MÉXICO, D F, 15 de julio (apro)- Para impulsar a la industria automotriz nacional, que recientemente ha registrado caídas de hasta 50% en sus ventas internas y de 40% en su producción, el presidente Felipe Calderón puso en marcha un plan de renovación vehicular, que arrancará con un presupuesto de 500 millones de pesos para sustituir los vehículos con 10 años o más de antigüedad
         Durante la clausura del VII Congreso Internacional de la Industria Automotriz, realizado este miércoles en la ciudad de México, el presidente dijo que con dicho programa podrá levantarse la demanda automotriz en el país, "aunque sea de manera marginal"
         Y él mismo explicó en qué consiste el programa: "La idea es que los propietarios de vehículos de 10 años o más de antigüedad puedan obtener un subsidio, una transferencia directa, de 15 mil pesos por parte del gobierno federal en la compra de un vehículo nuevo en el país"
         Añadió que "para poder obtener 15 mil pesos en la compra de un vehículo, los propietarios tendrán que llevar sus autos a las propias agencias o a un centro de reciclaje, para que procedan a ser destruidos, y con ello podamos sustituir el parque vehicular ineficiente o contaminante"
         Los vehículos que puedan obtenerse a través del programa deberán tener un valor que no exceda los 160 mil pesos, y sólo participarán los autos producidos en México o que estén armados en los países con los que se tienen tratados de libre comercio y que sean vendidos por fabricantes de autos establecidos en el país
         El presupuesto inicial de programa es de 500 millones de pesos y, según los resultados, podrá ampliarse a los mil millones de pesos, explicó el Ejecutivo
         Así mismo, hizo un llamado a los gobiernos estatales a sumarse al programa, toda vez que son ellos los beneficiarios de la recaudación, tanto del Impuesto a la Tenencia como del Impuesto sobre Automóviles Nuevos