Encuentro cercano con la familia de un narco
Cansada, dice, de las mentiras del gobierno sobre su esposo Vicente Carrillo Leyva, recluido en el penal de alta seguridad de El Altiplano, en el Estado de México, Celia Karina Quevedo propuso y dio una entrevista exclusiva a Proceso Durante dos horas y media, entreabrió las puertas de su vida y la de su familia compartida con alguien cuyo único delito, insiste, es el de ser hijo de Amado Carrillo, a quien como gran capo del narcotráfico las autoridades identificaban como El Señor de los Cielos
Patricia Dávila
Es de noche e inicia la semana De repente suena el teléfono Es una voz femenina que dice hablar de parte de Celia Karina Quevedo Gastélum, la esposa de Vicente Carrillo Leyva
?¿El hijo de Amado Carrillo, El Señor de los Cielos? ?pregunta la reportera
?Sí Ella va a ofrecer una rueda de prensa el próximo viernes ¿Le interesa a usted una entrevista?"
?Sí? ¿Cuándo puede ser?
?Cuando usted diga
?Lo único que solicito es que sea exclusiva?
?No hay problema
Al día siguiente, la reportera se comunica con el contacto de Celia Karina para definir la hora y el lugar de la entrevista El acuerdo es que sea fuera del Distrito Federal Veinticuatro horas después, acompañada de un fotógrafo acude al sitio acordado en la ciudad convenida, a muchos kilómetros de la capital del país La esposa de Carrillo Leyva no llega Su teléfono manda al buzón
A la mañana siguiente otro intento Por casualidad se hace contacto con una persona cercana a ella Se le explica la situación "En hora y media espéreme en este restaurante", pide el interlocutor Se cumple el tiempo No aparece Se disculpa telefónicamente
Dos horas después, cuando ya se da por cancelada la entrevista, entra una llamada Es ella Pide a la reportera que acuda a una gasolinera cercana y aclara: "Voy en un auto rojo"
Se da el encuentro La esposa de Carrillo Leyva va acompañada de otra persona Pide que no haya fotos; duda en definir el lugar de la entrevista Su acompañante hace una llamada Tras la consulta, expone: "Yo sé donde puede ser" El sitio es un motel de paso
Ya en el interior del cuarto, se definen los términos de la entrevista: insiste en que no se cite la ciudad en que se realiza y dice que ella también grabará la conversación Se confiesa nerviosa Teme que sus declaraciones afecten el proceso jurídico que se le sigue a su marido
La plática dura dos horas y media Al final, llega otra persona a la habitación e intenta convencerla de que anule la entrevista
?Si no defiendo yo a Vicente, ¿quién lo va a hacer? ?responde a la presión y mantiene el acuerdo con la reportera
En otra cosa se mantuvo firme: ni una foto
Este es un extracto de la entrevista que publica la revista Proceso en su edición 1711 que empezó a circular este domingo 16 de agosto
Patricia Dávila
Es de noche e inicia la semana De repente suena el teléfono Es una voz femenina que dice hablar de parte de Celia Karina Quevedo Gastélum, la esposa de Vicente Carrillo Leyva
?¿El hijo de Amado Carrillo, El Señor de los Cielos? ?pregunta la reportera
?Sí Ella va a ofrecer una rueda de prensa el próximo viernes ¿Le interesa a usted una entrevista?"
?Sí? ¿Cuándo puede ser?
?Cuando usted diga
?Lo único que solicito es que sea exclusiva?
?No hay problema
Al día siguiente, la reportera se comunica con el contacto de Celia Karina para definir la hora y el lugar de la entrevista El acuerdo es que sea fuera del Distrito Federal Veinticuatro horas después, acompañada de un fotógrafo acude al sitio acordado en la ciudad convenida, a muchos kilómetros de la capital del país La esposa de Carrillo Leyva no llega Su teléfono manda al buzón
A la mañana siguiente otro intento Por casualidad se hace contacto con una persona cercana a ella Se le explica la situación "En hora y media espéreme en este restaurante", pide el interlocutor Se cumple el tiempo No aparece Se disculpa telefónicamente
Dos horas después, cuando ya se da por cancelada la entrevista, entra una llamada Es ella Pide a la reportera que acuda a una gasolinera cercana y aclara: "Voy en un auto rojo"
Se da el encuentro La esposa de Carrillo Leyva va acompañada de otra persona Pide que no haya fotos; duda en definir el lugar de la entrevista Su acompañante hace una llamada Tras la consulta, expone: "Yo sé donde puede ser" El sitio es un motel de paso
Ya en el interior del cuarto, se definen los términos de la entrevista: insiste en que no se cite la ciudad en que se realiza y dice que ella también grabará la conversación Se confiesa nerviosa Teme que sus declaraciones afecten el proceso jurídico que se le sigue a su marido
La plática dura dos horas y media Al final, llega otra persona a la habitación e intenta convencerla de que anule la entrevista
?Si no defiendo yo a Vicente, ¿quién lo va a hacer? ?responde a la presión y mantiene el acuerdo con la reportera
En otra cosa se mantuvo firme: ni una foto
Este es un extracto de la entrevista que publica la revista Proceso en su edición 1711 que empezó a circular este domingo 16 de agosto