Conversación única con Ricardo Martínez
Parece increíble, pero el pintor, que en octubre cumplirá 90 años, nunca concedió una entrevista Es con el poeta, narrador y animador cultural Marco Antonio Campos con quien ha tenido la deferencia Campos, quien lo ha admirado desde su juventud, considera que Martínez es el más grande pintor mexicano vivo, y en este texto hace lo que llamó un "retrato conversado" que entregó a Proceso
A Miguel Ángel Muñoz, por su
seguimiento a la obra de Ricardo Martínez
Ricardo Martínez me muestra el vasto estudio de su casa En paredes y mesas se ven fotografías familiares y de amigos y un especial recuerdo por la inolvidable esposa Zarina Veo la fotografía de Joaquín Díez-Canedo, quien hizo de Joaquín Mortiz durante 20 años la mejor editorial mexicana, y hay dos fotografías donde Martínez aparece con Juan Rulfo, del que ilustró la portada de Pedro Páramo
Se miran en las paredes dos grandes carteles de Rembrandt A la entrada, en un primero y segundo pisos, se halla una de las bibliotecas de la casa, donde sobresalen los libros de arte Al fondo, volteados, se aprecian los amplios lienzos que recientemente ha pintado Antes está el caballete y una mesa con paletas de colores y decenas de pinceles de diversos tamaños
"Conversemos, y usted toma apuntes y después los desarrolla Ya sabe que jamás he dado una entrevista", me dice
"Sería como una suerte de crónica-conversación", repongo
De estatura superior a la media, Martínez se ve delgadamente fuerte y magníficamente lúcido Nadie pensaría que tiene 90 años
El pintor forma parte de una numerosa familia Fueron 16 hermanos Pese a no haber antecedentes artísticos, cinco de los hijos se relacionaron con el arte: Oliverio ?escultor fallecido a los 37 años y a quien se deben los conjuntos escultóricos del Monumento a la Revolución?, el actor Jorge Martínez de Hoyos, dos arquitectos (Enrico y Homero) y el propio Ricardo
Entre los nueve y los 14 años Martínez vivió en San Antonio, Texas Le tocaron en Estados Unidos los primeros años de la Gran Depresión Se considera bilingüe Cuando regresó a México le costaba trabajo expresarse en español Saber la lengua inglesa le ha permitido leer directamente novelas de Jane Austen, de las hermanas Brontë, de Dickens, de Melville (le parece un gran monumento Moby Dick) y de los grandes novelistas estadunidenses de la generación perdida: Faulkner (el más complejo), Dos Passos (en especial Manhattan Transfer), Scott Fitzgerald (gozó grandemente El gran Gatsby), Hemingway Se entusiasma al hablar de Madame Bovary de Flaubert y de novelas de Thomas Mann (Los Buddenbrook, Tonio Kroger, Muerte en Venecia), las que cuenta como si acabara de leerlas
Hay cuadros de varias dimensiones, pero se advierte una preferencia por las telas de tres metros Por el tamaño ?señala sin ninguna lamentación? es difícil que entren en muchos de los museos
Relata cómo es su rutina diaria Se despierta a las siete de la mañana, desayuna, lee dos horas los periódicos, se da un baño, pinta largamente, merienda, ve las noticias y lee de las nueve a las 11 de la noche Desde que se casó lleva una vida sencilla:
"Me metí en cintura y la pintura fue mi mundo"
En invierno no soporta el frío en el estudio grande de la casa y se cambia al primero que tuvo, donde hay luz cenital y puede poner la calefacción
Martínez empezó muy joven En el edificio donde trabajaba en la calle de Bajío, en la colonia Roma, habitaba en otro piso el pintor regiomontano Federico Cantú, quien era un buen conversador, muy ocurrente y trabajador
"Fue el primero que me apoyó, y mucho", recuerda agradecido "Cuando pinté el cuadro aquel en que un ángel es seguido por unos niños, a quienes acompañan unos perros ?me muestra la reproducción en un libro?, Federico vio en él algo encantadoramente infantil y lo llevó a la galería de Inés Amor, a quien también le gustó A los pocos días Inés habló para decir que se había vendido en 600 pesos Casi me voy de espaldas En esos tiempos era una fortuna"
Autodidacta, lo que ha aprendido se lo debe a libros de investigación o a sus propios experimentos Entre los varios libros clave que leyó, fue definitivo el del alemán Max Doerner, The materials of the artist, en la edición en inglés de 1934 El libro le enseñó los secretos de la técnica Entre otras cosas, aprendió cómo preparar las telas, y nadie en México ?observa orgulloso? las hacía en esos años mejor que él Inclusive un día Rufino Tamayo lo llamó para que le preparara las telas Martínez contestó que no tenía tiempo
"O me dedicaba a preparárselas a otros o pintaba yo"
Desde los cuadros que pintaba a los 26 años se nota, tanto en el trazo del paisaje como en la delineación de las figuras, la maestría del artista Se encuentran en ellos la alegría del color y la exaltación de la luz
?¿Cuáles son sus colores preferidos?
?Ninguno en especial En el momento de pintar, algo me llama y elijo el color
De sus cuadros me deslumbra el amarillo, que me parece cada uno una diferente manera de ver al sol En su pintura hay cinco o seis amarillos que logra a través de superposiciones
"O yuxtaposiciones, como dicen los que saben", agrega irónico
Pero hay verdes que parecen pura luz y tienen hasta 10 superposiciones
"Guerrero Galván me decía: no pintes el verde; es un color ácido No le hice caso, claro"
Su pintura está llena de color, de luz, de sensualidad, y en numerosos instantes la poesía ilumina y eleva En cuadros de la primera época, teniendo como fondo un paisaje, hallamos niños, músicos, campesinos y pescadores Los cuadros despiertan ternura, melancolía, piedad
?¿Por qué el paisaje?
?Era lo que entonces veía fácilmente Un paisaje áspero, primitivo Sin embargo, no describía el paisaje exactamente como era, sino, como los pintores franceses del siglo XVIII, XIX, buscaba hacer una pintura: que fuera lo que yo veía o creía ver
En su obra, el perro es el animal que más aparece: desde las primeras pinturas a las últimas
"No hay un propósito consciente Es un motivo plástico y ya"
En la casa de la infancia ?recuerda? había un perro de la "palomilla familiar" Prefiere los perros de la calle que los caseros
"Son mucho más interesantes"
Martínez pintó pocos retratos, entre ellos el de Zarina, su esposa, sin duda el más bello; el de su hermano Jorge, los de sus padres y algunos más de amigos cercanos
?¿Por qué no siguió con el retrato?
?Porque a las personas les gusta salir mejor de lo que son Por lo demás, el retrato en la pintura ha tendido a desaparecer con el desarrollo de la fotografía Si se va a las exposiciones, se observa que son los menos interesantes
Martínez siente en todo su cuerpo y su alma el pasado mexicano Una y otra vez dice que es una tradición poderosa y "hay que aprovecharla y merecerla" Observa que la Ciudad de México se parece a Roma Se excava un poco y se encuentra otra ciudad
A Europa ha viajado muchas veces, pero no ha vivido allá A los países ha ido sobre todo para ver la pintura en los museos, en las catedrales e iglesias Ninguna catedral lo ha maravillado como la de Chartres Tiene un recuerdo especial de un viaje que hizo con su esposa en automóvil por el norte de Francia y de España para terminar en Madrid De inmediato se dirigieron al Prado Sus grandes referencias españolas son, en primer término, Velázquez, y luego Goya, pero admira a El Greco y a Zurbarán Del siglo XX, a Picasso y a Miró
Pero para él Italia es el país por excelencia de la belleza
"En cada esquina hay una maravilla", dice
Admira a los pintores del Renacimiento Me atrevo a sugerir que en Italia parece haber una sola y deslumbrante línea del Duecento al Cinquecento
Habla de Miguel Ángel:
"Modificó radicalmente la pintura"
Recuerda a un amigo suyo que cuando vio sus pinturas en la Capilla Sixtina dijo: "Allí uno se siente un enano" Bellamente, Martínez dice del pintor florentino:
"Es una gran sombra en la historia de toda la pintura del mundo Es tan grande que se nos escapa de la pintura Sin embargo, a sus gigantes musculosos prefiero algo más próximo a mí, como la delicia táctil de los venecianos o la matemática de la pintura de Piero della Francesca, y la geometría alucinante de Paolo Uccello Cuatro siglos después, entre los postimpresionistas, encontramos ese rigor exacto en Cezanne"
Hombre aislado, y al mismo tiempo amigo de muchos, recuerda que varias veces han querido integrarlo a grupos Enfático asegura:
"Primero muerto que incorporarme a estos cireneos"
Un tiempo trató a Octavio Paz, de quien lo deslumbraban centellas súbitas de su gran inteligencia Paz lo buscó incorporar al surrealismo
"Pero y yo, ¿qué tenía que ver con eso?"
Pone el ejemplo de Balthus, a quien cuando le preguntaron en una entrevista sobre su persona, contestó: "Balthus es un hombre del que se sabe poco Ahora vamos a los cuadros" Así respondería él Le extraña que lo juzguen intratable:
"Yo sólo les contestaría como Balthus: ?Vean los cuadros?"
Jamás ha tenido un trabajo; ha vivido de pintar y para pintar
"Al principio vivía agarrado de la brocha"
"Pajarear" es una palabra que le gusta repetir Pajarear sencillamente por hablar o por hablar distraídamente
"Hay que saber oír en el tiempo las voces antiguas ?apunta? Hay que distinguir las voces de los ecos"
Y concluye:
"Se debe buscar, como quería Balthus, los vasos comunicantes de toda la historia de la pintura"
En suma: al pintar se debe tener algo personal que decir Y cita una línea de Antonio Machado: "Escuchar de las voces sólo una" Se debe pintar con templanza, honestidad y conociendo los límites que uno tiene Pintura y vida deben estar totalmente integradas en el momento de hacer un cuadro
Gran número de sus obras parten de bocetos o dibujos previos Muestra de entre las páginas de un álbum algunos bocetos en color
"Podría hacerse una exposición con el conjunto de los bocetos En general, en lo que he pintado hay un elemento expresivo, pero lo esencial es la belleza del cuadro como totalidad"
Comento que grandes o excelentes poetas son quienes mejor han ahondado en el arte de la pintura Recordamos a Baudelaire, a Apollinaire, a Bonnefoy, y entre nosotros, a Villaurrutia, Cardoza y Aragón, Paz y Bonifaz Algunos de los mejores trabajos realizados sobre el propio Martínez han sido escritos por varios de nuestros poetas mayores: Bonifaz Nuño, Alí Chumacero, el propio Cardoza?
"En efecto, Marco Antonio, yo he tenido muchos más amigos entre escritores que entre pintores"
Sus lecturas poéticas no dejan de sorprender: la poesía medieval y los siglos de oro españoles, el modernismo mexicano, Ramón López Velarde, los Contemporáneos, particularmente José Gorostiza; y por otro lado, la poesía inglesa, en especial Walt Whitman, de quien admiró la desmesura, o mejor aún, la poesía total Subraya la admiración que sentía Borges por él y repite los dos últimos versos del soneto "Camden": "Casi no soy, pero mis versos ritman/ la vida y su esplendor Yo fui Walt Whitman"
Sobre la traducción que hizo León Felipe de Whitman sentencia:
"Al darle un tono bíblico la volvió otra cosa"
Recuerda con cariño al poeta hispano:
"No es muy estimado ahora como poeta, pero era un hombre de una conmovedora calidad humana"
De la poesía española Martínez hizo suyas la de Jorge Manrique, Fray Luis de León, San Juan de la Cruz, Garcilaso de la Vega, Francisco de Quevedo y Luis de Góngora Considera el Cántico espiritual una obra maestra, del tamaño del Cantar de los cantares, pero se siente más próximo al poema de Fray Luis al organista Salinas y siente como cosa vivida, como un compendio de sus 90 años, La vida retirada En cuanto a poesía mexicana, admira ante todo a Manuel José Othón, a Ramón López Velarde y a José Gorostiza
"Me sabía de memoria Idilio salvaje, La suave patria y Muerte sin fin; ahora se me ha borrado mucho"
Le pregunto si la poesía le ha dado imágenes para su pintura Cita dos casos: uno, de la primera época, Paisaje de Santa Rosa, cuando al ver el campo y al pintar el lienzo se le repetía en la memoria el famoso verso de López Velarde: "Patria, tu superficie es el maíz"; el otro, el poema Desnudo, de Jorge Guillén, lleno de luz, que le inspiró un bellísimo cuadro del mismo título
La mujer es el centro de su mundo pictórico?"y de la vida", añade Y recuerda la línea lopezvelardeana: "el perímetro jovial de las mujeres"
Habla de que a su muerte piensa dejar el inmueble que habita como casa-estudio
"Como las que hay en París de Picasso o Rodin, o la de Diego Rivera en Ciudad de México", compara tomando los modelos
Desde luego, habría que lograr una adecuación de la casa, entre otras cosas para distribuir simétricamente unos 10 cuadros
?¿Qué le recomendaría usted a un joven pintor?
?No soy nadie para hacerlo, pero si tuviera que recomendar algo diría que uno debe compararse con los grandes maestros para adquirir la modestia, dar su máximo esfuerzo en cada cuadro y saber vivir dentro de sus limitaciones
Martínez pide a su asistente, Mauro Castillo, que muestre las telas de amplias dimensiones Admiro su magnífico Desnudo, de inspiración guilleniana, La llorona, versión estremecedora de la leyenda prehispánica de la mujer que pierde sus hijos, y una adaptación personal de Susana y los viejos La pintura de Martínez no conoce decadencia
El 28 de octubre Ricardo Martínez cumple 90 años Pregunto cuál considera que ha sido el mejor momento en su vida pictórica Lacónicamente, sin ningún titubeo, me responde:
?Éste l