MÉXICO, D F, 5 de noviembre (apro)- El líder del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Martín Esparza, acusó al gobierno federal y a la disidencia encabezada por Alejandro Muñoz, de confabularse para desestabilizar al movimiento que se opone a la desaparición de Luz y Fuerza del Centro (LFC) y exige el reconocimiento de las autoridades laborales del país
         En su conferencia de prensa mañanera, Esparza minimizó los acuerdos alcanzados entre las secretarías de Gobernación y del Trabajo, y la disidencia del SME, ya que forman parte de la estrategia divisoria del gobierno federal
         Esparza afirmó que dichos acuerdos carecen de representación, ya que Muñoz no tiene legitimidad en el SME: "Nosotros tenemos la representación jurídica del Sindicato; el no representa ni a los liquidados"
         Asimismo, reprobó que las autoridades condicionen cualquier acuerdo a que la totalidad de los trabajadores de LFC acepten su liquidación
         Por otra parte, reiteró que si el Juzgado Primero de Distrito del Centro Auxiliar de la Primera Región niega la suspensión definitiva al SME, el sindicato seguirá la lucha legal y política En lo legal, indicó, aún quedará la controversia constitucional que, según él, promoverá la Cámara de Diputados
         Además, dijo que acudirán a organismos internacionales, como la Organización Internacional del Trabajo y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para denunciar la decisión arbitraria que tomó el gobierno federal y solicitar su apoyo contra el decreto de extinción de LFC
Esparza reiteró también que el próximo 11 de noviembre el SME tomará pacíficamente las instalaciones de LFC, para lo cual solicitó el apoyo de diputados y senadores
Dijo que los integrantes del Poder Legislativo tienen fuero y obligaciones con la ciudadanía para defender empresas públicas como LFC, que no son propiedad del gobierno sino del pueblo