México, D F, 22 de mayo (apro)- El diseño de las políticas públicas y programas del gobierno federal carecen de perspectiva de derechos humanos y de género Inclusive, el derecho humano a la alimentación no es visto como tal por muchos países, entre ellos México, afirmó el Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria En el informe El derecho a la alimentación, la soberanía alimentaria y la mujer en México 2003-2006, que será presentado en breve, esta asociación civil concluyó que "la pérdida de soberanía alimentaria del país y la restricción del derecho a la alimentación para un sector importante de la población, son el resultado de la puesta en práctica de una política agropecuaria que, lejos de enfrentar los problemas históricos del campo mexicano, no hicieron sino agravarlos" Apunta que la supuesta "modernización" fue concebida desde la óptica del liberalismo económico a ultranza y fue impulsada desde los grupos empresariales que buscaban la concentración de los factores productivos para, supuestamente, aumentar la competitividad del sector agropecuario "Los ejes de esta política fueron las reformas al artículo 27 constitucional y la entrada en vigor del TLCAN Se partió del supuesto de que estas reformas impulsarán las inversiones y el desarrollo del sector, generando más empleos y aumentado el nivel de vida de campesinos, a la vez que aumentaba la competitividad ante el exterior", señala Esto provocó, añade, el aumento de problemas como el narcotráfico, el desempleo, el abandono de tierras y la migración, la explosión de conflictos agrarios o la existencia de grupos armados "En ese contexto, no es de extrañar que los niveles de pobreza aumentaran en las últimas dos décadas y se mantengan en niveles inaceptablemente altos para un país de desarrollo medio como el nuestro Por su parte, la pobreza rural duplica la del medio urbano, y todos los indicadores sociales muestran el persistente proceso de empobrecimiento en el medio rural, cuya gran mayoría se dedican a labores agrícolas", dice Y explica que la pobreza impacta de manera directa el derecho a la alimentación, y el riesgo más grave a últimas fechas es la pérdida de la soberanía alimentaria, "ante la incapacidad del sector agrícola del país de abastecer al mercado interno de alimentos" Señala que la crisis en el campo responde a un largo proceso de abandono, cuyos peores efectos se concretizan en el deterioro de la calidad de vida de la población rural y campesina De esta población, las mujeres son el sector más vulnerado El informe señala que el derecho a la alimentación "es también inseparable a la justicia social, pues requiere de la adopción de políticas económicas, ambientales y sociales adecuadas en los planos nacional e internacional, orientadas a la erradicación de la pobreza y al disfrute por todos de los derechos humanos" Cita la Declaración Universal de Derechos Humanos, artículo 25, y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC); los tratados internacionales que prevén el derecho a la alimentación, y la Observación General 12 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, que obliga a los Estados a procurar el derecho a la alimentación Señala que la soberanía alimentaria de un país implica que este deberá producir alimentos de calidad y suficientes para su población, lo que no quiere decir que se prohíba la exportación, sino apoyar a productores locales para que "produzcan en condiciones equitativas frente a extranjeros" Señala que el campo mexicano atraviesa en la actualidad una crisis profunda que no ha sido resuelta por los gobiernos en turno, pero ha impactado a la gente del campo, que sólo tiene su tierra como medio de subsistencia y fuente de trabajo Dice que, en los últimos 30 años, el Estado mexicano ha aplicado programas de abasto de alimentos y programas de salud, que han impactado la nutrición de la población, pero la pobreza es el primer reto a vencer para garantizar el derecho de la población a la alimentación "En México, durante el periodo analizado (2003-2006) se observa la constante violación al derecho a la alimentación como consecuencia de la falta de recursos para acceder a los alimentos Es decir, el hambre, la malnutrición y la desnutrición, no son un problema que se resuelve con una mayor producción de alimentos, sino con la creación de condiciones económicas para que las personas los puedan adquirir En nuestro país, la precaria situación económica, entre otros factores, limita y, en ocasiones, impide, el disfrute del derecho a la alimentación", indica el informe En octubre de 2006, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) realizó una análisis sobre de la reducción de la pobreza durante la administración de Vicente Fox, y concluyó que la pobreza en el país sigue siendo muy elevada y que, de hecho, en el periodo 2004-2005, la pobreza rural ha tenido cierto repunte "El sexenio comenzó con 536 millones de pobres y logró reducir la cifra hasta 472 millones Sin embargo, la Encuesta Nacional ENIGH 2005 muestra un retroceso que se tradujo en un incremento de 270 mil 491de pobres", señala La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2006 (Ensanut 2006) señala que la tendencia en las prevalencias de desnutrición es a la baja A nivel nacional, el 5% de los niños menores de cinco años son clasificados con bajo peso; 127 por ciento con baja talla (desmedro), y 16 por ciento con bajo peso para la edad Explica que, entre los adultos, la pobreza contribuye a la obesidad y al sobrepeso, pues las personas satisfacen su hambre comiendo alimentos que los "llenan", pero no los nutren México es actualmente el segundo lugar entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE) con problemas de obesidad "Esto resulta preocupante al considerar que todavía no terminamos de reducir la desnutrición y que, tanto la obesidad como el sobrepeso, ya son problemas de salud pública de consecuencias económicas y sociales que impactaran en los sistemas de salud"