MÉXICO, D.F., 1 de septiembre (apro).- José Luis Carrizales Coronado, alias “El Tubi”, presunto capo del cártel de Sinaloa, fue asesinado la noche del martes en el penal de Nuevo Laredo, Tamaulipas, tras una riña con un interno que lo hirió de muerte con una puntilla.

Según el periódico El Norte, que cita a diversas fuentes de las policíacas, el capo había sido trasladado del reclusorio de Puente Grande, Jalisco, de donde había sido liberado al ser absuelto de secuestro, al de Tamaulipas, donde tenía cuentas pendientes.

De acuerdo con fuentes de la secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas, “El Tubi” falleció a las seis de la tarde en los baños del Módulo II del penal neolaredense.

En ese lugar, Carrizales se enfrentó a golpes con uno de los internos. Durante la riña, el rival de “El Tubi” sacó un objeto punzante y le infirió varias heridas al presunto pistolero, ocasionándole la muerte.

El Norte exhibe una fotografía de un hombre tirado, a quien se le identifica como Carrizales.

“El Tubi” fue detenido en un restaurante Vips, al sur de Monterrey, el 16 de agosto del 2005 junto con los integrantes de una célula del Cártel de Sinaloa.

Se le procesó por triple secuestro y fue recluido al penal de Puente Grande, Jalisco.

Mientras estaba en prisión, el 5 de septiembre del 2006 fue asesinado el entonces director de la Agencia estatal de Investigaciones, Marcelo Garza, quien había encabezado el operativo de su captura.

El 21 de enero del 2008 fue acribillado en esta ciudad el juez Ernesto Palacios, que llevaba el juicio en contra de “El Tubi”.