Niega Peña Nieto relación con protección al narco y espionaje
MÉXICO, D.F., 22 de febrero (apro).- El gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, minimizó hoy las versiones que lo vinculan a una presunta red de espionaje y la presunta protección de policía mexiquense a narcotraficantes, como lo reveló la revista Proceso en la edición de esta semana (número 1738).
Entrevistado después de la entrega de obras hidráulicas en el municipio de Huehuetoca, Estado de México, Peña Nieto señaló que se trata de “ataques infundados”, los cuales, atribuyó a los tiempos electorales.
Sin negar una sola línea de los reportajes publicados por la revista Proceso, el mandatario mexiquense aseguró que esos “ataques infundados” se irán acentuando conforme se acerquen las elecciones locales de 2011 para elegir gobernador.
Aunque evitó referirse a la supuesta red de espionaje orquesta por su administración en contra de diversos actores políticos, sociales y económicos, Peña Nieto lanzó el retó: si hay pruebas, que las presenten ante las autoridades correspondientes. Peña Nieto omitió mencionar que las información publicada por el semanario está sustentada en el expediente PGR/SIEDO/UEIDCS/280/08, en el cual un testigo protegido reveló a la Procuraduría General de la República la presunta red de protección policial al narcotráfico, en especial a La Familia michoacana, con el consentimiento del gobernador.
Peña Nieto insistió que la información carece de sustento y soporte, ya que “lo único que buscan es desviar la atención, descalificar y desacreditar”.
Al término de la ceremonia en la que entregó obras hidráulicas, como la ampliación de la red de agua potable y la introducción de 18.5 Kilómetros de tubería, con 1543 tomas domiciliarias, Peña Nieto accedió a responder las preguntas de los reporteros, a pesar de que no se tenía programada la entrevista en ese punto.
“Honestamente, me parece que es signo de los tiempos que estamos viviendo; signo también de las especulaciones futuras y yo creo que nos aprestamos a ver este tipo de señalamientos de campañas, de denostaciones (sic), de estar descalificando lo que se venga actuando”, reiteró tratando de aparentar serenidad.
Fue en ese momento, cuando subrayó: “Aquí nos remitimos a decir: si hay alguna prueba, si hay algo que vaya en encargo a lo que se imputa, pues que se señale y se exhiba ante las autoridades competentes.
“No deben sorprendernos estas campañas que, me parece que cada día estarán cobrando mayor fuerza de desprestigio y de descalificación, y a lo cual nosotros no habremos ni ocuparnos ni distraernos de lo que estamos haciendo. Lo nuestro no es más que una sola tarea, que es trabajar, agregó.
Cuando se le preguntó si se trata de una “guerra sucia” en su contra, Peña Nieto admitió que no puede afirmar eso. Sin embargo, agregó: “Dejo que sean ustedes (la prensa) quienes tengan juicio de lo que estén leyendo, observando, cuando poco sustento o soporte tienen y lo único que buscan es desviar la atención, descalificar y desacreditar.”
En su edición de esta semana, la revista Proceso reveló que, de acuerdo con el expediente PGR/SIEDO/UEIDCS/280/09, Peña Nieto “permitió el posicionamiento del cártel de La Familia en toda la entidad y ordenó echar a Los Zetas del territorio mexiquense, lo que derivó en disputas y muertes”.
Asimismo, el reportero Ricardo Ravelo dio a conocer que, en el mismo expediente se asienta que “la PGR reconoció también los pormenores de los vínculos que comenzaban a tejer miembros de la organización delictiva La Familia michoacana tanto con (José) Manzur (delegado de la institución en el Estado de México) como con agentes estatales y miembros de la escolta del actual secretario de Gobierno, Humberto Benítez Treviño, cuyo entorno se ha visto envuelto en sospechas por las presuntas complicidades de su personal de confianza con el narcotráfico”.
Luego, para enfriar el tema, Peña Nieto habló sobre las actividades que realiza su administración para superar la crisis provocada las lluvias hace dos semanas en la zona oriente de la entidad.