MÉXICO, D F, 22 de septiembre (apro)- La posibilidad de acordar alianzas con partido antagónicos, como el PRI o el PAN, en futuros procesos electorales, aprobada durante el Congreso Nacional del PRD, el pasado fin de semana, dividió a los perredistas Para el presidente sustituto del PRD, Guadalupe Acosta Naranjo, la determinación del Congreso Nacional acaba con un "dogma" que le ha impedido crecer en algunos estados del país Sin embargo, Saúl Escobar y Alfonso Ramírez Cuellar, de la corriente Movimiento por la Democracia manifestaron su inconformidad, porque, a su juicio, porque mandará un mensaje equivocado a los militantes, ya que "se diluye el contrincante" Acosta Naranjo, aclaró, sin embargo, que para el caso de la candidatura a la Presidencia de la República en 2012, el PRD contenderá con candidato propio "Nosotros queremos ser gobierno federal y esperamos ser mayoría en 2012", afirmó Pese a que la posibilidad de alianzas con partidos antagónicos fue aprobada por mayoría de votos en el Congreso perredista, la presidenta del PRD en el Distrito Federal, Alejandra Barrales, se sumó al rechazo y manifestó su desacuerdo El Congreso Nacional del PRD inició con gritos de "espurio" y rechiflas contra Acosta Naranjo, y quedó en suspenso ante la falta de acuerdos de las corrientes ese partido para definir las listas de los 64 consejeros nacionales Hoy, Acosta Naranjo dio una conferencia de prensa para hacer un balance del fin de semana pasado Sobre la posposición del Congreso hasta el 11 de octubre, resaltó el problema para definir la distribución de los 64 consejeros, debido a que no hubo acuerdos entre las corrientes "Estamos dando tiempo para buscar un mejor consenso", dijo Según Acosta tres estados no pudieron acreditar su representación, y aunque se pudo haber culminado la negociación, el Congreso prefirió dar tiempo para crear "un marco de unidad, buscar un acuerdo de mediano y largo plazo, que nos permita convivir las expresiones que tenemos diferencia políticas marcadas en varios temas de la política nacional" Así mismo, Acosta aseguró que se fijó el 11 de octubre como fecha para continuar el Congreso, porque una semana antes se llevaran a cabo las elecciones en el estado de Guerrero, donde se disputan 41 diputaciones locales y 81 alcaldías, y se quiere poner "toda la atención", para después culminar con una "planilla de unidad que permita cerrar este difícil proceso después de las elecciones del 16 de marzo" La falta de definición de los consejeros, provocó también que no concluyeran las negociaciones para nombrar a los integrantes del Consejo Político, figura que se creó en este Congreso Nacional, y que estaría conformado por el presidente del partido, el secretario general, y once figuras políticas representativas de las corrientes más importantes del PRD El presidente provisional enfatizó que en el caso de mayor discusión, el de abrir el partido a alianzas electorales, antes vetadas, con el PRI, --637 contra 392 delegados--, lo que se logró fue "no actuar con dogma, no actuar con camisas de fuerza y tener la capacidad para analizar lo que más le convenga al partido" Acosta Naranjo descartó que se "desfigure" el PRD con la posibilidad de hacer alianzas, no sólo con el PRI y el PAN, sino con otros como el Partido Verde y con los que tradicionalmente se han aliado, el PT y Convergencia, consideró que el candado que se impuso hace tres años para explorar esa posibilidad, impedía "analizar cualquier circunstancia y era en verdad un problema, que luego se convierte en una camisa de fuerza que no le permite al partido actuar de la mejor manera para sus intereses en cada caso" Sostuvo que por el momento no hay ningún mandato para que se inicien negociaciones, además de que persiste un candado que es la aprobación de las dos terceras partes del Consejo Nacional en cada propuesta que se haga en cada estado Justificó las alianzas con partidos como el PAN en estados como Nayarit, Chihuahua y Oaxaca, donde el PRD hizo alianzas con ese partido en años anteriores, y que ahora, dijo, podría ayudar para enfrentar a gobernadores priistas como Enrique Peña Nieto, en el Estado de México En el caso del PRI, explicó que habría consideraciones para hacer alianzas en entidades como Guanajuato y Jalisco, donde gobierna el PAN "Las alianzas se van moldeando de acuerdo a la circunstancia nacional, estatal que es flexible, que se va modificando y que se tiene que revisar en cada caso, con una visión distinta? así lo dicen los clásicos de la teoría política, la política de alianzas, es un problema de táctica no de estrategia", apuntó Acosta Naranjo Sin embargo, Saúl Escobar y Alfonso Ramírez Cuellar, consideraron que la flexibilidad para negociación de alianzas electorales es un mensaje "equivocado" Escobar consideró que no era el momento para posibilitar alianzas con el PRI, dado que en el 2009, el principal rival del PRD será ese partido, aunque consideró que el candado de que sean las dos terceras partes del Consejo Nacional, las que decidan, puede frenar los intentos por aliarse con partidos antagónicos Para Ramírez Cuellar, el PRD se quedó en la "orfandad" política, porque no se tiene claro quién es el enemigo, "es incongruente que a nivel federal estés llamando a votar en contra de un partido y a nivel local vayas a establecer una alianza, tomando en cuenta que el próximo año hay 13 elecciones y la elección federal" En tanto, Alejandra Barrales, líder perredista en el Distrito Federal, afirmó que no es aceptable una alianza con "los perdedores del PRI o el PAN", porque el PRD es la primera fuerza política en la capital del país, por lo que no se aplicará la nueva estrategia de alianzas