Rodrigo Medellín Legorreta, premio a la Constancia

lunes, 22 de junio de 2009 · 01:00
MÉXICO, D F, 17 de junio (apro)-El investigador del Instituto de Ecología de la UNAM Rodrigo Medellín Legorreta se encuentra en la cima de su trabajo científico
En sesión solemne, la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística le otorgó este miércoles 17 la medalla "Benito Juárez" por sus méritos académicos y por su tenacidad en la preservación del medio ambiente
         Sin duda que este año ha sido único para el doctor en Ciencias, Medellín Legorreta
En enero pasado, la firma relojera Rolex lo premió con 50 mil dólares (y un reloj de acero y oro de la misma marca) por "expandir el conocimiento y mejorar la vida en nuestro planeta"
Por sus contribuciones al conocimiento de la biodiversidad del país, y por su labor a favor de la preservación de mamíferos mexicanos y su hábitat, meses después obtuvo el Premio "Amor al Planeta" en el área de Investigación Científica en Conservación Biológica, que otorgó la compañía automotriz Volkswagen
En entrevista con APRO, Medellín Legoprreta no oculta su azoro por el reconocimiento a su trayectoria, y a todo lo que ha aportado al bien del país 
"Si algo de lo que me cuesta trabajo es hablar de mi mismo Ya mis colegas dicen '¿a este cuate qué le pasa?, ya se convirtió en profesional de los premios'"
El mismo se responde:
"Si yo no me nomino solo Asesoré al biólogo que ganó también el Premio Rolex, y que tiene montada la exposición de dinosaurios que está en el Zócalo de la Ciudad de México, y me pidió que le diera una foto mía con algunos animales
"Yo me negué y le condicioné a que en la foto estuviéramos los dos El resultado fue que me puso sólo a mi Me siento medio incómodo con tanto alboroto  Muy en la mira"
         Rodrigo Medellín tiene una pasión particular por los mamíferos y por los quirópteros, en general
Simpático y poseedor de un gran entrenamiento en el trabajo de campo, el científico es como los personajes que aparecen en Animal Planet, o en Canal Discovery: temerario
 
         Cuenta siempre que no fue un niño como cualquier otro De 51 años de edad, el científico narra que la primera palabra que pronunció no fue "mamá", sino "flamingo", al reconocer a una de esas aves de un libro que le mostraron
En declaraciones a la revista Proceso contó:
         "Yo puedo asegurar que cuando tenía 11 años no había en México nadie que supiera tanto de los mamíferos africanos como yo Eran mi pasión, y todo lo que hacía, pensaba y decidía hacer estaba en función de ellos Por eso le pedí a mi mamá que me inscribiera en aquel famoso programa del El Premio de los 64 mil pesos, yo estaba seguro que lo ganaría, sabía todos los nombres científicos de los animales, su hábitat, tipo de alimentación, biogeografía, todo Fui el primer niño que concursó, y en la última etapa me puse nervioso Y perdí"
         Para fortuna de Medellín, el doctor Bernardo Villa, fundador del área de mamíferos del Instituto de Biología de la UNAM, siguió todo el programa de televisión y decidió buscar a los padres del muchacho, para proponerles que pasara su tiempo libre en la UNAM al lado de los principales especialistas en el campo del conocimiento de los mamíferos mexicanos
          Y especificó:
         "En una ocasión el doctor William López Forment me llevó a una salida de campo a las cuevas de Guerrero Ahí, a los 12 años, tuve mi primer contacto con los murciélagos y quedé pasmado A mí me encantaban los mamíferos africanos porque hacían de todo: corrían, excavaban, comían carne, hierbas, insectos, trepaban por los árboles Pero frente a los murciélagos prácticamente eran nada
Símbolo de poder, destreza y fuerza, el jaguar (Panthera onca) es uno de los animales más significativos del continente y, al mismo tiempo, una de las especies de mayor fragilidad, como se muestra en el libro El jaguar en el nuevo milenio, libro que el Fondo de Cultura Económica, la UNAM y la Wildlife Conservation Society publicaron en 2002
         El insólito proyecto fue financiado por la marca automotriz Jaguar Cars, y consistió en una compilación científica exhaustiva realizada por el propio Rodrigo Medellín, Clementina Equihua, y los estadunidenses Cheryl L B Chetkiewicz, Peter Crawshaw Jr, Alan Rabinowitz, Kent H Redford, John G Robinson, Eric W Sanderson y Andrew B Taber, con el fin de llevar a la luz a los misteriosos felinos que en México van de los 60 a los 100 kilos
         En aquel momento, declaró:
         "Estamos viviendo un parteaguas, los jaguares nos han acompañado en toda nuestra historia: Si nosotros no los defendemos, los conservamos y los mantenemos como un elemento activo del ecosistema, en casi 20 años habrán desaparecido De ser un símbolo de superioridad, pasarán a ser símbolo del fracaso, un sello funesto de nuestra locura, porque al fin y al cabo compartimos con ellos de manera indeleble nuestro destino La biodiversidad se está extinguiendo poco a poco, y con ello el humano peligra, cada vez más"
         La idea de crear un texto que involucrará las investigaciones más importantes de estos carnívoros surgió en 1998, durante una reunión entre Medellín, Redford y Robinson, cuando se dieron cuenta de que la información divulgada sobre el tercer gato más grande del mundo -después del tigre y el león- era prácticamente nula

Salvar a los vampiros 
 
Cuando en la ciudad de Monterrey se difundió la noticia de que el Chupacabras vivía en la Cueva de la Boca, Nuevo León, la multitud enardecida quiso prenderle fuego, pero fue detenida por una valla de niños
Eran los alumnos de la escuela Francisco Cirilo, de Villa de Santiago, quienes, a unos cuantos meses de haber iniciado un taller con especialistas ambientales, habían tomado una decisión: ellos mismos se encargarían de impedir que se les hiciera daño a los murciélagos de la zona
         Director del Programa para la Conservación de los Murciélagos Migratorios (PCMM), que involucra a instituciones mexicanas y estadunidenses, Medellín  insistió ante el medio científico mexicano que la anécdota reflejaba la importancia del proyecto de investigación, educativo y de conservación que él encabeza para valorar y respetar a los quirópteros y dejar de temerles:
         "El miedo a los murciélagos es algo irracional que ha sido impulsado por muchos medios de comunicación y en especial por el cine Debido a esto mucha gente tiende a destruirlos sin razón"
         Para cuidar que los vampiros fueran desmitificados como animales malignos y siniestros, Medellín creó una coalición que involucró a los gobiernos de ambos países e instituciones como Antropología e Historia de México, la Sociedad Mexicana de Mastozoología, la UNAM y la Universidad de Tennessee; la Bat Conservation International, y el US Fish and Wildlife Service
         Para Medellín, el miedo irracional a los murciélagos tiene que ver con aquellos que son murciélagos vampiros hematófagos y que, en realidad, son sólo tres especies de las 136 mencionadas: Desafortunadamente, por esta falta de conocimiento sobre los murciélagos la gente tiende a destruirlos sin razón
A veces, ha habido conflicto con murciélagos vampiros, que se alimentan de sangre Esto puede ser problemático en aquellos lugares donde abunda la ganadería Ellos llegan y se alimentan de las vacas Si alguno está infectado con el virus de la rabia, puede inocularlas
         Pero entonces, la reacción de los pobladores locales es ir a la cueva más cercana y acabar con todos los murciélagos que encuentran ahí Con eso se hacen un daño a sí mismos Porque a los murciélagos que realmente están eliminando es a los insectívoros y polinívoros
Los vampiros nunca se reúnen en grupos de más de 50 o 100 Cuando son miles o millones se trata de insectívoros, frugívoros o nectanívoros Y a éstos son a los que la gente les ha hecho un mal por ignorancia, lo cual significa que muchas especies se encuentran en peligro de extinción

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