones de dólares Desde 2002, Chávez acusó a INTESA de haberse unido a un paro general en su contra que interrumpió la producción petrolera de Venezuela, y Bernardo Álvarez, embajador venezolano en Washington, lamentó "que la OPIC haya permitido que las presiones políticas influyan en el resultado de una disputa meramente comercial entre PDVSA y SAIC" Alí Rodríguez Araque, presidente de PDVSA, se mostró extrañado: "La enorme cantidad de empresas que mantienen inversiones en la industria petrolera en Venezuela, con más de 25 mil millones de inversión directa a la fecha, es demostración fehaciente de nuestro compromiso con los más altos estándares de propiedad legal y comercial" Una investigación de los periodistas Alexander Foster y Tulio Monsalve descubrió quiénes eran los socios de SAIC Su presidente, JR Beyster, es miembro del Comité Asesor de Seguridad en Telecomunicaciones del gobierno estadunidense Además, señalan los periodistas, esta empresa posee "el cuerpo directivo más selecto de los militares de inteligencia del Ejército de Estados Unidos" Entre sus administradores están William Perry y Melvin Laird, exsecretarios de Defensa; John Deutch y Robert Gates, exdirectores de la CIA; el general retirado Max Thurman, comandante de la invasión a Panamá; Donald Hicks, jefe de investigaciones del Pentágono; Wayne Downing, excomandante en jefe de las fuerzas especiales de Estados Unidos; el general Jasper Welch, excoordinador del Consejo Nacional de Seguridad, y el almirante Bobby Ray Inman, exdirector de la Agencia Nacional de Seguridad y antiguo director de la CIA SAIC trabaja en las principales empresas petroleras del mundo (como Bp-Amoco, principal competidora internacional de PDVSA) y ha ganado los contratos más importantes para el diseño de los sistemas militares aeroespaciales del gobierno de Estados Unidos, en el que además desarrolla el sistema informático del Departamento de Defensa La organización ecologista Greenpeace publicó un documento sobre las relaciones de la administración Bush con las multinacionales y compañías petroleras, con el título ¿Quién dirige realmente la guerra contra Irak? El documento apunta: "George Bush es por supuesto un magnate del petróleo de Texas, aunque no uno de los de más éxito Su compañía Bush Exploration/Arbusto se fusionó con Spectrum 7 en 1984, ya que estaba al borde de la bancarrota, y más tarde fue adquirida por Harken Energy A cambio, George W Bush recibió 600 mil dólares en acciones, obtuvo un contrato de 120 mil dólares al año y un montón de amigos en el mundo del petróleo en Texas" Según este documento, Bush tiene acciones en British Petroleum, Duke Energy, Exxon-Mobil y Pennzoil, entre otras Por su parte, Condoleeza Rice, consejera de Seguridad Nacional, tiene conexiones con Chevron, que le puso el nombre de Rice a uno de sus buques petroleros de 130 mil toneladas en una muestra de gratitud por sus servicios Además, el vicepresidente Dick Cheney fue ejecutivo de la compañía petrolera Halliburton Greenpeace publicó también una lista de 20 corporaciones que contribuyeron a la campaña electoral de Bush en 2000 El organismo señala que las empresas del sector energético entregaron más de 27 millones de dólares con ese propósito La periodista Amy Goodman lo resumió irónicamente hace unos días, en su programa radiofónico Democracia ya: "Como yo siempre digo: la oligarquía petrolera ha retornado al poder George Bush, empresario petrolero fracasado; Dick Cheney, expresidente de la compañía más grande de servicios petroleros del mundo; Condoleeza Rice, dueña de un tanque petrolero de Chevron en Nigeria"