Vigilancia extrema por visita del presidente de EU
MÉXICO, D F, 16 de abril (apro)- El gobierno de México, en coordinación con el de Estados Unidos, puso en marcha un férreo dispositivo para garantizar la seguridad del presidente Barack Obama durante su visita de 24 horas a la capital mexicana
Aunque el protocolo de seguridad implementado es el mismo que se pone en marcha en cada viaje al extranjero que realiza un presidente de Estados Unidos, en México pocas veces se había visto
En el operativo participó un grupo de francotiradores de las Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano para vigilar la llegada de Obama al Campo Marte
Los francotiradores se apostaron en las azoteas de los hoteles Marriot, Presidente Intercontinental, Nikko y W, así como en el Auditorio Nacional
Por la mañana, elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP), personal de Seguridad Pública del Distrito Federal y soldados del Ejército Mexicano vestidos de civil que portaban una gorra color azul marino en señal de identificación, cercaron las inmediaciones del Campo Marte y de la residencia oficial de Los Pinos El operativo abarcó la zona hotelera de Polanco, el Auditorio Nacional, el Paseo de la Reforma, las avenidas Parque Lira y Constituyentes
A partir del Campo Marte y a lo largo de la avenida Reforma, los transeúntes y automovilistas pudieron circular sin ningún problema en medio de banderas de México y de Estados Unidos que, hasta al museo de Antropología, ondeaban colgadas en los arbortantes de las dos aceras, vigilados por los elementos de seguridad
Sin embargo, a la salida del metro Constituyentes, personal de seguridad instaló un férreo operativo de vigilancia que incluyó inspecciones oculares de vehículos y, con detectores de metales, a los conductores
Obama llegó al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) a bordo del Air Force One, y fue escoltado por tres helicópteros de la marina estadunidense Luego se trasladó en el helicóptero Marine One al Campo Marte
Alrededor de las 13:30 horas, la llegada del presidente Obama al Campo Marte estuvo vigilada de cerca por cientos de agentes ?incluidos del servicio secreto de Estados Unidos-- vestidos con trajes negros que portaban binoculares, mientras elementos del Estado Mayor Presidencial y personal de la PFP impedían el paso de peatones en la puerta de entrada que da al Paseo de la Reforma
El operativo también incluyó el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México Desde las 7:30 horas, la Dirección de Aeronáutica Civil prohibió los vuelos de cualquier tipo de helicópteros sobre el Distrito Federal, y a partir de las 12:30 horas, se suspendió toda actividad aérea en el AICM: ningún avión comercial o privado pudo despegar o aterrizar
Pese a lo ostentoso que resultaron las maniobras para garantizar la seguridad de Obama y su comitiva, las autoridades federales y del Distrito Federal se abstuvieron de informar sobre el número de efectivos que participaron en los operativos Sin embargo, extraoficialmente se supo que más de tres mil agentes federales y de empresas privadas resguardaron la terminal aérea
Fue tal la expectativa que provocó el viaje del presidente de Estados Unidos, el primero que realiza a nuestro país desde que asumió el poder el pasado 20 de enero, que cientos de personas en los alrededores del AICM, en puentes peatonales y azoteas, se reunieron para observar la llegada del Air Force One
Por la tarde, conforme se acercaba la hora para la cena que el presidente Calderón ofreció a Obama y su comitiva en el Museo de Antropología, se incrementó la presencia de agentes vestidos de civil y de guardias de seguridad en la zona
Al menos 100 agentes de la PFP y del EMP hicieron guardia en el cruce de Gandhi y Paseo de la Reforma para resguardar a los cien invitados al encuentro
Aunque el protocolo de seguridad implementado es el mismo que se pone en marcha en cada viaje al extranjero que realiza un presidente de Estados Unidos, en México pocas veces se había visto
En el operativo participó un grupo de francotiradores de las Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano para vigilar la llegada de Obama al Campo Marte
Los francotiradores se apostaron en las azoteas de los hoteles Marriot, Presidente Intercontinental, Nikko y W, así como en el Auditorio Nacional
Por la mañana, elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP), personal de Seguridad Pública del Distrito Federal y soldados del Ejército Mexicano vestidos de civil que portaban una gorra color azul marino en señal de identificación, cercaron las inmediaciones del Campo Marte y de la residencia oficial de Los Pinos El operativo abarcó la zona hotelera de Polanco, el Auditorio Nacional, el Paseo de la Reforma, las avenidas Parque Lira y Constituyentes
A partir del Campo Marte y a lo largo de la avenida Reforma, los transeúntes y automovilistas pudieron circular sin ningún problema en medio de banderas de México y de Estados Unidos que, hasta al museo de Antropología, ondeaban colgadas en los arbortantes de las dos aceras, vigilados por los elementos de seguridad
Sin embargo, a la salida del metro Constituyentes, personal de seguridad instaló un férreo operativo de vigilancia que incluyó inspecciones oculares de vehículos y, con detectores de metales, a los conductores
Obama llegó al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) a bordo del Air Force One, y fue escoltado por tres helicópteros de la marina estadunidense Luego se trasladó en el helicóptero Marine One al Campo Marte
Alrededor de las 13:30 horas, la llegada del presidente Obama al Campo Marte estuvo vigilada de cerca por cientos de agentes ?incluidos del servicio secreto de Estados Unidos-- vestidos con trajes negros que portaban binoculares, mientras elementos del Estado Mayor Presidencial y personal de la PFP impedían el paso de peatones en la puerta de entrada que da al Paseo de la Reforma
El operativo también incluyó el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México Desde las 7:30 horas, la Dirección de Aeronáutica Civil prohibió los vuelos de cualquier tipo de helicópteros sobre el Distrito Federal, y a partir de las 12:30 horas, se suspendió toda actividad aérea en el AICM: ningún avión comercial o privado pudo despegar o aterrizar
Pese a lo ostentoso que resultaron las maniobras para garantizar la seguridad de Obama y su comitiva, las autoridades federales y del Distrito Federal se abstuvieron de informar sobre el número de efectivos que participaron en los operativos Sin embargo, extraoficialmente se supo que más de tres mil agentes federales y de empresas privadas resguardaron la terminal aérea
Fue tal la expectativa que provocó el viaje del presidente de Estados Unidos, el primero que realiza a nuestro país desde que asumió el poder el pasado 20 de enero, que cientos de personas en los alrededores del AICM, en puentes peatonales y azoteas, se reunieron para observar la llegada del Air Force One
Por la tarde, conforme se acercaba la hora para la cena que el presidente Calderón ofreció a Obama y su comitiva en el Museo de Antropología, se incrementó la presencia de agentes vestidos de civil y de guardias de seguridad en la zona
Al menos 100 agentes de la PFP y del EMP hicieron guardia en el cruce de Gandhi y Paseo de la Reforma para resguardar a los cien invitados al encuentro