PUERTO VALLARTA, Jal., 10 de noviembre (apro).- El secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora afirmó que ya inició el proceso de depuración del Instituto Nacional de Migración (INM), con el fin de que los funcionarios de esea institución “cumplan con la ley y se evite que sean ellos quienes atenten contra los derechos humanos de los migrantes o se corrompan”.   

Durante la primera sesión del Foro Mundial de Migración y Desarrollo 2010, que se realiza en esta ciudad, Blake dijo: “Debemos empezar en casa haciendo una limpieza y una vigilancia constante. Este ha sido también el llamado de las organizaciones civiles que han participado en esta primera parte del nuestro foro”.

“México –afirmó-- está avanzando en la consolidación de una política de Estado en materia migratoria, principalmente en lo que respecta a la trata de personas, de menores migrantes y violencia contra las mujeres”.

Señaló que uno de los avances de la administración calderonista es la reforma a la Ley General de Población que, dijo, “despenaliza la migración ilegal”, debido a que la migración “es una aspiración natural de los seres humanos para buscar mejores niveles y desarrollo”.

Blake enunció luego los “avances” del gobierno federal en materia de migratoria, entre los cuales destacó la agilización de trámites para los extranjeros que desean entrar al país de manera regular, “con lo que se han reducido de 59 a 20 los trámites migratorios que realizan los extranjeros que se internan en el país”.

El pasado 30 de abri, añadió, “se dio un gran paso” al incorporar la tecnología de la información con el Sistema Electrónico de Trámites Migratorios (SETRAM), con el que se pretende otorgar “un servicio muy eficaz”.

“Con estas medidas se da certeza a la autoridad y a los usuarios, ya que los documentos son expedidos por un sistema electrónico que permite verificar su legitimidad y su autenticidad”, agregó Blake, quien señaló que mientras esto se concreta, el gobierno está trabajando con el Congreso de la Unión para expedir una nueva Ley de Migración, “para planificar, definir, implementar y evaluar las políticas migratorias”.

México, prosiguió, “está trabajando en una estrategia internacional en defensa de los migrantes, como el convenio suscrito el pasado 31 de agosto para prevenir y combatir el secuestro de migrantes”.

En tanto, organizaciones de derechos humanos demandaron la desaparición del Foro Mundial de Migración y Desarrollo porque únicamente sirve para “despilfarrar” recursos públicos.

Luego de una reunión con el comisionado del INM, Salvador Beltrán, que duró aproximadamente una hora, Julia Ka Wong, en representación de la organización Madres y Familiares de Migrantes Hondureños Desaparecidos, afirmó que el Foro Mundial “no está creando políticas públicas para la protección de los derechos de los migrantes en el mundo”.

La activista, miembro del Comité de Derechos Humanos de Nueva York, dijo: “La voz auténtica de los migrantes y refugiados en todo el mundo es la Asamblea Internacional de Migrantes y Refugiados. En el Foro Mundial sólo se gasta dinero público y sólo representa los intereses de los opresores de los migrantes”.

Por su parte, al referires a la masacre de 72 migrantes de Centro y Sudamérca ocurrido en Tamaulipas, el sacerdote Flor María Rigoni, Premio Nacional de Derechos Humanos 2007, afirmó que está caso se ha banalizado al culpar sólo al crimen organizado de los hechos, sin que se haya analizado a fondo el asunto, en el que, dijo, también están involucrados funcionarios del INM y extranjeros, que “venden cada cabeza de migrante en mil o dos mil dólares”.

Rigoni, quien coordina las casas de migrantes en el país, instò a cambiar “el discurso de migración y desarrollo” del gobierno.