México, D F, 11 de febrero (apro)- Estimados lectores: ¡peligro!, ¡peligro! Sí, estamos en serio peligro Les aseguro que no es para regocijarse y reírse el que hayan expuesto a la vergüenza pública lo que ya muchos sabían o sospechaban: que el señor George W Bush y otros integrantes de su gobierno han mentido unas mil veces en decisiones que han afectado y afectan, negativamente, a los que vivimos en la globalidad de hoy --¡y de la cual presumen ser la levadura y los guardianes!--, mentiras con las que han asesinado y siguen asesinando mujeres, hombres, viejos y niños que en nada les habían ofendido, de manera alguna eran amenaza para ellos o para los USA No es para reír, repito, ya que esa información dada por los medios en días pasados, nos muestra --y nos demuestra una vez más--, que el poder lo tiene todo, menos escrúpulos; que el que ejerce el poder ?por las causas que sean?de manera monopólica, cree que también posee el monopolio de la verdad ¡Ah!, cosas del poder que todo lo corrompe Triste cosa la fe mía ¿O no lo creen así, mis estimados? ¡Ay! Mucho temo que esa importante información se diluya en la trivialidad, en la burla y la risa, como la que producen tantos programas dedicados a chismes de lavadero, a dar a conocer si fulanita ha tenido o no un affaire con fulanito, si menganita se embarazó o no, si zutanita y zutanito se van a casar o no, si perenganito le pone el cuerno a menganita o viceversa ¡Aguas con esa salida, porque la misma deja las cosas como están! ¿Qué la risa mata? Puede ser, pero también puede se un camino para la evasión, puede ser generado por la impotencia o por no querer, por lo que gusten y manden, resolver hechos tan nefastos como el de que el hombre más poderoso del mundo, cuyas decisiones, queramos o no, de algún modo nos afectan, las lleve a cabo engañándonos, usando la mentira, no porque sea un mentiroso piadoso, sino por ser todo lo contrario, un mentiroso siniestro, es decir, un hombre con malas intenciones, que incluso no duda invocar en vano el santo nombre de Dios para llevarlas a cabo --¡Y se considera ferviente cristiano!?, aunque las mismas lleven a la mutilación y hasta el asesinato de inocentes, como lo muestran y confirman los cientos de víctimas que ha causado su felona guerra de agresión contra Irak Malo es también que haya individuos, como, por ejemplo, José María Aznar, --¡nada menos que uno de los principales ideólogos de la internacional de los partidos políticos cristianos!?que no tengan empacho en convertir en artículos de fe las aviesas mentiras de G W Bush ¡"Qué cosas se ven! ¡Será que Dios los cría y ellos se juntan? Al respecto, ¡qué piensan ustedes, mis estimados? Así, igualmente, hay otros creyentes en Cristo que, a pesar de las evidencias, están emperrados en considerar y proclamar en tribunas públicas que G W Bush es un demócrata y, por lo tanto, libre de malas intenciones-- ¿Qué es eso de que el título de demócratas nos hace buenos de por sí??Pregunto: esos tales individuos, los que pretenden y los que intentan convencernos que con bautizar --¡así sea al diablo!?con el calificativo de demócrata con ello le libra de pecados, ¿lo harán por mentecatos, esto es, por ser personas de poco juicio y flaco entendimiento? ¿O por ser unos redomados ladinos que con ese su apoyo a G W Bush llevan agua al molino de sus muy particulares intereses? ¿Qué piensan ustedes? Tampoco es nada edificante, como ya he señalado, el ignorar o, si se está informado, desatenderse y no desenmascarar las siniestras decisiones de G W Bush, pues esa actitud no certifica nuestra inocencia ni libera de responsabilidad Si conociendo sus aviesas decisiones miramos para otro lado, con ese gesto, querámoslo o no, contribuimos a hacer de esta globalidad en la que respiramos, una globalidad criminógena y criminosa Esas posturas, insisto, querámoslo o no, nos convierten en cómplices, pasivos si se quiere, del señor G W Bush ¡Y de eso está pidiendo, por lo menos, su limosna! Reflexionemos y tengamos en cuenta que el señor G W Bush nos ha metido e impuesto un juego con el que pretende, por conveniente para sus intereses encanallarnos, o lo que es lo mismo, corrompernos, envilecernos, a que seamos hombres, como él, de aviesos pensamientos, palabras y obras, seres carentes de nobleza, proclives a los malos procederes, o en unos cínicos en el último de los casos, a fomentar en nosotros, con el manejo de la información y la amenaza, la ignorancia, la pusilanimidad y la impotencia ante sus decisiones; a convertirnos en unos dejados, pues no hay de otra Este es el peligro contra el que les advertía al inicio de la presente y el motivo de la misma a este buzón ¿Veo moros con tranchete? ¿Qué piensan? Si piensan que no, permítanme que les diga si sabremos y tendremos la voluntad necesaria para jugarle las contras al que tal quiere hacernos ¿Qué responden? Con mi sincera buena voluntad para todos y sin mala fe para ninguno PATO CHAMOY