Alista SME ayunos en Zócalo, Senado y San Lázaro
MEXICO, DF, 20 de noviembre (apro) - El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) anunció hoy que 58 trabajadores se reportaron listos para iniciar el lunes próximo un ayuno en tres campamentos que se instalarán de forma permanente en el Zócalo, el Senado y la Cámara de Diputados
El secretario del Exterior del SME, Fernando Amezcua, informó que un grupo de médicos valora desde el jueves a 58 hombres y mujeres electricistas que decidieron llevar a cabo la huelga de hambre para verificar que no padezcan complicaciones que afecten su vida
Al destacar que la medida se enmarca en el rechazo a la decisión del gobierno de Felipe Calderón de liquidar Luz y fuerza del Centro (LFC), Amezcua advirtió que "no cualquier persona puede enfrentar una condición de esta naturaleza ni tampoco vamos a arriesgar a nuestros compañeros"
El vocero del SME aclaró que no fue el Comité Central el que convocó a la protesta mediante ayuno, pero la avala siempre y cuando los electricistas no arriesguen su vida
"El sindicato no va a dejar que por el simple hecho de que se sienta coraje o rabia a exponer la vida de los compañeros Se toma esta decisión por la falta de respuestas, la cerrazón del gobierno federal y además porque está insistiendo en mostrar una condición de desmantelamiento del movimiento", agregó
En tanto, el exlíder disidente del SME, Alejandro Muñoz, planteó reabrir los centros de liquidación, pues algunos electricistas no pudieron cobrar debido a la falta de documentos
En entrevista con Radio Formula, el también extesorero del sindicato de electricistas comentó que los extrabajadores de LFC aguardarán una respuesta por parte del gobierno hasta el lunes próximo
Sobre los electricistas que no pudieron liquidarse o rechazaron acudir a recibir su finiquito, Muñoz consideró que ello se debe a la ausencia de una solución inmediata al conflicto
Denunció que ha existido falta de información por parte de las autoridades federales, pues no se les ha mantenido al tanto sobre las supuestas recontrataciones, ni a los nuevos listados de éstas
Incluso consideró que sería mejor para los electricistas hacer un examen práctico que responder a una evaluación profesional
El secretario del Exterior del SME, Fernando Amezcua, informó que un grupo de médicos valora desde el jueves a 58 hombres y mujeres electricistas que decidieron llevar a cabo la huelga de hambre para verificar que no padezcan complicaciones que afecten su vida
Al destacar que la medida se enmarca en el rechazo a la decisión del gobierno de Felipe Calderón de liquidar Luz y fuerza del Centro (LFC), Amezcua advirtió que "no cualquier persona puede enfrentar una condición de esta naturaleza ni tampoco vamos a arriesgar a nuestros compañeros"
El vocero del SME aclaró que no fue el Comité Central el que convocó a la protesta mediante ayuno, pero la avala siempre y cuando los electricistas no arriesguen su vida
"El sindicato no va a dejar que por el simple hecho de que se sienta coraje o rabia a exponer la vida de los compañeros Se toma esta decisión por la falta de respuestas, la cerrazón del gobierno federal y además porque está insistiendo en mostrar una condición de desmantelamiento del movimiento", agregó
En tanto, el exlíder disidente del SME, Alejandro Muñoz, planteó reabrir los centros de liquidación, pues algunos electricistas no pudieron cobrar debido a la falta de documentos
En entrevista con Radio Formula, el también extesorero del sindicato de electricistas comentó que los extrabajadores de LFC aguardarán una respuesta por parte del gobierno hasta el lunes próximo
Sobre los electricistas que no pudieron liquidarse o rechazaron acudir a recibir su finiquito, Muñoz consideró que ello se debe a la ausencia de una solución inmediata al conflicto
Denunció que ha existido falta de información por parte de las autoridades federales, pues no se les ha mantenido al tanto sobre las supuestas recontrataciones, ni a los nuevos listados de éstas
Incluso consideró que sería mejor para los electricistas hacer un examen práctico que responder a una evaluación profesional