México, D F, 9 de junio (apro)- Felicitémonos, amados hermanos en la fe, pues tenemos entre nosotros una verdadera clase mesiánica ¡Aleluya! Ah, no ¡Vade retro, Satanás! Que nadie piense que la misma es, que ya no lo es afortunadamente, la limitada, torpe, patética y crispada clase obrera que, por un tiempo reclamó ese título para si, creyendo que ella cambiaría al mundo para hacerlo mejor para todos Dios la perdone ese pecado de soberbia Amén "Lamentable es que esta verdadera clase mesiánica no sea reconocida plenamente como tal por tirios y troyanos en la actualidad ¿Por qué es así? ¿Por ser demasiado nueva? En modo alguno, que vieja es y es por su pasado, en parte, que tiene que sufrir ese no reconocimiento e incluso sospechas sobre sus intenciones hoy Esto es, que sufre hoy por sus pecados de ayer Hay que recordar que siglos anteriores hubo en que la Iglesia, por legítimas razones, tuvo que considerarla hija del diablo, vio con malos ojos a sus representantes, levantó predicas contra la misma y lanzó anatema contra ella Pero eso fue en los ayeres; ayeres que, felizmente, hoy están superados A lo anterior hay que añadir que frustrados, resentidos y envidiosos, que nunca faltan en las viñas del Señor, también han contribuido y siguen haciéndolo, con sus palabras y acciones, a desprestigiar a la dicha clase mesiánica y hay que tener en cuenta que los escritos, informes y manifestaciones públicas y mediáticas de ciertos ideólogos y voceros de esa misma clase asustan y alejan de la misma a no pocas personas y a grupos de ellas, pequeños y grandes No es para menos ¡Ah!, pero no está la culpa en los que se alejan, sino en los que los alejan, y pues como se puede demostrar y convencer del mesianismo de la citada clase diciendo que sus integrantes son los mejores y más grandes benefactores de la humanidad en la medida que sean los más grandes egoístas y los más ambiciosos y se propongan ganar lo más posible con sus pensamientos, palabras y obras y no siendo hermanitas de la caridad como descaradamente declaran algunos ideólogos y voceros de la mencionada clase? ¡Qué el Espíritu Santo los ilumine! "Afortunadamente, por la gracia de Dios, los más conscientes de esa clase sospechosa a los ojos del a Iglesia en siglos pasados, evolucionó, maduró y hoy son cabeza de ella en su función mesiánica que está cambiando al mundo, que por su poder y posibilidades está llevando ala realidad el satisfacer las necesidades y las esperanzas colectivas Amados hermanos, la clase mesiánica de nuestros días, sí, es la de los empresarios, la de los empleadores, la de la iniciativa privada, la que todo sabe hacerlo mejor, representante y defensora del individualismo y la plena libertad del mismo y que, a la vez, va comprendiendo y asume que no es más que la administradora de los bienes que el Señor pone a disposición de los hombres, como lo demuestra su aspiración a un capitalismo con rostro humano, como lo confirma su apoyo a los ideólogos de buena fe para que le preparen , defiendan con sus argumentos y publiciten ese catecismo social de la CIUDADANIA CORPORATIVA o CORPORATE CITIZENSHIP, en el que se analiza, aclara y explica al público temas como el del mercado libre, competencia "emprendurismo", la responsabilidad social empresarial y sus trasuntos de la amorosa caridad cristiana: la filantropía, el altruismo?" En este punto, la apasionada e interesante plática de Fray Candela, fue interrumpida impíamente, pues sobre los muros de la iglesia se desplegaron, sin que nadie viera por quien, unas mantas con las siguientes leyendas: "Si tan mesiánica es la clase empresarial, esto es, tan redentora y liberadora, ¿por qué la globalidad en que vivimos, conformada y regida por la visión empresarial de la sociedad, hace más ricos a los ricos y más pobres a los pobres, ensancha y profundiza la brecha que los separa?" "Si tan responsable y altruista es la iniciativa privada, ¿por qué exige y apoya el recorte del gasto social en los gobiernos?" "Pregunto: la sopa boba de convento, caritativamente administrada con amor por la Iglesia en la Edad Media, ¿sacó a los pobres de su pobreza? ¿los sacará de ella la filantropía de los empresarios?" El despliegue anónimo de estas mantas, si no hizo que la reunión de fieles terminara como el rosario de la aurora, sí la terminó Todos nos retiramos confundidos y airados, incluso Fray Candela Servidor, como protesta por el vergonzoso incidente y por tener por importantes y aleccionadoras las palabras de Fray Candela, es por lo que escribe la presente a este buzón Que Dios las haga fructíferas a los lectores de la misma Con cristiana caridad pa4a todos, sin resentimiento contra nadie JUAN SACRISTAN