La moda en películas 3D
MÉXICO, D.F., 26 de marzo (apro).- A partir de Avatar, todo parece estar en 3D. Obviamente no porque la cinta de James Cameron haya sido la primera, pero luego de los resultados obtenidos, tanto en diseño de arte como en taquilla, está claro que el 3D se convierte casi casi en un imperativo de los estudios hollywoodenses.
Así pues, desde Tron, Furia de Titanes y Harry Potter, hasta Los Pitufos, los blockbusters estarán en tercera dimensión. ¿Es una exageración? ¿Una moda pasajera?
Tal vez, como también puede que sea sumamente engorroso para algunas personas, sobre todo si pensamos que el 3D se acerca lentamente a la televisión y que muy pronto podremos estar viviendo la magia de la tercera dimensión sólo con una tele de plasma y nuestros lentes en la comodidad de nuestro hogar.
Pero hay que tener en cuenta dos cosas. En primer lugar, más allá de toda moda, la tecnología y el cine siempre han ido de la mano. Ésta es la que hace avanzar al cine; aunque en un principio produzca éxitos comerciales, en algún momento un clásico emerge de su seno.
En segundo lugar está el Internet. Las descargas digitales han hecho que mucha gente vea las cintas antes de que se estrenen en las salas de cine e incluso en video, lo cual genera malestar en la industria cinematográfica, que si bien no está en declive como la industria musical, no es algo que deba tomarse a la ligera.
La experiencia 3D en Internet, a través del intercambio de archivos, todavía es irrepetible. Asistir a las salas cinematográficas para ver Avatar es imperativo; todo mundo concordará con que, si no es en 3D, Avatar es una sombra de lo que debe ser.
Así pues, mientras la industria cinematográfica e incluso televisiva comenzará a vivir un boom tecnológico, la industria musical ya está sumamente estancada y a merced de la piratería y las descargas gratuitas… al menos hasta que la tecnología le dé un empujoncito y los usuarios tengan de nuevo la necesidad de pagar de nuevo.
Habrá que estar preparados para las sorpresas que Hollywood traerá. En el ínter veremos muchas porquerías, pero seguramente saldrá un clásico que nos hará olvidar toda la basura que tuvimos que soportar.
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