CANCÚN, Q. Roo., 27 de mayo (apro).- La familia del general Mauro Tello Quiñones, quien fue asesinado junto con dos de sus colaboradores en febrero del año pasado, tomó con reservas las versiones que implican al candidato al gobierno de esta entidad por la alianza PRD-PT-Convergencia, Gregorio Sánchez, quien se encuentra en prisión, acusado de nexos con el narco, con el crimen del militar.

En un comunicado difundido por la abogada Erika García Arévalo, los familiares apuntaron que “no tenemos evidencia para admitir, de ninguna manera, que contamos con una versión oficial de que el ingeniero (Gregorio) Sánchez Martínez se encuentra involucrado” en el asesinato del general.

Por el contrario, apuntaron que reconocieron que luego del crimen ocurrido en febrero de 2009 Greg  Sánchez no sólo se solidarizó con ellos, sino que los ayudó.

En el comunicado, la familia Tello Quiñónez exigió también que se le deslinde de actos que pudieran tener connotación política, y que tanto el proceso que se le sigue al candidato opositor, como las investigaciones sobre el homicidio del general Tello, se lleven a cabo con absoluta transparencia y no haya simulaciones.

Asimismo, destacó que la familia se mantendrá “a la expectativa del desarrollo” del proceso que se le sigue al alcalde con licencia.

Finalmente,  la familia Tello Quiñones reiteró su exigencia a los órganos judiciales de deslindarla de “actos que pudieran tener connotaciones políticas”, con el fin de encontrar la “verdad jurídica de todos los hechos”.

En marzo del año pasado, la PGR detuvo a dos colaboradores cercanos a Greg Sánchez como presuntos responsables del crimen del general Tello Quiñónez: Francisco Velasco Delgado, quien fungía como secretario municipal de Seguridad Pública, y Marco Antonio Mejía, quien se desempeñaba como director de la cárcel municipal de Cancún.

Ambos se encuentran recluidos en la prisión federal de Tepic, Nayarit, la misma donde se encuentra el candidato a la gubernatura por la coalición PRD, PT, Convergencia.