* Es vergonzosa, corta de miras y no funcionará, advierte México, D F 21 de diciembre (apro)- El diario estadunidense The New York Times cuestionó la ley de migración aprobada el pasado viernes 16 por la Cámara de Representantes de Estados Unidos En su editorial de este miércoles, el diario afirma que se trata de una medida "corta de miras" y que es "un reflejo del poder de los políticos xenófobos que quieren fortificar América, encerrar a inmigrantes ilegales y mandarles de vuelta a donde vinieron" El diario, uno de los más influyentes del mundo, coincidió con el presidente de México, Vicente Fox, en el sentido de que se trata de una ley "vergonzosa" Según el editorial, la legislación con la que se pretende inhibir la migración no funcionará Lo que hace falta es, dice, una ley que incluya un programa de trabajadores temporales y "algún camino para conseguir a largo plazo el estatus de legales a los que ya están aquí" The New York Times consigna, así mismo, que la "única esperanza real" para el Senado, el cual deberá debatir el proyecto en febrero próximo, es contar con un "paquete de medidas que aborde el complejo problema en su conjunto" Destaca que justo en esa dirección apunta la propuesta de los senadores John McCain (republicano) y Edward Kennedy (demócrata) La iniciativa McCain-Kennedy propone un programa para trabajadores indocumentados y extranjeros, crear un comité de seguridad fronteriza y promover la obtención de la residencia y la reunificación familiar de los inmigrantes residentes en este país No obstante, el diario indicó que un proceso de este tipo lleva su tiempo, lo que choca con los republicanos que buscan que el tema de migración les servirá para ganar votos en las elecciones legislativas de 2006 por lo que quieren acelerar el proceso La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el pasado viernes 16 la iniciativa republicana de Protección Fronteriza, Antiterrorismo y Control de la Inmigración Ilegal (HR 4437) que endurece la seguridad en la frontera con México Con este proyecto de ley, se convierte en delito penal la inmigración de indocumentados y autoriza el levantamiento de muros en zonas de la frontera con México para impedir el paso clandestino de inmigrantes Además, prevé la prisión de indocumentados, el reclutamiento de soldados para ejercer un mayor control de los pasos fronterizos, la supresión de la lotería de visas y la negación de ciudadanía estadounidense a hijos de migrantes sin papeles