* Refrenda su estrategia de resistencia civil pese a críticas de intelectuales México, D F, 1 de agosto (apro)- El candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador resolvió quedarse permanentemente en el Zócalo y preservar los campamentos que bloquean la avenida Reforma, luego de realizar una asamblea en la explanada central de la Ciudad de México El candidato de la coalición Por el Bien de Todos encaró las críticas al movimiento de resistencia civil en menos de un minuto Al final de su discurso, propuso a la gente levantara la mano si estaba de acuerdo o no en que las protestas siguieran por el mismo rumbo Sus seguidores, que ocupan una cuarta parte del Zócalo, le respondieron levantando incluso las dos manos y lanzando gritos de "¡Presidente, presidente!" "Hay algunos comentarios de buena fe y algunos otros mal intencionados, de que si estuvo bien los campamentos de Reforma o no Quiero preguntarles, ¿vamos a seguir con los campamentos, sí o no?" Antes de formular la pregunta, López Obrador ya había arengado a sus simpatizantes, al advertir que bajo ninguna circunstancia aceptaría participar en un gobierno de coalición ni tampoco puestos en un eventual gabinete "Nada de asociaciones, la dignidad de nuestro pueblo no se vende y no tiene ningún precio", enfatizó De esta forma el tabasqueño atajó las críticas en su contra, incluido el desplegado firmado por Carlos Monsiváis, Adolfo Sánchez Rebolledo Rolando Cordera y Jenaro Villamil Tras obtener el respaldo de sus seguidores, López Obrador propuso de inmediato reforzar los campamentos de Reforma, a fin de evitar que decaiga la participación ciudadana Y justo a las nueve de la noche arribó al Zócalo de la Ciudad de México un contingente de habitantes de Atenco, Estado de México, quienes efectuaron una pequeña marcha alrededor de la plancha, portando entre las manos antorchas y reluciendo machetes, al tiempo que lanzaban consignas contra el gobierno y el candidato del PAN, Felipe Calderón