MÉXICO, D.F., 24 de febrero (apro).- Los anales de García (1786-1841) es un vasto estudio y recopilación documental exhaustiva del periodista Sergio Candelas Villalba, quien, a decir de los editores Miguel Ángel Porrúa, "dedicó diez años a seguirle los pasos al protagonista García en archivos, bibliotecas y hemerotecas nacionales y extranjeras".

     En esta significativa publicación, en la cual Porrúa se une en su serie La Historia a diversas instituciones zacatecanas (Gobierno del Estado, Instituto Zacatecano de Cultura Ramón López Velarde, Universidad Autónoma de Zacatecas y Tribunal Superior de Justicia del Estado de Zacatecas) y a la Comisión Conmemorativa Zacatecas del bicentenario de la Independencia y centenario de la Revolución en su Biblioteca de los Centenarios 1810-1910-2010, se recoge la participación fundamental de uno de los liberales más sobresalientes, Francisco García, en los debates sobre federalismo y centralismo en el siglo XlX, al lado de Ramos Arizpe, Gómez Farías y el doctor Mora.
     Compuesto por 1261 páginas, el volumen, explican los editores, "reúne documentos, testimonios, notas periodísticas y reflexiones sobre el proceso legislativo de la nueva república".
     Informa además que "son trascendentes los debates de los primeros diputados y senadores en el Congreso nacional", por lo cual "la crónica parlamentaria es narrada aquí con motivo de la aprehensión de un grupo de diputados ordenada por Iturbide, que originó acaloradas sesiones en las que los legisladores defienden su inmunidad, los que le condujo a disolver el Congreso en octubre de 1822, circunstancia que obligó al emperador a abdicar al trono y desterrarse a Italia".
     En un fragmento de su prólogo, Candelas Villalba explica las intenciones de su libro para introducirnos al rescate de esta figura sustancial del zacatecano Francisco García, quien, derrotado en su propio territorio por Santa Anna, vio cumplida así, lamentablemente, la profecía de Teresa de Mier sobre la derrota del federalismo. Éste es el fragmento:

         “Los Anales están escritos  en forma de memorias, en parte por el testimonio mismo de García y por el cronista que deambuló por la vida nacional por más de  35 años para hacer partícipe al lector de la realidad histórica a través de papeles amarillentos, describiendo con fidelidad los hechos más notables del acontecer de los años difíciles de la consumación de la Independencia.

         “Las escenas están trazadas tal como sucedieron, las intrigas son auténticas, muy semejantes a las del tercer milenio. Se pretende recrear este periodo de la historia mexicana. El propósito no fue de escribir una fantasía, sino la verdad de un hombre ejemplar.

         “No resulta fácil para nosotros comprender la clase de hombre que fue García, porque había muchas cosas ocultas en el misterio, por su misma timidez y modestia, no fue un ser protagónico, otros, si lograron dejarse ver, y ahí están, en letras de molde, plasmados en la historia y esculpidos en monumentos de bronce, figurando inmerecidamente.

         “El 1 de diciembre de 1982 arribó al gobierno de México Miguel de la Madrid; nombró como su secretario de Educación Pública a Jesús Reyes Heroles, el hombre de Tuxpan, Veracruz, cuya vida y obra periódicamente es puesta en a balanza de valor por los hombres de la política y de la cultura, de manera, cada vez más, notable por positiva y aleccionadora porque de ella sobresalió, siempre, su elevado espíritu de humanismo y justicia social.

         “Heroles escribió 25 obras, algunas se volvieron clásicas entre políticos e intelectuales mexicanos. Considerado el padre de la Reforma política que concilió acciones y voluntades contrapuestas en bien del país, escribió en tres tomos El liberalismo mexicano; las ideas democráticas en México: Independencia y Reforma, Rousseau y el liberalismo mexicano, Obras de Mariano Otero, México: historia y política; En busca de la razón del Estado, José María Gutiérrez Estrada, Gobernante, entre otras.

         “Jesús Reyes Heroles fue un admirador de los liberales mexicanos que surgieron a la palestra de la política mexicana durante la elaboración de las ideas en el Congreso Constituyente del 24 de febrero de 1822, se interesó en la necesidad de enlazar las interrogantes de nuestro tiempo, sin excepción alguna, en el ideario que los hombre de ayer había formulado en su afán de promover el desarrollo nacional independiente, la República Federal democrática y una sociedad capaz e dar iguales oportunidades a sus integrantes.

         “Don Jesús el de Veracruz, siendo Secretario de Educación Pública  convocó el 23 de junio de 1983 a un concurso de Ensayo Histórico-biográfico acerca de la vida y obra de don Francisco García Salinas, con testimonios excepcionales de la historia de México, considerando que el nombrado por políticos y periodistas de sus tiempo como el gobernantes modelo y modelo de gobernantes, debía ser honrado por las generaciones actuales y por las que en el futuro nos sucedan, partiendo del conocimiento más completo de las condiciones sociales y políticas en que actuó y de los obstáculos que hubo de vencer para cumplir con las exigencias de su tiempo y sus compatriotas.

“El autor de esta investigación y otros historiadores y periodistas se interesaron en el tema, emprendí el viaje a la Ciudad de México en busca de datos del personaje que debían obrar en el Archivo General de la Nación, en la Hemeroteca y Biblioteca nacionales de Ciudad Universitaria, en las bibliotecas de la Secretaría de Hacienda y de Relaciones Exteriores. Al cabo de un mes de investigación me di cuenta de la magnitud del investigado y prescindí de concursar, pues, hacerlo, requería de tiempo y paciencia.”

--FIN DE NOTA--