GUADALAJARA, Jal., 29 de octubre (apro).- El gobierno de Jalisco confirmó este viernes que en la emboscada de ayer contra policías en Jilotlán de los Dolores, en la que murieron nueve uniformados, participaron 50 sujetos que se desplazaban en vehículos de lujo y utilizaron granadas de fragmentación, así como rifles AR 15 y AK 47.

“Los atacaron por tres frentes y los superaron en número (…) eran alrededor de 50 personas del crimen organizado que emboscaron a las patrullas del estado, las cuales contaban con 20 elementos. Lamentablemente una de las granadas que lanzaron (los agresores) entró en la patrulla y mató a nueve elementos”, dijo el secretario general de Gobierno, Fernando Guzmán Pérez Peláez.

En conferencia de prensa, Guzmán demandó una depuración en los cuerpos de seguridad, luego de lo cual afirmó que los límites con Zacatecas, Colima, Nayarit, Aguascalientes y Michoacán son observados como fronteras “calientes” ante la presencia de grupos de grupos del crimen organizado.

En tanto, el gobernador Emilio González Márquez suspendió esta mañana su agenda normal de actividades y, con carácter de urgente, convocó  a su gabinete de seguridad para analizar los hechos de violencia de las últimas horas en Jalisco y la zona metropolitana.

En breve entrevista al salir de la reunión, el alcalde de Guadalajara, Jorge Aristóteles Sandoval, admitió que existe una alerta en los cuarteles policíacos, y que en las calles de la capital de Jalisco y los municipios conturbados se incrementó la vigilancia.

Además de la muerte de los nueve policías en Jilotlán de Dolores, las autoridades confirmaron que dos uniformados resultaron heridos y uno más está desaparecido.

Al ataque de ayer contra los agentes de la Secretaría de Seguridad Pública estatal se sumó uno más con dos granadas de fragmentación contra una vivienda en el municipio de Zapopan, con un saldo de dos menores y tres adultos lesionados.

Y, según denunció el diputado local del  PAN, Gustavo Macías Zambrano, también el jueves por la mañana fue levantado por varias horas el alcalde de Huejuquilla, Freddy Medina.

Por la tarde, la Procuraduría General de la República (PGR) dio a conocer que atrajo las investigaciones sobre la emboscada que sufrieron policías municipales.