Lamenta RSF "candados" de la fiscalía para periodistas
* Celebra la creación del organismo; pero reprocha que no tenga facultades para atender casos ligados al narco
Tuxtla Gutiérrez, Chis , 23 de febrero (apro)- El organismo internacional, Reporteros sin Fronteras (RSF) aplaudió hoy la creación de la Fiscalía Especial para la Atención de Agravios contra Periodistas, pero lamentó que casos relacionados con el narcotráfico hayan quedado fuera de las competencias de esa oficina, sobre todo cuando son el principal origen de la violencia contra comunicadores y medios en México
Robert Menard, secretario general de RSF, dijo hoy que la creación de la fiscalía especial, dedicada a la lucha contra los crímenes y delitos cometidos contra periodistas, "representa en sí misma un auténtica primicia mundial"; y manifestó su confianza en que este precedente sirva de inspiración a otros países, donde la libertad de prensa está realmente amenazada
En una carta que envió hoy al titular de esa fiscalía, David Vega Vera, dijo hoy que al crear una fiscalía especial, las autoridades federales parecen "finalmente" haberse dado cuenta de la magnitud del clima de terror e impunidad que sufren los periodistas mexicanos, sobre todo localmente
Menard recuerda en su misiva que en lo que va del actual gobierno de Vicente Fox han muerto dieciséis periodistas en el ejercicio de sus funciones, y algunos más, como Alfredo Jiménez Mota, de El Imparcial, de Hermosillo, Sonora --desaparecido desde abril del año pasado-- no han vuelto a dar señales de vida
"En el transcurso de los años 2004 y 2005 México se convirtió en el país más asesino del Continente Americano, con ocho profesionales de los medios de comunicación asesinados, o desaparecidos Nunca se ha detenido, ni juzgado, a ninguno de los autores intelectuales de esos crímenes", precisa
En su carta Menard explica que la mayoría de esos periodistas pagaron con su vida querer informar sobre el narcotráfico y las actividades mafiosas que causan estragos, especialmente en los estados fronterizos del norte del país
Dan prueba de ello los asesinatos de Francisco Javier Ortiz Franco, cofundador del semanario Zeta, ocurrido el 22 de junio de 2004 en Tijuana; Raúl Gibb Guerrero, director del diario La Opinión, el 8 de abril de 2005, en el Estado de Veracruz; o la desaparición de Alfredo Jiménez Mota, del diario El Imparcial, el 2 de abril de 2005 en Hermosillo
Para Menard esto es una tragedia que ha llevado a muchos medios de comunicación a autocensurarse, para protegerse "Línea de conducta que, desgraciadamente, no ha impedido que el 6 de febrero de 2006 se produjera un atentado con ametralladora al diario La Mañana, en Nuevo Laredo, que estuvo a punto de costarle vida al periodista Jaime Orozco Tey
"Por todo ello, señor fiscal, Reporteros sin Fronteras se sorprende de que los casos relacionados con el narcotráfico hayan quedado fuera de las competencias de la fiscalía especial, que usted se dispone a dirigir ¿Cómo puede entenderse esta medida cuando está demostrado que los narcotraficantes, y más ampliamente la delincuencia organizada son el principal origen de la violencia con los medios de comunicación mexicanos? La fiscalía especial no debería quedar al margen de esta cuestión", indica
Menard indica que tampoco debería ignorar la "peligrosa complicidad" que en ocasiones existe entre los predadores de los medios y las autoridades locales, como en el caso de Lydia Cacho Ribeiro, detenida en diciembre de 2005, tras revelar la existencia de una red de pedofilia en el que presuntamente están implicados políticos y empresarios de alto nivel
"No ignoramos ni la magnitud, ni la dificultad del trabajo que le espera Pero el futuro de la libertad de prensa en México, y de la credibilidad de la fiscalía especial, dependen de que disponga de todos los medios necesarios para llevar a cabo su misión En vísperas de las elecciones presidenciales y legislativas del 2 de julio de 2006, su continuidad dependerá de la capacidad que tanga para demostrar rápidamente su eficacia", concluye