MÉXICO, D F, 27 de octubre (apro)- Desde hace dos meses, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Procuraduría General de la República (PGR) detectaron una amplia red de funcionarios que filtraba información confidencial a la célula de los hermanos Beltrán Leyva, exmiembros del cártel de Sinaloa y actuales socios de Los Zetas y del cártel de Juárez Un grupo de 35 funcionarios ?algunos fueron consignados en penales federales y otros están arraigados? formaban de un equipo de trabajo que tenía a su cargo las investigaciones más sensibles contra el narcotráfico en el país Con base en las libertades de que disponían, a cambio de fuertes sumas de dinero, filtraban información al cártel de los hermanos Beltrán Leyva sobre las averiguaciones previas en curso La red de implicados, según dijo el procurador Eduardo Medina Mora, está conformada por 35 agentes del Ministerio Público, fiscales y personal de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) que ya fueron separados de sus cargos por no acreditar los exámenes de control de confianza En la mayor parte de los casos, se trata de funcionarios que dependían del extitular de la SIEDO, Noé Ramírez Mandujano, quien renunció al cargo a principios de agosto de este año, presuntamente por su ineficacia al frente de la dependencia, aunque ahora se sabe que puede estar ligado con los funcionarios destituidos En conferencia de prensa, la titular de la SIEDO, Marisela Morales, y el procurador general de la República, Eduardo Medina Mora, explicaron que los funcionarios, quienes actualmente se encuentran arraigados, "filtraban" información contenida en averiguaciones previas en curso, y que los receptores de tales datos ?en la mayoría de los casos relevantes? eran personas ligadas a los hermanos Beltrán Leyva La red de implicados es amplia, y puede llegar a ser uno de los casos más escandalosos del sexenio, pues la SIEDO es el área de la PGR que tiene a su cargo las investigaciones más importantes en materia de narcotráfico y de todas las modalidades del crimen organizado En la lista que Morales y Medina Mora dieron a conocer están los nombres de Fernando Rivera Hernández, quien fungía como director general adjunto, encargado de la Inteligencia y Coordinación Técnica de la SIEDO Otro funcionario, de igual forma ligado a Ramírez Mandujano, es Miguel Ángel Colorado González, coordinador general técnico de la SIEDO En el equipo de informantes no podían faltar policías, pues se incluyen los nombres de los agentes federales de investigación Jorge Alberto Zavala, Antonio Mejía Robles, Francisco Javier Jiménez Sánchez Este último se encuentra prófugo De acuerdo con la investigación, están acusados de los delitos de delincuencia organizada en la modalidad de colaborar al fomento para posibilitar la comisión de delitos de esa naturaleza Según el procurador Medina Mora, en todos los casos, el Agente del Ministerio Público Federal cuenta con evidencia ministerial "judicializable" que prueba que los implicados proporcionaban información confidencial sobre operativos y averiguaciones previas en curso, a cambio de sumas considerables de dinero Según la titular de la SIEDO, Marisela Morales, las sumas de dinero entregadas a los funcionarios oscilaban entre los 350 mil y 400 mil dólares Por otra parte, en el caso de Miguel Colorado González, la PGR informó que el gobierno de Estados Unidos solicitó una orden de detención provisional con fines de extradición internacional, la cual se cumplimentó el 26 de octubre La obsequió el juez séptimo de Distrito de Procesos Penales Federales con sede en el Distrito Federal De acuerdo con la PGR, todos los funcionarios consignados quedaron a disposición de las autoridades judiciales federales, en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 2 con sede en el estado de Jalisco No es la primera vez que una célula de narcotráfico infiltra a una dependencia gubernamental: en el sexenio de Vicente Fox ?el llamado "gobierno del cambio"? un grupo encabezado por Ismael Zambada Garcia, El Mayo, penetró a un grupo especial del Ejército que, tal como ahora ocurre en la SIEDO, le pasaba información al cártel de Sinaloa sobre las operaciones en contra de la organización