MÉXICO, D.F., 6 de septiembre (apro).- Personal del Servicio Médico Forense informó hoy que 42 de los 55 cuerpos exhumados en una narcofosa localizada en el respiradero de una mina en Taxco de Alarcón, fueron depositados hoy en la fosa común, luego de que ninguna de las víctimas fue reclamada.
    Desde el pasado 29 de mayo en que se registró el hallazgo de los cadáveres arrojados al fondo de una bocamina ubicada en las inmediaciones del poblado de San Francisco Cuadra, sólo fueron identificados 13 cuerpos, entre ellos el del director de la cárcel de Iguala, Daniel Bravo Mota, levantado junto con un psicólogo del penal el pasado 24 de mayo.
    Desde las 7:30 de la mañana de este lunes, el coordinador del Semefo en esta capital, Cristian Cruz Tapia, ordenó el traslado de los cuerpos al panteón municipal de Chilpancingo, al norte de la ciudad, donde fueron arrojados en dos fosas.
Durante el periodo que los cuerpos permanecieron en el Semefo de Chilpancingo, decenas de familiares de desaparecidos acudieron, de distintos puntos del país, para tratar de identificar a las víctimas de la narcoviolencia que se vive en la entidad.
    El hallazgo de la narcofosa de Taxco ocurrió luego de que soldados detuvieron en una casa de seguridad de Iguala a 15 hombres, en su mayoría jóvenes, que fueron identificados como miembros de una célula de sicarios e informantes al servicio de Édgar Valdez Villarreal, La Barbie, que operaban en la zona Centro y Norte de la entidad.
    El día del hallazgo fueron exhumados 25 cadáveres a una profundidad de 150 metros, dentro de un respiradero de la mira La Concha; al cabo de varias semanas la cifra aumentó a 55.
    El director del Semefo aclaró que aun cuando los cadáveres ya fueron depositados en la fosa común, el caso permanece abierto, ya que la dependencia mantiene en resguardo muestras de ADN obtenidas de trozos de piel y hueso de cada uno de los cadáveres.