Ruinas del deseo

jueves, 25 de septiembre de 2008 · 01:00
MÉXICO, D F, 24 de septiembre (apro)- Más de 250 poemas componen la antología poética de Cristina Peri Rossi en Runas del deseo, libro editado por la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) Compilado por Ángels Gregori y con una presentación de Eduardo Milán, la antología de la serie Poesía de la UACM destaca desde los primeros textos poéticos de Peri Rossi, como Evohe (1971), "Descripción de un náufrago" (1975) y "Diáspora" (1976), a los más recientes como "Aquella noche" (1997) y "Estrategias del deseo" (2004) Peri Rossi, quien nació en Montevideo, Uruguay, radica desde su exilio en 1972 en Barcelona, España, donde se nacionalizó sin perder su nacionalidad original Además de ser ensayista y narradora, desde 1994 es becaria de la Fundación Guggenheim, y regularmente publica textos para distintos medios de comunicación en España, como El País, El Periódico de Barcelona y El Mundo El siguiente texto forma parte de la presentación de Eduardo Milán: "La poesía que Peri Rossi registra en Runas del deseo, que abarca su escritura desde 1971 hasta 2004, es un diálogo permanente entre la interioridad y el afuera "Esos dos polos convocan alrededor de sí mismos algunos temas recurrentes: el amor, el exilio, la presencia permanente de la escritura como tarea que enlaza la experiencia vital Su escritura parecería que surge sin proyecto: se desprende con ligereza de la experiencia vital Cabría preguntarse si la conciencia del exilio asumida como escritura permite esa tercera posibilidad situada entre el proyecto meditado, pensado y repensado y la entrega intempestiva a una escritura casi diaria, casi testimonio de uno mismo "Una escritura marcada por la conciencia del exilio obliga a una construcción permanente del presente como lugar nunca conquistado por completo Es el margen diferencial con una escritura situada en un espacio en cuyo lugar simbólico --y por lo tanto real-- opera para el sujeto --aunque habría que preguntarse qué tanto opera como dispositivo liberador de la expresión y no como instancia de restricción contra la cual es necesario rebelarse-- como ya dado, de manera que no necesita pensarlo continuamente, ganarlo otra vez, volver derivable a la escritura el extrañamiento de estar ahí en ese lugar fuera de lugar, suspendido, flotante: que la escritura opere como metáfora de la ausencia, que se haga cargo de la construcción del umbral y de la casa que invente ella misma su propia hospitalidad, la del lugar y la del que llega El peligro de la tautología acecha, el del circunloquio cerca, sobre todo porque la escritura es también tautológica en la medida en que es un movimiento de retorno circunscribe un ámbito ?volvedor?"

Comentarios