MÉXICO, D F, 31 de octubre (apro)- El exjefe de Gobierno del Distrito Federal Alejandro Encinas reconoció que la profunda división que prevalece en el PRD está siendo propiciada por la corriente interna Nueva Izquierda (NI), que encabezan Jesús Ortega y Jesús Zambrano, quienes, dijo, están conduciendo al partido por la senda del fracaso Encinas, quien insiste en declararse ganador del fracasado proceso interno para elegir presidente nacional del PRD, afirmó que Los Chuchos, como se identifica a la corriente NI, han demostrado su incapacidad para conducir al partido Agregó que dicha incapacidad se vio reflejada recientemente con los resultados de las elecciones locales en Guerrero y Coahuila Recordó que en la primera entidad, el PRD, gobernaba las principales ciudades del estado, entre ellas, Acapulco, Iguala, Zihuatanejo, Teloloapan, y las perdió Subrayó que el PRD fue humillado por el PRI: "Lamentablemente eso también podría ocurrir en Hidalgo", donde el próximo 9 de noviembre habrá elección para renovar los 84 ayuntamientos A pesar de las hondas diferencias que tiene con NI, Encinas insistió en que no renunciará al partido; dijo que "desde adentro" dará la lucha para que el PRD "recupere su esencia" Estableció que Los Chuchos podrán tener el control del partido, pero aseguró que están alejados de la gente No obstante, rechazó que el PRD sea un partido de burócratas Reconoció que la profunda división que prevalece en el partido es real, porque ya no se trata sólo de un asunto por el control de los órganos de dirección, sino de dos visiones distintas de política y de país En ese sentido, sostuvo que la que enarbola tiene una visión más ligada a la población y "no la lógica de negociar lo que no es negociable" como la que, dijo, abandera la corriente de Los chuchos Finalmente, Encinas advirtió que esa fractura impacte en los próximos comicios federales, aunque confió en que habrá capacidad para rectificar el camino, elegir buenos candidatos y hacer a un lado a la burocracia y a las corrientes internas que han llevado a la marginalidad al PRD