Descabezados en Durango y descuartizados en Guerrero
MÉXICO, D.F., 16 de diciembre (apro).- La violencia sin límites que cada día protagoniza la delincuencia organizada cobró este miércoles la vida de nueve personas.
En Cuencamé, Durango, fueron descubiertas seis cabezas humanas, cinco de elementos de la Agencia Estatal de Investigación y una más de un agente del Ministerio Público del fuero común.
En tanto, en Chilpancigo, Guerrero, fueron encontradas partes de los cuerpos de dos personas sacrificadas por el llamado Jefe de jefes, y en Michoacán fue ejecutado un policía municipal.
La Procuraduría General de Justicia de Durango (PGJE) afirmó que las cabezas encontradas correspondían a los servidores públicos que fueron levantados el pasado lunes 14 en la comunidad de Las Nieves, municipio norteño de Ocampo, entre ellos Herculano Cázares, Gilberto Calderón Osorio y Óscar Aguirre Chávez.
El hallazgo se produjo durante las primeras horas de hoy, en una iglesia de Cuencamé, cuando personal de limpieza realizaba sus labores y se topó con varias bolsas de plástico de las que salía sangre.
La dependencia informó que hasta el momento las víctimas no han sido identificadas.
La víspera fueron encontradas dos cabezas humanas que colgaban de un puente peatonal del municipio serrano de Pueblo Nuevo, cuyos cuerpos no han sido localizados hasta el momento.
Mientras tanto, en Chilpancingo, Guerrero, fueron descubiertas tres bolsas negras que contenían partes de los cuerpos de dos personas. Las bolsas, que estaban tiradas en la avenida Lázaro Cárdenas, a la altura del monumento a las banderas, tenían al lado una leyenda firmada por el Jefe de jefes.
De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Civil de Guerrero, el resto de los cuerpos fueron encontrados esta madrugada, poco después de las 5:00 horas, en la colonia La Haciendita.
Elementos de la policía estatal y de la policía preventiva municipal realizaron el hallazgo de los cuerpos desmembrados de dos personas del sexo masculino, que hasta el momento no han sido identificados.
El mensaje colocado al lado de los cuerpos, en una cartulina blanca, amenazaba a secuestradores y pedía a la población "no alarmarse" por los asesinatos.
Por otra parte, en Michoacán se reportaron dos nuevos enfrentamientos entre grupos del crimen organizado, ambos en el municipio de Zamora, donde sólo se reportaron daños materiales a negocios y vehículos.
Uno de los enfrentamientos entre sicarios se registró en la periferia de la ciudad, en las inmediaciones de la Central de Autobuses, donde presuntos integrantes de grupos antagónicos al servicio del crimen organizado se enfrentaron a tiros.
El segundo ataque se produjo en la esquina de las avenidas López Mateos y Merino Rábago, en el centro de la ciudad, donde fue abandonado un automóvil Pontiac rojo, con impactos de proyectil de arma de fuego.
Militares, policías federales, estatales y municipales, mantienen la alerta y realizan patrullajes en Zamora y las comunidades rurales.
También en Michoacán, pero en el municipio de Yurécuaro, el policía municipal Juan Manuel Hernández Cervantes, de 39 años de edad, fue encontrado sin vida, atado de pies y manos con cinta canela, y con un mensaje del crimen organizado, del que no se dio a conocer su contenido.