Descubren otra narcofosa en NL

miércoles, 28 de julio de 2010 · 01:00

MONTERREY, NL, 28 de julio (apro).- Autoridades estatales descubrieron hoy otra narcofosa en un predio del municipio de Juárez. El hallazgo, reportado cerca de las tres de la tarde, movilizó a elementos del Ejército, de la Policía Ministerial y de Seguridad Pública del Estado.

La fosa se ubica en un terreno localizado a unos 2 kilómetros del cruce de la calle San Pablo y Camino a San Roque, a la altura de la colonia Hacienda Real.

Hasta el momento, sólo un cadáver fue encontrado en el interior de una fosa en Juárez, municipio en el que recientemente han sido localizados varios cementerios clandestinos.

El cuerpo estaba semienterrado en un hoyo cavado en el suelo del fraccionamiento. A unos metros de esta excavación se encontraban otros dos pozos vacíos, que parecían ser preparativos para otros entierros.

El área está ubicada a unos cinco kilómetros de distancia de donde se hizo el anterior hallazgo masivo de ejecutados, en esta localidad ubicada a 20 kilómetros al oriente de Monterrey.

Extraoficialmente se informó que el cadáver es de un hombre de 1.70 metros, robusto y sin señas particulares como tatuajes. Portaba únicamente ropa interior y, a su lado, había un pantalón de mezclilla y camisa a cuadros.

Tenía las manos esposadas por el frente y no fueron reveladas las causas de su muerte.

Se espera que los trabajos en esta zona despoblada continúen en el transcurso de la noche y la madrugada para determinar si ahí hay más cadáveres o preparación de sepulturas.

Entre el 29 de junio y el 1 de julio, elementos del Ejército encontraron en una hacienda abandonada del ejido de Santa Ana, en la sierra del Cerro de la Silla de este municipio, diez cadáveres de hombres que habían sido ejecutados.

Posteriormente, entre el 22 y el 24 de julio, soldados encontraron en un espacio de tres hectáreas de la Hacienda Calderón, a un lado del fraccionamiento Las Águilas, uno de los cementerios para ejecutados más grandes encontrados en los últimos años en México.

En por lo menos nueve fosas fueron hallados, inicialmente, 51 cadáveres de personas que habían sido ejecutadas presumiblemente por el crimen organizado.

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