MÉXICO, D F a 8 de julio (apro)- Al paso que va, Megan Fox pinta para convertirse en la estrella cinematográfica de los próximos años, esa estrella capaz de adornar las súper producciones hollywoodenses con el poder de convertirlas en negocios millonarios
Hace algunos años eran Nicole Kidman, Michelle Pfeifer y Angelina Jolie, por mencionar algunas actrices, pero ahora todo se perfila para que Megan Fox se convierta en un ícono tipo Marylin Monroe
Y no es descabellado, sólo basta con acercarse a ver Transformers 2: La venganza del caído (Tranformers: The Revenge of the Fallen, EU-2009) de Michael Bay, en donde, si bien el protagonista es Shia LaBeauf, Megan Fox se convierte en la sal y pimienta de la cinta
Sin ella, Transformers 2 no hubiera generado tanta expectativa, con todo y sus efectos especiales y el cariño que muchos le tienen a los robots transformables que vienen del espacio exterior Megan Fox es el gancho para ir a ver la cinta
Transformers 2 gira en torno a dos conflictos: por un lado, resulta que los malévolos Decepticons buscan desesperadamente vengarse de los Autobots, sólo que en esta ocasión tendrán ayuda: un antiquísimo guerrero llamado el caído, uno de los 13 Transformers primigenios (o sea, los primeros Transformers), está detrás de un complot Decepticon que eventualmente tiene como objetivo destruir a los Autobots y dominar la tierra
Por el otro, tenemos a Sam Witcky (LaBeauf), quien está a punto de irse a la universidad, viaje que contempla dejar a sus padres y a su bella novia Micaela (Fox), con quien se muestra incapaz de llevar la relación a la próxima etapa
Y como ocurrió en la entrega anterior, Sam se verá envuelto de nueva cuenta en la batalla intergaláctica, de tal forma que será pieza clave para la salvación de la Tierra
Para quienes gustan de historias que se desarrollan en medio de cosmogonías rebuscadas, Transformers 2 los dejará poco satisfechos; la historia de los 13 Transformers originales se cuenta a medias
Lo importante en este entrega es Megan Fox y las titánicas batallas entre Transformers y Decepticons, la historia no está bien desarrollada, es predecible y simplona La Beauf está bien, pero sólo sirve de patiño para su chica y los mentados robots, aunque en el papel deba ser al revés
Incluso, hasta parece que los mismos Transformers son sólo un pretexto para que Megan Fox haga sus pininos en la película
Resulta paradójico decir que Megan Fox vale su peso en oro, pues mide sólo 165 metros, y ya ni digamos cuánto pesa el punto es que la chica es una potencial máquina de hacer dinero para los estudios