MÉXICO, D F, 2 de septiembre (apro)- Redescubierto como un "genio" de la pintura hace apenas un siglo, luego de haber sido poco valorado durante casi trescientos años, Domenikos Theotokopoulos El Greco representa una de las "evoluciones artísticas más excepcionales en la historia del arte, no sólo español, sino mundial" Así lo considera el investigador de arte José Redondo, curador junto con Ana Carmen Lavín de la exposición Domenikos Theotokopoulos, 1900, El Greco, integrada por un conjunto de 43 obras que por primera y única vez salen de España para exhibirse en México, en el Museo del Palacio de Bellas Artes, desde el 4 de septiembre A decir de Redondo, El Greco es un artista excepcional porque nació en un "código artístico" completamente distinto al nuestro Explica que el artista nació en la isla de Creta (1541) y, en sus inicios como pintor, realizó iconos a la manera bizantina Una pintura en la cual, dice, no existe la perspectiva, profundidad, volumetría de las figuras del arte occidental ni la psicología de los personajes En esos años Creta formaba parte de una colonia de la Serenísima República de Venecia Theotokopoulos marcha a Italia, y llega primero a Venecia y luego a Roma, y adquiere el "código artístico que ya no abandonará en toda su carrera, comienza a pintar como pintan los venecianos" De su primera etapa, contó Redondo, se conserva en una iglesia de la isla griega de Siros un único icono que representa la dormición (asunción) de la Virgen y en la cual firma "ya con la misma fórmula que usará en su obra en la etapa española, siempre en griego, en su lengua natal" y como Domenikos Theotokopoulos Durante la rueda de prensa en la cual se anunció la exposición en el Palacio de Bellas Artes, Redondo destacó que su título lleva el año 1900 por ser el momento en el cual se "redescubrió" al artista "como un genio más de la historia de la pintura" El pintor había sido olvidado y despreciado "por excéntrico" durante siglos y su "redescubrimiento" se inicia a finales del siglo XIX, con el movimiento artístico moderno, y luego más tarde a inicios del siglo XX con la llamada vanguardia Hacia 1902 el Museo del Prado le dedica una primera exposición monográfica y se reúne ahí una importante colección proveniente de diversos museos españoles y de acervos de iglesias donde aún había obras del artista A partir de entonces, refiere Redondo, El Greco es considerado un genio, y sus obras pasan a ser de las más codiciadas en el mercado del arte internacional, por lo cual "desgraciadamente para España" muchos de sus cuadros que estuvieron en la exposición de 1902 y que provenían de iglesias y conventos, algunos de ellos de la ciudad de Toledo, comenzaron a ser comprados por grandes coleccionistas extranjeros y ahora están en museos como el Metropolitan de Nueva York o la National Gallery de Londres La exposición constituye la primera en toda Latinoamérica que presenta una visión monográfica de El Greco Aunque son pocas las obras, se da cuenta "perfectamente" de su evolución artística Luego del "redescubrimiento" y la exposición de 1902, en 1908 se publicó el primer catálogo razonado del pintor, por el profesor Manuel Bartolomé Cossío Y en 1910 el marqués Benigno de la Vega Inclán, a quien se considera un pilar en la creación del concepto de turismo cultural en España, funda el Museo de El Greco en Toledo, ya que fue coleccionista y marchante de arte La muestra tiene obras de otros artistas relacionados con El Greco, entre ellos Joaquín Sorolla, de quien se incluye justamente el retrato de Vega Inclán, así como Raimundo de Madrazo, Sánchez Coello, Tristán, Passerotti y Martínez del Mazo Redondo no dudó en asegurar que la obra más importante del conjunto que se presenta en México es El martirio de San Sebastián, cuya historia es muy peculiar pues estuvo dividido en dos partes, no se sabe si debido a que alguna de ellas estaba en mal estado La parte de arriba perteneció al marqués de Casa Torres, quien lo donó al Museo del Prado La parte de abajo, las piernas, tuvieron una vida independiente pasando por diversas colecciones artísticas hasta que fue comprado por el mismo museo en una subasta de arte y fue entonces que pudieron unificarse las dos partes piezas La salida de España de este conjunto de cuarenta cuadros (prestados por los museos El Greco de Toledo, el Nacional del Prado de Madrid, el de Bellas Artes de Sevilla y el Nacional de Arte de Cataluña) fue posible porque se está restaurando el recinto de Toledo Las otras tres piezas del conjunto artístico pertenecen al Museo Soumaya de México La exposición estará abierta al público solamente dos meses, hasta el próximo 1 de noviembre