Michoacán, el imperio del narco (Segunda y última parte)
* La guerra entre los Amezcua Contreras y ?El Chapo? Guzmán
* Medio centenar de muertes violentas en poco más de un año
Morelia, Mich , 31 de enero (apro)- En la nueva geografía del narcotráfico, el cártel de los Valencia ?surgido en los ochenta en la región de Tierra Caliente de Michoacán? parece estar decidido a reivindicar para sí la tierra purépecha, en el vórtice de una rebatiña en la que participan otras poderosas mafias del crimen organizado, como los hermanos Amezcua Contreras y Joaquín ?El Chapo? Guzmán, cuyos diferendos y luchas por el poder han provocado medio centenar de muertes violentas en la entidad y Jalisco, en poco más de un año
En las madrugadas en el municipio de Tzitzio, al suroeste de la capital michoacana, es común detectar camionetas estacionadas en lo alto de las montañas, a la espera de una señal lanzada desde las nubes
Cuando llega, se ponen en movimiento De un jalón, arrastran enormes redes cubiertas con hierba, y luego encienden las luces intermitentes para iluminar una pista improvisada
Es entonces que la avioneta aterriza en el sitio señalado, donde permanece unos cuantos minutos, el tiempo justo para descargar los paquetes con droga Luego, las camionetas cubren de nuevo la pista con la red, y se marchan
Esta es una de las formas más comunes que el cártel del Milenio utiliza para bajar droga, a raíz de los operativos de la Armada de México frente a Lázaro Cárdenas y Zihuatanejo, Guerrero, que solían ser la puerta a sus lanchas rápidas
Veinte toneladas al mes de cocaína
Con este método, afirma la DEA, los Valencia logran introducir un promedio de 20 toneladas mensuales de cocaína a Estados Unidos, la mayoría por Texas, y con destino final en Atlanta, Chicago y Nueva York
En el rango de proveedores de drogas, ocupan el tercer sitio; sus ganancias son de entre dos y tres millones de dólares mensuales
Pero no es por ello que los Valencia aumentaron su tristemente célebre fama, sino porque incluso llegaron a poner precio a la cabeza del exprocurador Rafael Macedo de la Concha y del titular de la SIEDO, José Luis Santiago Vasconcelos
Los Amezcua, conocidos también como ?Los reyes de las metanfetaminas?, tienen el control de la región Costa-Sierra de Michoacán, donde están a su disposición al menos una decena de gigantescos ranchos ?a cuyos dueños que los alquilan les llaman ?renteros??, que sirven para esconder y procesar cargamentos de cocaína procedentes de Colombia, mismos que recuperan de aguas del Pacífico
En el país, ocho cárteles
La sombra del narcotráfico cubre en su totalidad el territorio nacional Por lo menos ocho cárteles operan en México con fuerte poder económico y armado
Las organizaciones criminales operan, incluso, desde las prisiones federales de alta seguridad La guerra desatada por el control de los territorios ha dejado un rastro de sangre en el penal mexiquense de La Palma y en estados del norte del país
En cuanto al ?Chapo? Guzmán, su área de influencia en Michoacán se ubica en las zonas cercanas a Jalisco, fundamentalmente Zamora, La Piedad y Sahuayo, que empiezan a convertirse en verdaderos "polos de crecimiento" en el tráfico y consumo de drogas duras, mientras que en la región Oriente, en las cercanías de Zitácuaro, hay ?bajaderos? (pistas clandestinas) de aeronaves que transportan cocaína pura
Y si bien existen informes que mencionan la presencia en Michoacán de los cárteles de los hermanos Arellano Félix y Carrillo Fuentes, su cobertura no se compara con la de los Valencia, cuyas matrices están en Apatzingán y Uruapan, aunque al igual que las otras organizaciones pretenden conquistar la estratégica Morelia, en acciones que ya han arrojado un puñado de sangrientos ajustes de cuentas
Una radiografía de la organización arroja que tiene brazos operativos en trece estados del país, con jefaturas en Nuevo Laredo, Miguel Alemán, Reynosa, Matamoros y Morelia
Es así que el grupo de Los Zetas actúa en forma de comando para realizar ajustes de cuentas, pero también para controlar las zonas de influencia
El relativamente reciente caso de Cancún, Quintana Roo, donde aparecieron doce personas ejecutadas, evidenció que pagan a las distintas corporaciones policiacas por medio de cuotas de cocaína
Las pugnas
Desde el año pasado distintos comandos ejecutan, "levantan", se enfrentan a tiros En cateos se les han encontrado explosivos plásticos, uniformes originales del Ejército Mexicano y de la Agencia Federal de Investigación (AFI)
Es la nueva generación de sicarios que, de acuerdo con la propia AFI, suman más de 900 "matones a sueldo" tan sólo en Michoacán, entre ellos los Zetas, Zetillas, Los Texas, Los Sinaloenses, Los Chelos, Villa Botello, Los Gaytanes, La Tuta, etcétera
El año pasado se reportaron al menos 529 homicidios dolosos, de ellos el 65% correspondían a ejecuciones, incluyendo la de quince funcionarios y policías del gobierno cardenista
Hasta la fecha suman ya 25 ejecuciones en Michoacán, entre ellas la de Salvador Arteaga Garibay, hermano de la diputada local y exprocuradora Lucila Arteaga Garibay y de dos policías en Apatzingán
Los comandos disfrazados de federales recorren Michoacán y sus ciudades Asesinan a cualquiera que se pone enfrente Da igual se trate de policías o funcionarios de los ayuntamientos