* Fue robada hace siete años; estaba en el Museo de Arte de San Diego Zempoala, Hgo , 25 de agosto (apro)- Autoridades y habitantes de este municipio se congratularon por la posibilidad de que retorne a la capilla de San Juan Tepemazalco, una pintura robada hace siete años, la cual estaba en el Museo de Arte de San Diego California La obra, Adán y Eva expulsados del paraíso, fue robada de esa capilla sin que se supiera de ella hasta hace un año cuando se conoció que había sido adquirida por ese museo, cuyos dueños la compraron a un particular Sin embargo, la pintura del siglo XVIII ya se encuentra en poder de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) Al respecto, el regidor Rafael Contreras Peña manifestó su entusiasmo ante la posibilidad de que la pintura regrese a la comunidad de San Juan De hecho, tras la sustracción de la pintura, que provocó la indignación de la población, se iniciaron prácticamente los robos de arte sacro en el altiplano hidalguense Yesica Bautista Onofre, encargada del Museo Comunitario Tonatuih, de la cabecera municipal, y guía de turistas, lamentó que no hayan sido recuperadas obras que han sido robadas de otras capillas y que tienen un gran valor histórico y religioso Del exconvento de Todos los Santos, en Zempoala, fueron robadas dos pinturas y una escultura, mientras que de San Antonio Oxtoyucan, en 2004, fueron también sustraías dos pinturas, dos esculturas y una copa de consagrar de oro, que no han sido localizadas, pero que se presume fueron vendidas en el mercado negro La obra Adán y Eva en el paraíso fue pintada en el año 1728 por manos anónimas, y fue vendida en 45 mil dólares al Museo de Arte de San Diego Ahora le fue entregada al consulado mexicano en esa ciudad, luego de conocerse que fue robada En las próximas podría llegar a la entidad Para Contreras Peña, este sería un gran logro, ya que un gran número de sitios históricos y obras de arte no cuentan con protección ni resguardo oficial El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha reconocido la falta de capacidad y recursos para cuidar o siquiera clasificar obras de arte, por lo que éstas han sido entregadas prácticamente al resguardo a los lugareños