* La fatídica mañana es recordada con aprehensión * Sólo nombres de muertos sigue sumando la tragedia Madrid, 10 de marzo (apro) - Era una mañana soleada, aunque con las gélidas temperaturas del frío invierno madrileño Como todos los días laborables, cientos de miles de personas se dirigían a sus puestos de trabajo utilizando el transporte público La mayoría de los que viven en el extrarradio de la ciudad prefieren utilizar la red de tren de cercanías, una de las mejores de Europa, por su comodidad y rapidez A las 7:38 de la mañana tres bombas hicieron explosión en el interior de un tren número procedente de Guadalajara antes de hacer su entrada en la céntrica estación madrileña de ferrocarril Atocha, en la calle Téllez, a 500 metros de los andenes Menos de un minuto después cuatro explosivos de gran potencia estallaron dentro de varios vagones de otro tren que había salido de la vecina Alcalá de Henares dentro de la misma estación, en el andén 2 A las 7:41 otros dos explosivos hicieron explosión en el interior de un tren en la estación El Pozo del Tío Raymundo, al este de Madrid; un minuto después, en la estación Santa Eugenia, se escuchó el sexto estallido Esa mañana del 11 de marzo del 2004, se perpetró el peor ataque terrorista conocido en España El saldo: 192 muertos y casi mil 500 heridos La tragedia cimbró al país y a la clase política gobernante, que en un afán de mantenerse en el poder, intentó involucrar al grupo separatista vasco ETA como responsable del atentado, pese a que desde las primeras horas, las evidencias apuntaban hacia Al- Qaeda, la cual el mismo día se adjudico los hechos La tozudez del gobierno español comandado por José María Aznar, lo llevó a perder el control político e impulsó la llegada del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, quien se alzó con la victoria tres días después en las elecciones generales A las cuatro de la tarde del día 13, la policía ya había detenido a tres ciudadanos marroquíes y dos hindúes, supuestamente vinculados a Al-Qaeda Sin embargo, poco después, Ángel Acebes, el ministro del Interior, volvía a comparecer ante la opinión pública para insistir de nuevo en la tesis de ETA, que se desvanecía por momentos A las seis de la tarde, unas 5000 personas se concentraban ante la sede principal en Madrid del Partido Popular La situación llegaba a extremos de máxima tensión que, a última hora de la noche se incrementó cuando comenzó a cundir el rumor de que el gobierno había intentado que el rey suspendiese las elecciones Nada de eso llegó a ocurrir Aprehensión ante la proximidad Las elecciones se celebraban en la fecha prevista y, hoy, los españoles, los madrileños y, muy en especial las víctimas viven con cierta aprehensión la proximidad de la fecha del primer aniversario de la matanza indiscriminada La mayoría de los autores materiales de la colocación de los explosivos –siete terroristas-- fallecieron el 3 de abril de 2004 en un suicidio colectivo en la casa de la madrileña localidad de Leganés cuando ya estaban cercados por la policía Sehane Ben Abdelmajid, “El Tunecino”; Jamal Ahmidan, “El Chino”; Abdennabi Kounjaa, “Abadía”; Rachid Oulad Akcha, Mohamed Oulad Akcha y Asir Rifaat Anuar Seis nombres de seis personas que participaron en la colocación material de las bombas en los “trenes de la muerte” de aquel fatídico 11 de marzo de 2004 Seis nombres de personas que, a su vez perdieron la vida en un abracadabrante suicidio colectivo –irónicamente con explosivos A esta lista de fallecidos de entre los responsables de la terrible matanza de hace un año, ahora hay que añadir también el nombre de Mustafá Zanibar, considerado uno de los máximos inductores y que también eligió el suicidio como salida desesperada de una situación en la que le esperaba una condena en prisión que, probablemente, le hubiera mantenido encerrado casi todo lo que le quedaba de vida Apareció ahorcado en su celda de la prisión de Zuera, en Zaragoza, el pasado 24 de febrero Estaba vinculado al grupo extremista Mártires de Marruecos, dirigido por Mohamed Achraf, actualmente en una prisión suiza y pendiente de extradición a España, donde se le reclama como presunto inductor de los atentados del 11-M y de la preparación de otros actos terroristas, como las tramas descubiertas para colocar explosivos en estaciones de ferrocarril en Madrid, el estadio de fútbol del Real Madrid, el Santiago Bernabéu, la Audiencia Nacional o la sede del Partido Popular en la madrileña calle Génova Pero no son éstos los únicos nombres vinculados al dolor y a la tragedia Rabei Osman el Sayed, “El Egipcio”, actualmente en prisión, es considerado el ideólogo y el organizador de los atentados Basel Ghayoun, también en prisión, fue reconocido por una pasajera que le llegó a advertir de que olvidaba su “mochila” en el interior de un vagón del tren Fouad El Morabit El Amghar, también en la cárcel, fue directamente implicado en la comisión material de los atentados por “El Egipcio”, y está comprobado que alojó en su domicilio al suicida Asir Rifaat Anuar Jamal Zougam, detenido por la policía fue reconocido por dos viajeros en dos trenes distintos y en dos estaciones consecutivas portando mochilas Era el suministrador de tarjetas y de teléfonos móviles a la conocida como célula de Morata, y se le incautó un teléfono y una tarjeta idénticos a los de la bomba que no llegó a estallar y fue desactivada en una comisaría de policía de la capital José Emilio Suárez Trashorras, permanece en prisión acusado de suministrar los explosivos para la comisión de los atentados, robados en una mina asturiana El precio que recibió por ello fue abonado en “especie”, grandes cantidades de droga Pero hay más 22 implicados permanecen en prisión y de los 74 que llegaron a imputarse a lo largo del desarrollo de la investigación, 62 continúan estándolo, incluidas dos mujeres, Carmen Toro –la mujer de Suárez Trashorras-- y Naima Oulad Akcha, hermana de dos de los suicidas de Leganés El largo sumario abierto sobre la investigación judicial de los atentados se compone de más de 38,000 folios recopilados en 111 tomos De lo que se está haciendo público de su contenido se desprende que, hasta el momento, ninguno de los 62 imputados ha reconocido su participación en los hechos, y eso incluye a Jamal Zougam y a Basel Ghayoun, quienes han sido reconocidos por varios pasajeros que lograron salvar sus vidas aquel fatídico día de hace un año Eso es lo que se extrae de la lectura de las declaraciones de estos acusados en dependencias policiales y judiciales, que pertenecen a la parte del sumario sobre la que ya no pesa secreto, aunque existen manifestaciones de 25 testigos protegidos que continúan siendo consideradas secreto sumarial El juez de la Audiencia Nacional, Juan del Olmo, encargado de la instrucción del caso y la fiscal, Olga Sánchez, antes de que el caso se cierre, pretenden llegar hasta el fondo de las razones por las que la mayoría de los terroristas implicados en la colocación material de las bombas tomaron la decisión de cometer el atentado el 11 de marzo y posteriormente suicidarse el 3 de abril Esa fecha podría encerrar algún significado y el instructor se ha propuesto averiguarlo Para ello no se descarta que desde la Audiencia Nacional se solicite al gobierno español el envío de documentos desclasificados que ya han sido utilizados en la Comisión de Investigación Parlamentaria del 11-M () Es parte de un viejo ajuste de cuentas con el Cruzado España, aliado de América en su guerra contra el Islam ¿Dónde está América, Aznar? ¿Quién os protegerá de nosotros a ti, a Gran Bretaña, a Italia, a Japón y a otros agentes? Cuando golpeamos a las tropas italianas en Nasiriya ya enviamos a los agentes de América una advertencia: retiraos de la alianza contra el Islam Pero no entendisteis el mensaje () Sacadnos las manos de encima, liberad a nuestros presos y salid de nuestra tierra; os dejaremos en paz Los pueblos de los aliados de Estados Unidos deben forzar a sus gobiernos a terminar esa alianza en la guerra contra el terrorismo, que significa guerra contra el Islam Si cesáis la guerra, nosotros cesaremos la nuestra () Dios es grande, dios es grande Ya llega el Islam Brigadas de Abu Hafs al Masri-Al Qaida El anterior es un extracto del texto de reivindicación de los atentados enviado al diario londinense Al-Quds Al-Arabi, enviado el mismo día 11 de marzo, para reivindicar la autoría de Al Qaeda de la espantosa matanza en Madrid Los hechos han demostrado que, pese a todos los intentos por tratar de atribuir a otro terrorismo la autoría de aquella matanza, la vía islamista radical era la que desde el comienzo se siguió en las investigaciones policiales, y que la relación entre esta masacre y la participación de tropas españolas en la invasión de Irak era evidente