Cien mil damnificados en Coahuila; poblados bajo el agua
SALTILLO, Coah. 6 de julio.- Las persistentes lluvias que han caído en la entidad, luego del paso del huracán Alex, han provocado la inundación de ciudades, poblados y comunidades rurales que, en el segundo día de la contingencia, arroja un saldo de por lo menos 100 mil damnificados.
De acuerdo con el gobernador Humberto Moreira, al menos 10 mil personas habrían “perdido todo” en los últimos dos días.
Los daños materiales superan los mil millones de pesos, en el peor desastre natural de la historia de la entidad, que afecta a 35 de los 38 municipios, 14 de los cuales se encuentran bajo las aguas.
Hasta el momento, hay decenas de reportes de personas desaparecidas, lo que no ha sido confirmado por las autoridades.
Hasta ahora no ha sido posible hacer un diagnóstico total ni cuantificar con exactitud los daños materiales debido a que la contingencia continúa, mientras se esperan más lluvias en las próximas horas.
Al menos 17 municipios se encuentran incomunicados y sólo se puede llegar a ellos en helicóptero.
En el segundo día de la contingencia, el desbordamiento de los ríos Sabinas, Salado y Álamos, en la región carbonífera; Escondido, San Rodrigo y Bravo, en la zona fronteriza, mantiene incomunicada la zona norte del estado, en unos 150 kilómetros antes de la frontera con Estados Unidos.
Las principales afectaciones se registran en San Juan de Sabinas (conocido como Nueva Rosita, al ser la cabecera municipal), Sabinas, Múzquiz, Juárez, Progreso, Sacramento y Nadadores.
Sabinas ha quedado prácticamente cubierto por el agua por el desbordamiento del río del mismo nombre.
En Sabinas han sido evacuadas al menos cinco mil personas. Ahí, el nivel del agua en zona urbana alcanza hasta 10 metros de altura.
Tres helicópteros y avionetas realizaron hoy viajes continuos para llevar víveres. Además, en comunidades rurales apartadas, como Celemania, en Nadadores, la evacuación se tuvo que hacer por aire.
El Río Álamos, ubicado en San Juan de Sabinas, conecta con el río Sabinas que, a su vez, conduce el agua por el municipio de Juárez, hasta la presa Venustiano Carranza (conocida como “Don Martín”), localizada en el límite de Coahuila, con Anáhuac, Nuevo León. De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), está a un 115% de su capacidad, por lo que tuvieron que ser desalojadas unas 18 mil personas del municipio nuevoleonés.
La Conagua informó que por la mañana habían logrado abrir 12 de las 26 compuertas y se espera que en las próximas horas se logre desfogar el afluente.
En tanto, en la zona norte de Coahuila también se desbordaron ríos y arroyos, lo que mantiene a la región en estado de emergencia.
Ante la crecida del Río Escondido, la comunidad de Villa de Fuente, perteneciente a Piedras Negras, fue evacuada hoy en medio de una psicosis general.
Los desbordamientos de los ríos Escondido y San Antonio han dejado inundaciones de grandes proporciones en Villa de Fuente, luego de que en 2004 y 2007, la comunidad fue devastada por las crecidas.
El río Escondido nace desde una zona serrana del municipio de Zaragoza y atraviesa, Morelos y Nava en la región conocida como los Cinco Manantiales. Ahí también están afectados los municipios de Allende y Villa Unión.
La crecida de los ríos Escondido y San Antonio afectó hoy a Piedras Negras, donde ayer fueron desalojadas cientos de familias que habitan en la rivera del río Bravo.
Desde la presa La Amistad, en Ciudad Acuña, que se encuentra a un 120 por ciento de su capacidad, el agua es incontenible y ya ha causado severos daños en infraestructura, así como el derrumbe de viviendas ubicadas en los márgenes del arroyo Las Vacas, de ese municipio.
Tres mil personas fueron evacuadas por los desbordamientos del arroyo Las Vacas y río Escondido.
Además, el desbordamiento de represas y arroyos en la zona norte de Coahuila, ha destruido tramos carreteros y caminos rurales, por lo que 17 municipios se encuentran incomunicados, ya que al menos 20 puentes se colapsaron.
La zona tiene una vocación económica agrícola y ganadera. Hasta el momento miles de hectáreas de cultivo y miles de cabezas de ganado han quedado bajo el agua, pero el impacto económico no ha sido cuantificado.
La actividad minera carbonífera de la zona está suspendida por lo menos durante dos semanas y hasta nuevo aviso. Debido a la gran cantidad de estructuras mineras, muchas de ellas en pésimas condiciones o abandonadas, han provocado temor por posibles reblandecimientos y hundimientos.
El coordinador de Programas Sociales del gobierno estatal, Samuel Rodríguez Martínez, afirmó que no existen personas en riesgo, ya que son atendidas en albergues.
Los municipios con mayor afectaciones son: Sabinas, Muzquiz, San Juan de Sabinas, Juárez y Progreso, en la región carbonífera; Sacramento y Nadadores, en la región Centro; Allende, Zaragoza, Morelos, Nava y Villa Unión, en la región Cinco Manantiales; las fronterizas Ciudad Acuña y Piedras Negras, en la región norte.
Además, en el sureste han resultado afectados Parras de la Fuente y, principalmente, General Cepeda.
De acuerdo con las autoridades, se esperan más lluvias en las próximas horas.