Suiza: Portazo migratorio

lunes, 23 de octubre de 2006 · 01:00
Ginebra, 23 de octubre (apro) - La neutra Confederación Suiza, que no forma parte de la Unión Europea ni de la OTAN, adoptó el domingo 15 por referéndum la legislación más estricta para inmigración y refugiados del continente Las imágenes de centenares de africanos desembarcando en las costas españolas parecen haber golpeado las conciencias helvéticas, sacudidas por un alza de la delincuencia y la criminalidad relacionadas con el tráfico de drogas y el flujo migratorio, y por el peligro del terrorismo internacional vinculado al extremismo islámico En un país de 7 millones de habitantes, el 20% son extranjeros, es decir, casi un millón y medio de personas, a los que se suman alrededor de cien mil sin papeles Las dos leyes promulgadas por el Parlamento fueron aprobadas en plebiscito por 68% de los votos y entrarán en vigor a comienzos del año próximo La ley de extranjería hará muy difícil que un no europeo postule para un puesto de trabajo en Suiza Las empresas comunicarán sus necesidades al gobierno, que fijará un contingente anual de autorizaciones laborales, dando prioridad a las personas originarias de la Unión Europea, Islandia, Liechtenstein y Noruega "Las medidas ratificadas son inhumanas, discriminatorias, arbitrarias y represivas", exclama Martin Kelewenis, portavoz en Ginebra del Comité de Coordinación contra la Exclusión y la Xenofobia, organización que apoyó la recolección de las 50 mil firmas que se requieren para que una ley aprobada por las Cámaras federales sea sometida a referéndum Para esta organización, que alimenta el portal de Internet Stop Exclusión, las disposiciones constituyen una mala noticia para los 700 mil no europeos que viven en Suiza, porque "refuerzan la segregación entre ellos, alientan la ?clandestinización? en el mercado del trabajo, al aumentar las dificultades para integrarse, y se impide la regularización de los sin papeles" Kelewenis considera, además, que la normativa "limita" el reagrupamiento familiar del extranjero que obtiene un empleo debido a las exigencias económicas que se le imponen, subordinándolo a un alto nivel salarial Arremete contra los promotores de estas leyes, los partidos de centro-derecha, encabezados por el actual ministro de Justicia y Policía, Cristophe Blocher, líder de la UDC (Unión Democrática del Centro): "Hay una manipulación política de algunos abusos que no son representativos de la problemática migratoria, que es compleja y debe analizársela en el contexto de la globalización planetaria", dice Kelewenis no reprocha se penalice a los que mientan sobre sus capacidades profesionales para ocupar una vacante laboral, a los que trabajen en negro, o a los que contraigan matrimonios ficticios para hacerse de un permiso de residencia, "pero esos son casos aislados que no se pueden generalizar, y su explotación pública tiende a instaurar un clima malsano de sospecha en torno al extranjero", al que se atribuyen responsabilidades en escándalos de tráfico de drogas y violaciones sexuales "Expulsión acelerada" Sin embargo, las críticas son más agudas sobre la segunda ley votada, la que endurece las posibilidades para lograr el refugio político Si bien podrán aspirar al asilo quienes "sean víctimas de la persecución", la regla introduce la expulsión "acelerada" de todo aquel que no muestre documentos de identidad en las 48 horas posteriores a su llegada a Suiza La norma alcanza a los que den falsas declaraciones sobre sus nombres o países de origen, incluso a quienes no puedan proporcionar "una explicación creíble" de su arribo a las aduanas helvéticas Para William Spindler, portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el órgano de la ONU que vigila la aplicación de la Convención internacional en la materia, la pretensión de exigirle un pasaporte a quien escapa de la represión, contradice dicha pacto, vigente desde 1951 ACNUR controla la situación de unos 20 millones de refugiados en el planeta, de los cuales cerca de 4 millones se encuentran en Europa Spindler resume que "muy pocos de los que huyen de la opresión tienen acceso a documentos de identidad y mucho menos a un pasaporte, sin olvidar que a veces son sus propios gobiernos quienes los acosan y muy seguido son hombres y mujeres que vienen de países pobres donde no es fácil procurarse un pasaporte" Spindler trae a colación el ejemplo de los judíos que se fugaban del régimen nazi de Alemania desprovistos de documentos de identidad, o el del cuarto de millón de húngaros que hace 50 años se evadió ante la intervención soviética Hace hincapié que "hubo 14 mil húngaros que se refugiaron en Suiza y no fueron pocos los que llegaron sin documentos, y más recientemente aconteció lo mismo con kosovares que huían de la limpieza étnica en la difunta Yugoslavia" Tras los ventanales de la oficina de Spindler en la sede mundial de ACNUR en Ginebra, se divisan los barracones de uno de los centros de acogida de candidatos al asilo, que la municipalidad ha edificado a toda prisa para darles un albergue transitorio mientras se tramitan sus expedientes Sólo 30% de las 80 mil personas que han acudido a Suiza para refugiarse vieron sus peticiones aceptadas El resto navega en un limbo jurídico indescifrable La nueva ley va simplificar el laberinto burocrático de las causas pendientes, gran parte de ellas en situación de recurso luego de haber sido rechazadas en primera instancia Spindler reitera que "el derecho a solicitar y recibir asilo es fundamental, consagrado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos" Valora que la migración es diferente, y que cada gobierno tiene sus reglas basadas en los imperativos laborales Pero subraya que "los refugiados no tienen la opción de volver a las regiones de donde se han ido por temores fundados de orden político, religioso o étnico", son gente "vulnerable que sufre persecución, y los Estados signatarios de la Convención, como Suiza, tienen la obligación legal y moral de darles protección" La insistencia del ACNUR sobre este principio, y en particular sobre la prohibición de castigar a alguien que haya franqueado la frontera de manera ilegal para peticionar asilo, obtuvieron que Suiza admitiera en la nueva ley que los candidatos al refugio puedan invocar "motivos excusables" para no presentar pasaportes, y que sus interrogatorios, llevados a cabo por la policía o los funcionarios de inmigración, sea posible realizarlos en presencia de miembros de organismos humanitarios Las objeciones de la ONU a Suiza se extienden a que ésta no era la coyuntura que justifica una ley de refugiados que multiplique las restricciones Según Spindler, "es el momento más bajo en los últimos 20 años en cuanto al número de solicitudes de asilo" Las cifras oficiales señalan, en efecto, que a partir del 2004 se verificó una caída considerable de 32%, y en lo que va del 2006, se han formulado 4 mil 775 peticiones No obstante, la ley va a encarrilar disposiciones que le darán velocidad a las expulsiones La reglamentación que se pondrá en práctica va a reducir las ayudas financieras a las personas en espera de una decisión sobre una demanda de asilo, o que aguardan para abandonar coercitivamente el territorio Estarán vedados los envíos de personas a países donde han sucedido catástrofes naturales, pero el gobierno se mantendrá atento a la evolución de las crisis en esas zonas, de manera que si se constatan mejoras, estará habilitado para echar a todo aquel oriundo de tales lugares que haya entrado a Suiza por razones humanitarias Las detenciones de personas concernidas por el fenómeno del asilo que hubieran cometido infracciones serán verificadas por la justicia, pero no podrán alargarse más allá de 18 meses, tornándose entonces automática su expulsión Un ambiente de tristeza El cantón de Ginebra, uno de los 26 que componen la Confederación Suiza y que cuenta con 400 mil habitantes, debe hacerse cargo de casi 5 mil casos de extranjeros atrapados en la maraña administrativa del refugio político En el principal de esos centros de tránsito, en la comuna de Anières, pegado a la frontera con Francia, un vetusto edificio que perteneció a una obra de caridad judía para huérfanos, da alojamiento y comida a unas 160 personas Allí se entreveran africanos, kurdos, tamules, mongoles, gitanos, armenios y tibetanos, socorridos por asistentes sociales y formadores que les enseñan oficios de soldadura, mecánica, carpintería y cocina La gran mayoría de ellos tiene miedo, quizás intimidados por el ineluctable destino de la expulsión que puede caerles de un instante a otro Apenas balbucean sus nombres y por lo general rehuyen dejarse fotografiar de frente o hacer declaraciones Un clima de tristeza flota en los pasillos cuando Yalala Dieudonne, del Congo, el único de todos ellos que acepta mostrar su habitación, posa para una foto con su uniforme azul de obrero, aprovechando la pausa del almuerzo Uno de sus compañeros de infortunio, de Guinea Conakry, mantiene su nombre en secreto, pero finalmente deja que se lo fotografíe de espaldas y en presencia del asistente social de guardia, Marc Hauser La tensión se afloja en el recreo que sigue a la comida, como si la magia del futbol relajara a los hombres Ibrahim, también de Guinea, mantiene su apellido en el anonimato y recién casi por la noche y custodiando un local de alquiler de bicicletas en los bordes del lago Leman, permite ser captado voluntariamente en foto El 58% del millón y medio de los extranjeros establecidos en Suiza son de países de la Unión Europea, entre los cuales hay 80 mil españoles Estas dos nuevas leyes parecen no inquietarlos, aunque el ministro de Exteriores de España, Miguel Ángel Moratinos, manifestó de paso por Ginebra que el tema integraba la agenda de su entrevista ese día en Berna con su similar Micheline Calmy Rey El debate abierto en Suiza se anuncia interminable Hans Ulrich Jost, un conocido profesor de la Universidad de Lausana, en una entrevista otorgaba a la agencia oficial suiza ATS, sostiene que la actitud del electorado hacia estas leyes es una herencia que respeta parámetros anclados desde el comienzo del siglo XX Según sus investigaciones históricas, se trata de una continuidad de la actitud xenófoba hacia ciertas poblaciones, como los gitanos, considerados inicialmente por los medios oficiales del Estado como una "plaga" Jost afirma que esa herencia, combinada con problemas de hoy como la mundialización, los costos de la salud que se disparan o la modernización de la sociedad, es instrumentalizada por la derecha o la extrema derecha, para orientar el voto de la ciudadanía La tradición humanitaria de Suiza, reflejada en la promoción de la Cruz Roja Internacional (CICR), y las Convenciones de Ginebra que protegen a los heridos, prisioneros y poblaciones civiles en los conflictos armados, es cuestionada así mismo por Just La inscribe dentro de los intereses nacionales de neutralidad en las conflagraciones mundiales del siglo anterior y del egoísmo social permanente de no perder los altos estándares de vida que mantiene el país Acaso un dato significativo en ese sentido haya sido dado en otro de los referéndum que pasó casi desapercibido el cedazo del escrutinio: en aras de la estabilidad monetaria y con 58% de los votos, los suizos aprobaron que los beneficios del oro depositados en los cofres del Banco Nacional sean vertidos en la creación de un fondo específico que pueda suplir el déficit de las cajas de jubilación

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