MÉXICO, D.F., 18 de febrero (apro).- El miedo a la muerte empujó al periodista radiofónico, Ricardo Chávez Aldana, a huir de Ciudad Juárez y refugiarse, junto con su familia, en El Paso, Texas, donde busca que las autoridades de ese país le den asilo político.
La pesadilla para él y su familia comenzó en noviembre pasado, apenas unos días después de que dos de sus sobrinos (Diego y Argenis Chávez Luis, de 15 y 17 años de edad) fueron asesinados.
A partir de ese momento, las llamadas amenazantes aumentaron de manera considerable, y se extendieron a sus familiares.
"Por eso decidí cambiar inmediatamente de residencia; llevo más de cuatro meses en El Paso, Texas, donde mi familia y yo nos sentimos más seguros, porque el trabajo periodístico en Ciudad Juárez cada día es más peligroso", comentó el periodistas en entrevista.
Chávez Aldana explicó que ya inició el proceso para que Estados Unidos le dé asilo político, y su primera audiencia está pactada para el 10 de octubre de 2010.
Mientras eso sucede, dijo, trabajará "de lo que sea" en El Paso, para sostener a sus hijos y esposa.
"El abogado nos dice que tengamos paciencia, es un proceso lento y complicado porque no tenemos una garantía que se logre, ya que Estados Unidos no otorga asilo político a perseguidos por narcotráfico, menos si vienen de México", puntualizó.
Ricardo Chávez conducía el noticiero policiaco de mediodía, Patrulla 800, en el que daba cuenta de la actividad delincuencial en la frontera, e incluso reportaba ejecuciones desde el lugar de los hechos.
Otros periodistas juarenses que esperan asilo político son: Jorge Luis Aguirre, de lapolaka.com; Emilio Gutiérrez Soto, del Diario de Juárez, y el primer visitador de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, Gustavo de la Rosa Hickerson. Todos ellos han sido amenazados de muertes, presuntamente por integrantes de la delincuencia organizada.