México, D F, 23 de septiembre (apro)- El asunto está muy claro hacia el 2006 y con franqueza lo dice Juan José Rodríguez Prats, un político que renunció al PRI al cabo de tres décadas, “ardido” por no haber sido senador, y se acomodó en el PAN: “Ante Roberto Madrazo y Andrés Manuel López Obrador, muchos panistas apoyaríamos al primero” Esta definición política de Rodríguez Prats no pasaría de ser una expresión más de un militante convencido de que su partido nada puede hacer para retener la Presidencia de la República, de no ser porque abundan las evidencias de que la decisión --al más alto nivel del poder público-- ya está tomada: Que el relevo de Vicente Fox sea Madrazo Madrazo, este personaje que entre otros obligó a Rodríguez Prats a salir del PRI y entrar al PAN que ahora busca presidir a nivel nacional, se perfila como el candidato alterno de muchos panistas que han articulado una estrategia con sus socios del PRI para evitar, al costo que sea, que los ciudadanos opten por López Obrador El ejemplo más nítido es el proceso del desafuero del jefe de Gobierno del Distrito Federal, antepuestos los criterios políticos a los jurídicos: Madrazo y sus testaferros afirman que no le harán el “trabajo sucio” a Fox y que los diputados de su partido votarán en conciencia En realidad, es al revés Decir que los priistas tendrán libertad para emitir su voto es la coartada que confirma la instrucción de Madrazo, que sólo necesita que voten 101 de los 223 diputados que, sumados sólo a los 150 del PAN, suman la mágica cifra de 251, la mayoría absoluta indispensable para que López Obrador vaya a la cárcel y quede liquidado políticamente para relevar a Fox Con toda tranquilidad, en realidad cinismo, Madrazo podrá decir que hubo priistas que estuvieron en contra y que en su partido se respetan las posiciones divergentes Habrá quien se lo crea, sobre todo los agudos analistas políticamente correctos, persuadidos además por los “acuerdos” legislativos que ha sido capaz de instrumentar el PRI, como la reforma al IMSS que lo reconcilió con los patrones “por el bien del país” En realidad, los que están haciendo el “trabajo sucio” a Madrazo son Fox y los jerarcas panistas asociados a la parte más putrefacta del PRI, como Carlos Salinas, en un acuerdo que le permitirá al actual gobierno dar una cuantas muestras de que no fue en realidad la traición a la legítima esperanza de los millones de mexicanos que votaron por el “cambio” que permitió, en cambio, el retroceso El desafuero de López Obrador, sin embargo, no es el único dato del acuerdo para que Fox y el sector que manda en el PAN hagan ese trabajo sucio, a espaldas de muchos panistas que, en su momento, sin duda se sublevarán ante la traición a los principios que dieron origen a ese partido político De por medio está, también, la impunidad ¿O de qué otra manera se puede llamar a la laxa actuación de la Procuraduría General de la República (PGR) en casos tan elocuentes de criminalidad como los de Rogelio Montemayor, el exdirector de Pemex que desvió 500 millones de pesos a la campaña presidencial priista del 2000? ¿O el silencio del procurador Rafael Macedo, apóstol del Estado de derecho, sobre el autoatentado del gobernador José Murat y el asesinato de un anciano en Oaxaca? ¿O la inminente salida de la cárcel de Raúl Salinas, gracias a la pachorra de la propia PGR? El asunto, entonces, es muy claro: Se trata de parar a López Obrador a como dé lugar, “por las buenas o por la malas”, como lo declaró con cinismo Jorge Castañeda, quien suele también rasgarse las vestiduras por el Estado de derecho, omiso de los atracos de su amiga la cacique magisterial Elba Esther Gordillo Así, ese personaje alto y de bigotito que prometió “sacar al PRI de Los Pinos” será el que pretenda entregar la banda presidencial a Madrazo, quien se placea ya como el gran estadista gracias a la desmemoria y a la delincuencia electoral Ese personaje, quien --hay que recordarlo-- gastó el equivalente a 82 millones de dólares en su campaña, que está involucrado en un asesinato ocurrido en su casa y que recibió dinero de narcotraficantes, entre otras conductas, es al que Fox y un sector del PAN impulsan Qué gran demócrata el presidente Comentarios: delgado@procesocommx