Narcotráfico y migración, en la agenda del encuentro Obama-Calderón
WASHINGTON, 18 de mayo (apro).- La Casa Blanca descartó hoy que en la visita de Estado del presidente Felipe Calderón se registren avances sustantivos ni, menos aún, acuerdos en temas pendientes de la agenda bilateral, como el acceso de los camiones de carga mexicano al territorio estadunidense, aunque adelantó que se refrendarán los compromisos de cooperación en la lucha contra el narcotráfico y en el ámbito migratorio.
“El presidente (Barack Obama) confirmará su compromiso de trabajar con el gobierno de Calderón y con el Congreso (estadunidense) para abordar las preocupaciones legítimas que existen con respecto al programa camionero mexicano”, dijo en teleconferencia un funcionario de la Casa Blanca que pidió reservar su identidad.
“Revisarán propuestas concretas y mecanismos que saldrán de las conversaciones para seguir adelante en la cooperación para fortalecer la situación económica, tanto en México como en Estados Unidos”, subrayó.
El funcionario de la Casa Blanca, quien habló con los reporteros desde una línea telefónica y no en persona en la sala de prensa de la mansión presidencial como se acostumbra en el caso de las visitas de Estado de mandatarios extranjeros, destacó que Obama y Calderón dejarán en claro su deseo de colaborar en materia de seguridad fronteriza, en energía, en el tema migratorio y en la necesidad de mejorar el nivel de competitividad económica que se requiere en ambas naciones.
Explicó que, en el tema migratorio, Obama subrayará su compromiso de conseguir una amplia reforma para regularizar el estatus de residencia de unos 11 millones de indocumentados, pero con la premisa de que para lograrlo se requiere del respaldo de los demócratas y republicanos en el Congreso federal estadunidense.
“Ciertamente anticipamos y le damos la bienvenida a una conversación sobre la nueva ley aprobada en el estado de Arizona, aunque entendemos que este es un asunto con resonancia en México y que es un caso de profunda preocupación para el gobierno mexicano”, admitió el funcionario de la Casa Blanca.
La reunión entre Calderón y Obama, que inicia este miércoles con una ceremonia oficial en la Casa Blanca, incluye una conferencia de prensa conjunta y una cena de Estado en honor del mandatario mexicano.
La agenda de actividades de Calderón en Washington incluye un discurso ante una sesión conjunta del Congreso estadunidense para este jueves y también prevé el encuentro con líderes de la comunidad hispana para hablar precisamente de la confrontación legal a la ley antiinmigrante de Arizona.
Además, se tiene previsto un debate a puerta cerrada con líderes de opinión, una comida en el Departamento de Estado y una intervención ante la Cámara de Comercio de Estados Unidos y, algo que era inusual entre los presidentes de México: presentar una ofrenda floral ante la Tumba del Soldado Desconocido, en el cementerio de Arlington.
Calderón entregará a los familiares del finado senador Ted Kennedy la condecoración del Águila Azteca, en reconocimiento a los esfuerzos que hizo el senador demócrata por Massachussets a favor de una reforma migratoria integral.
“Obviamente las conversaciones entre los dos presidentes también se concentrarán en el tema del fortalecimiento de la seguridad en México y Estados Unidos para desmantelar la capacidad de operación de las organizaciones del tráfico de las drogas”, dijo el funcionario de la Casa Blanca, quien anotó que en esta materia el gobierno de Calderón está alcanzando algunos éxitos.
Sin embargo, al preguntarle si Estados Unidos mide el éxito de la guerra contra el narcotráfico por el número de muertos, el funcionario de la Casa Blanca simplemente se salió por la tangente.
“Vemos un esfuerzo consistente por parte de las autoridades mexicanas para mantener presión sobre los narcotraficantes, y esta es una alianza que apoyamos donde el éxito no es algo que se pueda palpar de un día para otro, sino que requiere un compromiso de largo plazo”, acotó.